TRES MOVIMIENTOS ABANDONAN LA COORDINACIÓN
COORDINADORA ANIBAL VERON
Tres movimientos abandonan la coordinación: creemos que hay todo un espacio posible para construir y crear en forma amplia, masiva, diversa, un Proyecto Social y Político de Transformación, evitando tanto la claudicación que implica el burocratismo como la opción política por la automarginación.
Empecemos por un breve repaso: qué es el Movimiento de Trabajadores Desocupados Aníbal Verón, quiénes lo integran, qué se propone (Parte I- Un "movimiento de movimientos", herramienta valiosa para enfrentar la dispersión de las organizaciones de desocupados independientes y autónomas"). Después de esto, podremos comentar nuestro punto de vista sobre los movimientos que han elegido abandonar este espacio (Parte II- Irse cuando la visión propia no es hegemónica en un espacio de coordinación). Y por último, volcamos los trazos de un análisis que nos permita ver más allá de los hechos puntuales, y que entendemos marca claramente las diferencias político-ideológicas entre quienes eligieron abandonar el espacio de coordinación y quienes seguimos construyendo en él (Parte III- Creemos que hay todo un espacio posible para construir y crear en forma amplia, masiva, diversa, un Proyecto Social y Político de Transformación, evitando tanto la claudicación que implica el burocratismo como la opción política por la automarginación).
I- Un "movimiento de movimientos", herramienta valiosa para enfrentar la dispersión de las organizaciones de desocupados independientes y autónomas.
"Somos lo que hacemos, pero mucho más somos lo que hacemos para cambiar lo que somos"
, nos dice el Che desde un afiche, y podríamos tomar esa frase para argumentar que lo que hacemos para cambiar lo que somos está expresado clarito claritoen el índice de temas que precede a esta nota, y que eso, por lo tanto, es "la Verón". Es cierto que toda esa actividad y creatividad desplegada en acciones concretas nos expresa, pero también es necesario lograr cierta abstracción de lo que hacemos, expresarlo en ideas, someterlo a debate. Así que, para complementar "lo que hacemos", volcamos también "lo que pensamos". En pocas líneas, podemos decir que el MTD Verón - o "la Verón" a secas-, es una instancia de coordinación para la lucha entre distintos Movimientos de Trabajadores Desocupados, que desde hace algunos años coincidimos en algunos principios y acuerdos muy generales, que quedaron expresados con claridad en un plenario de todos los movimientos integrantes, en febrero de 2003.Allí planteamos la idea de autonomía o independencia que sostienen nuestras organizaciones respecto al "Estado y sus instituciones, los partidos políticos, las burocracias sindicales y la Iglesia, para garantizar que los intereses del pueblo no se vean "manoseados" por el oportunismo de quienes tienen por objetivo desviar el protagonismo popular hacia la integración en un sistema que sólo apunta a perpetuar la dominación".
También explicábamos el criterio de coordinación: "Al surgir nuestros movimientos, se nos presentó el desafío de poder dar pasos de coordinación sin que eso implique que las organizaciones de base se subordinen a una instancia centralizada que las dirija. En este sentido, la creatividad y la voluntad de profundizar la búsqueda por no reproducir viejas prácticas nos llevaron a ir construyendo esta experiencia en donde la autonomía de cada movimiento sea respetada, a la vez que la coordinación potencie nuestras fuerzas en la lucha contra el enemigo común y por reivindicaciones que permitan dar pasos de avance a las organizaciones".
Otro principio definido es el "respeto por los acuerdos y la diversidad (...) es de vital importancia ser respetuosos de las concepciones con que cada movimiento construye, aunque muchas veces no se asemejen entre sí; y en segundo lugar, ser respetuosos por los acuerdos que alcanzamos de conjunto.
No existe una concepción ideológica única que nos mantenga unidos, sino principios y acuerdos elaborados de conjunto y respetados por todos en forma igualitaria.
"Acción directa, lucha popular: En esta etapa de resistencia queda claro que lo que se ha logrado en cuanto a la defensa de los derechos de los trabajadores y a conquistas populares (como por ejemplo proyectos de empleo para desocupados, alimentos para comedores barriales), se logró desde los piquetes y la confrontación. Sólo a través de la lucha pudimos ir gestando nuestra identidad, en antagonismo con nuestro contrario: el sistema capitalista. Por eso creemos que sólo la lucha nos permite gestar la libertad, romper la opresión y desarrollar o profundizar una conciencia crítica, una conciencia popular de transformación.
Desarrollo territorial, organización de base, formación popular, prácticas democráticas de funcionamiento: El poder popular y las nuevas organizaciones que surgen al calor de la lucha, como marcan las mejores experiencias, se construye desde abajo, en el trabajo de organización de base: no alcanza con "movilizar a las bases", ni con caudillos que "representen" a las bases: para que el pueblo sea protagonista de su propio destino, tiene que estar organizado y consciente de sus derechos. (...) Existen aspectos del cambio que aspiramos a conquistar en esta sociedad, que empiezan hoy mismo y están al alcance de nuestras manos. Por eso las prácticas solidarias, las formas organizativas democráticas y participativas, la formación y el estudio como elemento fundamental de esa participación consciente y democrática, son los mecanismos que podrán garantizar que la fuerza popular que encare el gran desafío de transformar la sociedad, tenga la fortaleza suficiente para vencer."
