29 de octubre del 2003
El Plan Ibarretxe, proyecto de secesión sobre "mil muertos", critica el gobernante
Advierte Aznar que expulsará al País Vasco de España e incluso de Europa
La Jornada
Llama a la sociedad, en especial la catalana, a movilizarse contra la iniciativa "bárbara"
El presidente del gobierno español, el derechista José María Aznar, advirtió hoy que expulsará a Euskadi de España e incluso de Europa, y acusó el presidente del gobierno vasco, el nacionalista moderado Juan José Ibarretxe, de presentar "un plan de secesión encima de mil muertos", al criticar una vez más su iniciativa soberanista.
Este proyecto, que lleva el nombre de Ibarretxe, fue presentado el sábado por el mismo gobernante regional al Parlamento vasco en Vitoria, y prevé convertir a Euskadi, de 2.1 millones de habitantes, en una comunidad libre asociada a España, con poderes propios de un Estado independiente.
Durante una intervención ante un millón de empresarios y representantes políticos en el foro Nueva Economía, en Barcelona, Aznar afirmó que el Plan Ibarretxe es "una de las mayores barbaridades que se conocen", y amenazó con expulsar a Euskadi (País Vasco) de España, e incluso de Europa.
Al respecto, la televisión vasca EITB señaló que la expulsión de Europa del País Vasco podría frustrarse, toda vez que Austria, Hungría e Italia apoyarían que la futura Constitución europea, que se está redactando, reconozca el derecho colectivo de las nacionalidades de la unión.
El presidente del gobierno español se preguntó qué razones podría tener Ibarretxe para poner en riesgo 25 años de éxito político basado en la estabilidad constitucional. Advirtió que su gobierno se opondrá "tanto política como jurídicamente, con todas sus consecuencias", a la "iniciativa unilateral y de ruptura" del lehendakari.
Aznar pidió una "activa movilización, pacífica pero firme, tan extensa como resuelta" de la sociedad, y "especificamente de la catalana", contra esa iniciativa que, a su juicio, "no ha respetado las reglas del juego, por lo que deberá afrontar las consecuencias".
Reiteró que "plantear un plan de secesión de una parte de España encima de mil muertos que ha conseguido el terrorismo en los últimos años en el país es una de las mayores barbaridades que se ha conocido no sólo en España, sino en Europa".
Entre los puntos más polémicos del Plan Ibarretxe se incluye la nacionalidad vasca propia compatible con la española, voz en la Unión Europea y en los tratados internacionales que suscriba España, un sistema judicial propio, un tribunal supremo vasco, la facultad de recaudar las cotizaciones al seguro social y la facultad de organizar una consulta popular que incluso pueda plantear la independencia.
En otra parte de su discurso, Aznar aseguró que no existe otra alternativa a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en cuestiones de defensa y seguridad europea y criticó a los países que "se rasgan las vestiduras" a la hora de aportar más dinero a los gastos de defensa.
"No hay alternativa a la relación entre Europa y Norteamérica, expresada en la OTAN", manifestó; no obstante, abogó por fortalecer la responsabilidad europea. "Todos los países europeos deben estar dispuestos a hacer un gasto adicional en materia de defensa si se quiere tener una mayor responsabilidad europea", indicó.