¿ Quién emboscó a quién ?.
El Consejero de Interior del País Vasco, revela detalles del tiroteo
donde murió un joven voluntario de ETA y resultaron heridos dos policias.
El domingo, los primeros teletipos decian que los agentes «sorprendieron» al
comando. Ahora, el consejero de interior confirma que la ertzaintza busca no
a una, sino a dos personas Javier Balza reveló ayer detalles nuevos que
abren diversas incógnitas sobre lo ocurrido el pasado domingo en el puerto
de Herrera. El consejero de Interior explicó que el vehículo utilizado
como «cebo» por los miembros del supuesto comando de ETA falló ya antes
del tiroteo. Este dato puede ir en coherencia con los primeros teletipos aparecidos
el domingo, que, citando fuentes policiales extraoficiales, indicaban que los
ertzainas «sorprendieron» a los jóvenes tras robar el coche. Balza insiste,
en cualquier caso, en afirmar que se trató de una emboscada con este
vehículo como cebo.
El consejero de Interior del Gobierno de Lakua, Javier Balza, aportó
ayer datos novedosos sobre el tiroteo acontecido en la noche del domingo en
el puerto de Herrera y que se saldó con la muerte de Arkaitz Otazua y
dos ertzainas heridos. Lo hizo en una entrevista en Radio Euskadi, donde matizó
sus declaraciones del lunes, cuando calificó de «extraño» el modus
ope- randi del supuesto atentado. Balza subrayó ayer, por contra, que
esa forma de actuar «no revela una peor organización».
«Hablamos, al principio, de que algo había fallado, no sólo por
la oportunidad que tuvieron los agentes de repeler el atentado, sino porque
se habían producido fallos en el propio vehículo que habían
utilizado de cebo, antes y después del atentado, y lo tuvieron que abandonar.
Habían abandonado allí material y documentaciones», indicó.
El consejero de Interior no explicó de dónde concluye que el coche
supuestamente robado ya se averió antes del tiroteo: en el primer momento,
sólo se indicó que había fallado después, por lo
que los jóvenes habían tenido que huir a pie.
Al hilo de ello, cabe citar que en un primer momento, pocos minutos después
del suceso, la agencia Europa Press envió un teletipo basado en fuentes
policiales cuyo titular era: «Los ertzainas tiroteados sorprendieron a los agresores
tras haber robado un coche y maniatar a sus agresores».
Posteriormente, los titulares comenzaron a utilizar las palabras «emboscada»
y «trampa», en consonancia con la versión oficial difundida por Balza
en su visita nocturna al hospital.
Esta destaca que los tres miembros de este supuesto comando -Balza confirmó
ayer la cifra- subieron desde Entrena (La Rioja) hasta el puerto de Herrera
en un vehículo Ford Mondeo gris que por el momento no ha sido hallado.
Una vez en el desvío al «Balcón de Rioja», se afirma que los integrantes
del grupo robaron otro coche -sus propietarios aparecieron atados en un árbol
cercano-. Según se dijo, cruzaron este vehículo en la carretera
y llamaron entonces al servicio de urgencia para pedir ayuda simulando un accidente.
Antes o después de la supuesta llamada, además, trasladaron «material
y documentaciones» del Ford Mondeo al coche robado, según relató
Balza, quien aseguró que estos documentos permitieron «identificar a
los tres terroristas». Estos papeles habrían sido abandonados en la huida,
lo que sirvió a algunos periódicos para definir el supuesto ataque
como «chapuza».
Javier Balza también expuso las suposiciones policiales sobre otra cuestión
inhabitual: el uso de una escopeta como arma para un atentado, del que apenas
hay precedentes. Si bien el primer día admitió su extrañeza
por ello, ayer cambió el tono totalmente: «Esa era una zona muy solitaria
en la que, con una escopeta de postas, lo lógico es que se hubiera producido
una inmovilización de la patrulla y el propósito de los terroristas
era rematarlos, a través de las pistolas», especuló.
Según su versión, ante «la oportunidad de los agentes de repeler
el atentado, tuvieron que salir huyendo».
Precisó que los tres activistas «conformaban un comando exclusivamente
formado por personas no identificadas con anterioridad», integradas dentro de
«la estructura del 'complejo Bizkaia' aunque sin conexión directa» con
las personas detenidas en este herrialde por la Ertzaintza la pasada semana.
A juicio de Javier Balza, la del domingo fue «probablemente» la primera acción
de este grupo. Reconoce que conocían los nombres desde el principio Javier
Balza declaró ayer que conocía desde el principio las identidades
de los tres activistas que participaron en el tiroteo. Cabe recordar que los
familiares de Arkaitz Otazua se enteraron del fallecimiento a través
de filtraciones procedentes de Madrid y que éstas adquirieron tintes
de realidad una vez que la Ertzaintza acudió a registrar su domicilio
de Bilbo.
Oficialmente, la Ertzaintza sólo ha dado un nombre: el de Asier Mardones.
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