Estos principios y acuerdos siguen vigentes, y por eso se sostiene y sigue creciendo nuestro espacio de coordinación.
No conocemos demasiadas experiencias de desarrollo de una fuerza social y política surgida y proyectada al margen de los aparatos políticos, sindicales o eclesiales, que reafirme estos criterios y se consolide en el tiempo, por lo que nuestra experiencia no copia ningún manual ni receta. Esto hace que, seguramente, estemos más expuestos a traspiés y equivocaciones, transiciones desprolijas, confusiones internas. Pero en el balance de las asambleas, la ratificación del camino emprendido es clara: "no nos peleemos entre nosotros, todos somos "la Verón". Y cuando en nuestras asambleas (alrededor de cien asambleas de base en las barriadas populares del Gran Buenos Aires y otros puntos del país) se dice "la Verón", los rostros, las voces firmes, las convicciones al levantar las banderas y salir a las calles y los puentes, dicen el resto: la Verón es volver a existir desde la marginalidad y la exclusión, la Verón es intransigencia ante las injusticias, la Verón es resistencia a la represión, la Verón es la sangre derramada, la Verón es proyecto a futuro, la Verón es nueva identidad social. Tras ese fuerte mandato de base, los Movimientos de Trabajadores Desocupados que a pesar las diferencias que expresa el debate interno reafirmamos el camino de coordinación en "la Verón" -algunos "históricos", otros que siguen sumándose-, son:
los MTD de José C Paz, Quilmes, Lanús, "Darío Santillán" de Almirante Brown, San Telmo, Lugano, Florencio Varela, "1º de mayo" de Parque Patricios, Floresta y Mataderos, Berazategui, La Plata, Berisso, "Oscar Barrios" de JosePaz, Cláypole, "Darío Santillán" de Cipolletti, "La Florida" de Solano, Lomas de Zamora, Esteban Echeverría, Colinas-Montana, y Ezeiza.
II- Irse cuando la visión propia no es hegemónica en un espacio decoordinación.
También explicamos hace menos tiempo, en el mes de junio, cómo las diferentes visiones al interior de nuestro espacio de coordinación, se expresaban con claridad, agrupándose distintos movimientos según la simpatía que sentían por unos u otros planteos de construcción: en el libro "Darío y Maxi, dignidad piquetera", después de describir someramente las diferentes posturas políticas, decimos: "La particularidad de la Verón consiste en que, al tiempo que estos proyectos van haciendo su experiencia y desarrollándose, unimos esfuerzos en la lucha por las reivindicaciones en común y aprendemos, trabajosamente, a construir espacios de coordinación y unidad que tanta falta hacen en este momento de la lucha popular. La diversidad de posturas y análisis enriquece también los debates, aportando distintos puntos de vista".
Los movimientos que abandonaron la coordinación (MTD de Solano, Guernica y Allen), constituían un espacio político al interior de "la Verón", tan respetable y legítimo como otros. Los compañeros de Solano, incluso, fueron pioneros en impulsar esa lógica de agrupamientos internos, cuando junto a los compañeros de Lanús y de Almirante Brown consideraban que la Verón era un espacio "necesario pero no suficiente", y trabajaban así criterios de formación, de producción y de relaciones en común. Ese espacio "interno", que expresaba una parcialidad y no a toda la coordinación, tenía al MTD de Solano como un referente fuerte, por las ideas que expresaba pero sobre todo por una práctica potente que excedía a esas ideas. Además de adhesiones externas, muchos MTDs crecimos al calor de esa experiencia... Por mérito propio, entonces, el MTD de Solano se mostró durante largo tiempo como un proyecto que absorbía la referencia de "la Verón", incluso en desmedro de la existencia de movimientos más nuevos o con menos prensa. En los últimos meses (el último año, podemos decir), el MTD-Solano fue paulatinamente perdiendo masividad, sufriendo crisis internas y desprendimientos de barrios enteros (dos de ellos, La Florida y Cláypole, se mantienen hoy en la Verón), alejamiento de militantes, etc., y a partir de eso "sacándole el cuerpo" a la mayor parte de las iniciativas del MTD Aníbal Verón, abandonando la lucha en las calles en función de un discurso y una práctica que decía privilegiar la "autonomía propia" en desmedro de la autonomía colectiva de todos los movimientos que conforman el espacio de coordinación. Eligieron refugiarse en un discurso "puro" que evitaba cualquier tipo de autocrítica ante los procesos que estaban teniendo lugar en el seno de su organización.
En la Verón, otras expresiones adoptaron mayores protagonismos, como es lógico en un espacio que no tiene una conducción centralizada sino que refleja distintos tipos de construcción y concepciones en su interior.
