VOLVER A LA PAGINA  PRINCIPAL
Perú

POR EL PLIEGO CÍVICO NACIONAL

José Ríos R.

La designación de la nueva premier, de las canteras neo-liberales extremas, pretende resolver la debacle del gobierno. La población no lo cree así, absolutamente: los primeros sondeos dicen lo contrario, en porcentajes de más del 60%. Javier Diez Canseco ha señalado que ésta es la última carta del toledismo, y tiene razón, la pregunta que flota en el ambiente es: ¿Hasta cuándo?, ya hay quienes le han puesto fecha al plazo: noviembre.
Tenemos por delante la convocatoria a un paro nacional desde la Coordinadora Nacional de los Frentes Regionales del Perú, para el 17 de julio entrante.
Las Centrales Sindicales, comenzando por la CGTP, auto-proclamada ‘la Central de José Carlos Mariátegui’, debería haber definido la convocatoria por su propia iniciativa (a ello se comprometió cuando la oleada popular de mayo último), y a ello han debido sumarse, coordinadamente las otras Centrales, sobre la base de una Plataforma Común, capaz de convocar al conjunto del pueblo. Esa Plataforma, en consecuencia, debería adoptar el carácter de pliego cívico nacional.
¿Cuáles serían las reivindicaciones fundamentales del Pliego Cívico Nacional?
A mi juicio, en orden de importancia, se deben de plantear las siguientes:
(a) Atención prioritaria al problema del desempleo y del subempleo.
(b) Reajuste general de sueldos y salarios.
(c) Salario Mínimo Vital de 700 nuevos soles.
(d) Atención prioritaria a la agricultura y la ganadería nacional.
Protección, extensión y financiamiento.
(e) Reconstrucción y reconversión industrial. Tecnología y empleo.
(f) Seguridad Social Integral. Unificación progresiva de los regímenes de salud y pensiones. Recuperación de la deuda pública y privada.
(g) Control efectivo sobre las tarifas monopólicas de los servicios públicos.
(h) Eliminación de las exoneraciones tributarias a la gran empresa y a las entidades religiosas.
(i) Educación Pública para todos. Proyecto Nacional.
(j) Relanzamiento de la Regionalización. Descentralización y desconcentración.
(k) Restitución progresiva de la legislación laboral.
(l) Amnistía Político-Laboral, eliminación de la legislación persecutoria del movimiento popular, con la exclusión expresa de los culpables de delitos de lesa humanidad.
De una vez por todas, hay que poner la economía al servicio de las personas y no las personas al servicio de la economía. Igualmente, poner lo foráneo al servicio de lo nacional, acabando con las formas neo-coloniales que limitan nuestro desarrollo autónomo.
Toledo sólo es un episodio en la larga marcha del pueblo del Perú hacia su emancipación, su salida, como lo fue a su turno la de Alberto Fujimori no resuelve automáticamente nuestros grandes problemas. Entre quien entre las necesidades de los 27 millones que somos serán las mismas, multiplicadas por el crecimiento demográfico quizás, pero en el fondo las mismas.
Necesitamos una imagen del país que queremos ser, construir una imagen común a todos, que responda a lo que somos, como conglomerado humano con pasado, presente y futuro. No hay fórmulas mágicas, pero el futuro comienza hoy, comencemos a construirlo a partir de nuestras propias fuerzas y limitaciones, con real esfuerzo y sacrificio general, sin excepciones ni paraísos particulares.