PAIS VASCO

El Rector de la Universidad del País Vasco, censura un diario digital en euskera creado por alumnos de periodismo

En el 2001 surgió un proyecto llamado Mediaberri de la mano del profesor Josu Amezaga, de la facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación de la UPV. Lo que en un principio sirvió de soporte para el análisis del papel de los medios de comunicación en el ataque a Afganistán, se convertiría posteriormente en un medio digital dedicado a la información alternativa en euskera. Finalizado el curso académico, el nexo que mantenía Mediaberri unida la universidad era el hosting (espacio web) que la alojaba, propiedad de la universidad y cuya titularidad recaía en el Doctor en Comunicación Josu Amezaga. La dirección original era por tanto http://www.ehu.es/mediaberri (siendo http://www.ehu.es la página oficial de la Universidad del País Vasco), aunque en el 2002 el dominio http://www.mediaberri.com fue comprado direccionándolo al espacio alojado en la universidad.

Los que continuamos con este proyecto nos comprometimos con un periodismo independiente y en lengua vasca. Hasta el momento no existía en el espacio comunicativo euskaldun ningún medio que trabajara la información alternativa en euskera. Más tarde nacerían espacios como Indymedia Euskal Herria o el reciente Jotake Lahaine. Aún hoy, seguimos siendo uno de los pocos medios que informa íntegramente en euskera, siempre en la medida de nuestras posibilidades. A pesar de carecer de medios, fuimos por ejemplo los primeros en publicar en Internet informaciones en euskera cuando las primeras bombas caían sobre Bagdad.

Mediaberri informa sobre temas políticos, sociales y culturales del Mundo y de Euskal Herria, sin más línea editorial que aquella que define la necesidad de un periodismo subjetivo pero honesto frente a una falsa objetividad y con la libertad de quien no informa por dinero y no es por tanto esclavo mediático de nadie. Sin grandes alardes técnicos, apostamos por la funcionalidad de nuestro medio. En los últimos meses, mientras forjábamos planes para mejorar y avanzar en nuestra labor, alguien en el rectorado de la UPV se interesó, para nuestra desgracia, en Mediaberri.

La UPV mantiene desde hace años un problema surgido con un colectivo de profesores que continúan manifestándose a diario en la entrada del Campus principal de la UPV. En el mes de Octubre Mediaberri cubrió, tal y como viene haciendo con los sucesos de cualquier carácter que acontecen en el contexto universitario, una manifestación en solidaridad con el último profesor despedido.

Resultado, la censura El día siguiente a la publicación del artículo relativo a esa movilización (crónica de la misma sin valoraciones por parte del redactor), supuso el inicio de la censura a nuestro medio. Tal y como después narró el propio Manuel Montero a Josu Amezaga, alguien en el rectorado alertó sobre la información publicada al rector y este, sin dignarse siquiera a conocer el medio, ordenó cerrarlo. Esto ocurría el 21 de Octubre y nadie nos comunicó el cierre. El argumento esgrimido era la supuesta conversión de Mediaberri en un medio en pro de los profesores represaliados.

En contestación a esto, podemos retar al señor Montero a cuantificar la totalidad de artículos publicados en la web y señalar cuales de estos aluden a los susodichos profesores. La constatable relación es de cuatro artículos (tres hasta día en que se nos censurara) de un total superior a los 300 artículos que abarcan infinidad de temas. Se nos censuraba con la única razón del contenido del 1% de las noticias publicadas en Mediaberri, demencial.

Sin haber recibido aviso alguno creímos que se trataba de un problema técnico y nunca de un cierre represor en toda regla. El día 24 acudimos al Departamento de Informática donde se nos informó que desde Gerencia les habían dado orden de cerrar ese espacio. Para entonces, ya éramos víctimas del daño que puede recibir cualquier medio por permanecer cerrado cuatro días. Y es que al conocer la cruda realidad trasladamos la web, afrontando un sinfín de problemas técnicos, a otro espacio. El día 27 Gerencia confirmaba que la orden de cierre venía de instancias superiores, el propio rector Manuel Montero. Este alegó los motivos de cierre arriba citados y cedió a revisar su decisión visitando el medio que sin conocer había cerrado. A día de hoy seguimos en espera de una respuesta que no parece probable vayamos a recibir.

Trascurridas varias semanas desde el cierre, creemos necesario denunciar la forma en que el rector ha atentado contra la libertad de expresión y el derecho a la información en euskera, pilares de lo que los docentes de su universidad tratan de impartir en la Facultad de Periodismo.

Queremos expresar nuestra intención de hacer frente a cualquier tipo de censura y renovar nuestro compromiso con un periodismo independiente del poder político y económico, así como con el derecho de los vascoparlantes a disfrutar de medios de comunicación en euskera.