Los compañeros de Solano, y con ellos los de Guernica y Allen, habían sabido convivir en un espacio heterogéneo y diverso cuando las ideas que ellos sostenían "ocupaban el centro de la escena", es decir -aunque ellos renieguen del término- eran hegemónicas. Su presencia y referenciación disminuyeron (más por limitaciones de ellos mismos que por grandes virtudes ajenas), y la coordinadora, como espacio heterogéneo, permitió en su camino el surgimiento de expresiones diversas. Desde entonces los compañeros de Solano decidieron profundizar las críticas a sus antiguos compañeros de lucha, y finalmente abandonar el espacio de coordinación. No conocemos, aún, si el MTD de Solano, Allen y Guernica sumarán sus esfuerzos a algún espacio político o social de lucha, entre los tantos y variados que existen en nuestro fragmentado campo popular. Saludaríamos que así fuera. Si, como parece ser, se estancan en su autoreferenciación exclusiva, tendremos que darle la razón al compañero que caracterizó la idea de autonomía que ponen en práctica, definiéndola como "automarginación".
Ante este desenlace, nuestra posición es clara: LAMENTAMOS que los compañeros abandonen el espacio de coordinación. LAMENTAMOS que no hayamos sabido, ni ellos ni nosotros, construir con mayor solidez espacios de coordinación en la diversidad para la lucha común. SEGUIREMOS desarrollando nuestras experiencias, alentando la unidad en las luchas junto a distintas expresiones sociales y políticas.
III- Creemos que hay todo un espacio posible para construir y crear en forma amplia, masiva, diversa, un Proyecto Social y Político de Transformación, evitando tanto la claudicación que implica el burocratismo como la opción política por la automarginación.
Más allá de las fuertes diferencias que se fueron gestando en los últimos tiempos, y que hemos expuesto a lo largo de estas líneas, en otras definiciones coincidimos con los planteos del MTD-Solano: los reparos a las construcciones "de aparato", la fuerte crítica a las viejas estructuras políticas, sindicales y también sociales, centralizadas y burocráticas; en fin, en la búsqueda y el alerta permanente por que sean las organizaciones de base, las que se autodeterminen y construyan sus propias perspectivas y proyectos políticos, con autonomía y espacios de profunda democracia y participación. Bajo estas orientaciones parimos, en los últimos años, nuestros movimientos, nuestras asambleas y espacios permanentes de formación y educación popular. Bajo estas orientaciones dimos las fuertes luchas que en los últimos años caracterizaron a "la Verón". Bajo estos principios avanzamos, asumiendo la precariedad y a veces hasta nuestra inmadurez colectiva, y en esos avances nos ha tocado dejar la vida de valiosos compañeros en el camino. Tras estos principios y orientaciones, seguimos andando.
Entre la claudicación que implica el burocratismo y el fracaso de la automarginación: en ese espacio nos ubicamos. Como parte de las ricas -y contradictorias, y a veces imperceptibles- esperiencias de trabajadores que recuperan sus fábricas para trabajar sin patrones, los grupos asamblearios que resisten aún en estos momentos de "vacas flacas"; los movimientos campesinos que nos enseñan sus tiempos serenos de construcción; y los centenares de grupos barriales, culturales, de comunicación alternativa, estudiantiles, incluso sindicales, que dan vida a los amplísimos bolsones de resistencia, mientras como pueblo, trabajosamente, aprendemos a sumar y no restar...
Reafirmamos con toda nuestra energía cotidiana que ese camino a construir es perfectamente posible, podemos y debemos hacerlo crecer, y nos proponemos articularlo y coordinar con quienes se propongan objetivos similares, aunque vean las cosas desde otra óptica. Creemos que las "explosivas" luchas que nos anteceden no son un suspiro en la historia, y por lo tanto nos negamos a asumir la resignación y volver al aislamiento quejoso; por el contrario, como protagonistas de las gestas que tanta pasión despertaron, sabemos que son la demostración palpable de toda la energía que reside en nuestro pueblo y sus organizaciones de base; que sólo si nos lo proponemos, esos espacios de resistencia serán más sólidos y potentes, y más cercanas las posibilidades de conquistar un presente y un futuro con trabajo, dignidad y cambio social.
Quisimos enmarcar la "aclaración" de estas líneas, en un boletín que, coyunturalmente, expresa las otras tantas actividades que nos ocupan: nuevos pasitos de consolidación con movimientos que conocimos hace tiempo, exploración de nuevas prácticas de unidad con sectores estudiantiles, nuevos espacios de democratización, formación y educación popular al interior de nuestros movimientos; el sostenimiento de la lucha en las calles, la solidaridad concreta con los trabajadores, nuevos ejes de confrontación política como es la denuncia del ALCA; y también las experiencias de producción anticapitalista en nuestros grupos de trabajo, que aunque incipientes, expresan en el hoy el futuro que estamos forjando.
Si estas líneas aportan al debate en la militancia popular, si las redes de correo electrónico y comunicación alternativa sirven para que estas posiciones políticas se conozcan, pedimos que se distribuyan, si bien no con los artículos completos que preceden, al menos con el índice temático que permita comprender en qué andamos además de posicionarnos en esta polémica. Elegimos, en una decisión consciente, que a pesar de la dedicación que volcamos en estas definiciones y estas líneas, sea la noticia número nueve de las novedades del mes.