PAIS VASCO

Gara
Los familiares y el abogado de los arrestados en esta última redada de la Ertzaintza denunciaron ayer que «en Arkaute la Ertzaintza tortura, como la Guardia Civil en Intxaurrondo». Responsabilizaron a Javier Balza, consejero de Interior de Lakua, y al tripartito de las actuaciones denunciadas por sus allegados y llamaron a participar en la manifestación que a partir de las 20.00 de hoy recorrerá las calles de Santurtzi.

«En Arkaute la Ertzaintza tortura, como la Guardia Civil en Intxaurrondo». Así de contundentes se mostraron en rueda de prensa el abogado Alfonso Zenon y familiares de los detenidos en el marco de la redada iniciada hace una semana por la Ertzaintza. Además, exigieron responsabilidades a Lakua, al considerar que «no ha cumplido absolutamente para nada lo que dice sobre defender a los detenidos y sus derechos».

Todos ellos comparecieron tras una pancarta que reclamaba «Torturari stop» y recalcaron algunos detalles del trato dispensado tanto en el arresto como en los días de incomunicación: «Música a todo volumen, gritos al oído, posturas forzadas, gritos de otros detenidos, amenazas sexuales o de índole familiar, golpes fuertes pero al mismo tiempo controlados para que no se percibieran las marcas en el cuerpo, continuos zarandeos entre los agentes, no poder conciliar el sueño, desorientación continua sin saber ni dónde están, ni qué hora es ...» El abogado Zenon señaló que los arrestados «sufren hasta que hacen una declaración autoinculpatoria o hasta que se acerca el momento en el que tienen que ir a Madrid». Como ejemplo de lo ocurrido en dependencias policiales, relató que uno de los detenidos comunicó reiteradamente a los ertzainas que tenía que ir al baño, pero al no darle permiso, «se lo tuvo que hacer encima tres veces. Entonces, el detenido pidió que lo examinara el forense o el juez con objeto de que vieran lo que le habían hecho, pero por el contrario, los agentes le obligaron a desnudarse, ducharse y vestirse ropa limpia».

Zenon afirmó que «la Ertzaintza tortura, y lo hace a cara descubierta por la impunidad que tiene». En este sentido, matizó que «además de los responsables directos, Balza tiene la responsabilidad. No sólo no lo evita, sino que cubre este tipo de actuaciones». Trasladó al tripartito en su conjunto que «no vale mirar hacia otro lado», y exigió a Juan José Ibarretxe que «antes de mirar a Europa, mire hacia su casa».

Abogaron por que se permita «la visita de un médico de confianza, grabar todos los interrogatorios y que acabe la incomunicación», al considerar que ése es el único modo de acabar con «la impunidad» de las FSE durante el periodo de incomunicación en los que los arrestados están «a su merced».

Los allegados recalcaron el sentimiento de «absoluta indefensión» padecido en las detenciones, tanto por no saber cuál era la acusación por la que se llevaban a sus hijos como por desconocer la situación de los detenidos, más aún cuando los arrestos se llevaron a cabo sin ningún testigo presencial que pudiera dar fe de lo que estaba ocurriendo en sus viviendas.

Sí constataron «la violencia» de la Ertzaintza a la hora de acceder a las viviendas y al desalojarlas: «Entraron encapuchados, con unos escudos y unos focos deslumbrando a los familiares que salían a la puerta a ver lo que sucedía. Además, se negaron a informar de cuál era la situación de los detenidos, si había una orden de registro y a dónde iban a ser trasladados».

Llamaron por último a participar en la manifestación que hoy a las 20.00 partirá de la Plaza de Santurtzi.