Argentina Arde-Marabunta
Comisión de Solidaridad con Cuba de Lomas de Zamora
2 luchadores piqueteros muertos , 90 heridos; la detención y la tortura
de más de 170 personas; el allanamiento al hospital Fiorito; y el asalto
al local partidario de Izquierda Unida es el trágico saldo que demuestra
el plan ideado por el gobierno nacional y bonaerense para terminar con el hambre,
la desocupación y la miseria: la represión al campo popular.
No hubo "excesos", la represión que alcanzó a 20 cuadras a la
redonda más allá del epicentro de los acontecimientos es la prueba
que existió un plan de persecución y matanza, una "operación
masacre". No existió la provocación de "un grupo de violentos
piqueteros" que justificara la reacción policial. Este argumento no es
ni más ni menos que el retorno de la teoría de los dos demonios,
puesta en marcha por los defensores de la última dictadura militar.
Pero la violencia desde el Estado no comienza con los hechos en el Puente Pueyrredón:
más del 25% de la población se encuentra en estado de desocupación
completa, la pobreza de más de la mitad de los argentinos -20 millones
de pobres sobre 36 millones de habitantes -, la indigencia de casi 8 millones
y el hambre liso y llano de 3 millones de compatriotas, con la noticia cotidiana
de decenas de muertes por desnutrición, es la verdadera y vergonzante
violencia a la que se expone al pueblo a través de los planes económicos
ideados por los centros del poder financiero e implementados por los políticos
de turno en nuestro país.
En este sentido, valoramos mucho las distintas formas de lucha que se están
llevando a cabo en todo el país: marchas, cortes de rutas, actos de repudio,
paros, etc. Pero creemos que esto no alcanza.
Es urgente y necesario impulsar la unidad de todas las organizaciones y movimientos
del campo popular, a través de la coordinación de los diferentes
sectores que lo conforman en cada barrio y zona: trabajadores ocupados y desocupados,
estudiantes, jubilados, etc.
Sin un fuerte bloque popular, construido desde las bases y con un programa mínimo
acordado en común, no se podrán detener los planes genocidas del
bloque dominante, ni se lograra derrotar este "modelo" económico - social,
que solo produce más desocupación, hambre, miseria y marginación.
Por tal motivo, quienes participamos de La Casa de la Unidad y Resistencia Popular
repudiamos la represión del miércoles pasado y la muerte de dos
luchadores populares, y convocamos a marchar juntos, el 3 y 9 de julio próximo,
en la búsqueda de comenzar a concretar este objetivo unitario y a fin
de abrir definitivamente el camino hacia una patria con trabajo y dignidad para
todos.
Lomas de Zamora, 2 de julio de 2002
Operación Masacre en Avellaneda