VOLVER A LA PAGINA  PRINCIPAL
Salvador Allende

LA PLAZA VOLVIO A RECIBIR A SU PUEBLO

El pueblo chileno regresó a su plaza. Hacía 30 años que no habían podido ocupar cada 11 de setiembre la explanada de la Plaza Constitución, frente a La Moneda. Desde el golpe de estado de Pinochet a la Unidad Popular todos los 11 fueron de marchas y represión.
La plaza fue poblándose de colores, de música, de palabras y de banderas.
Un extenso vallado separaba a las delegaciones internacionales que habíamos asistido al seminario, de los chilenos. Pero no pasó mucho tiempo para que todos nos juntáramos. Los chilenos corrieron las vallas ante la presencia vigilante de los carabineros que tuvieron que soportar los cánticos de "es la policía verde, esa que se deja ver, es la que nos torturaba cuando estaba Pinochet".
Allende estuvo presente, no sólo en la estatua que flanquea a La Moneda y en su rostro multicolor que nos miraba desde el telón de fondo del escenario.
Estuvo presente en las consignas de las banderas, en las pecheras rojas que llevaban puestas muchos de los chilenos, en las pancartas, en los cánticos y con sus últimas palabras antes de que lo mataran en La Moneda.
La Radio Nuevo Mundo condujo y transmitió todo el acto en directo.
Las estrofas del Himno Nacional abrieron la jornada, con la fuerza de su último verso: "Que o la tumba o serás de los libres, o el asilo contra la opresión".
Todo fue una mezcla de emociones, desde la euforia hasta las lágrimas Allende estuvo presente con las canciones de los cubanos Silvio Rodríguez y Vicente Feliú. Estuvo presente en las voces de las chilenas Isabel Aldunate y Carmen Prieto que nos hicieron vibrar con los versos de la canción Yo te nombro Libertad.
Pero también Víctor Jara nos acompañó en las cuerdas del charangusita Fredy Torrealba Por él supimos que durante la dictadura se prohibió el charango, pero " hoy los jóvenes lo empuñan nuevamente", dijo.
Por el escenario pasaron Humberto Martones, presidente del Comité 30 años Allende Vive, Lorena Pizarro, presidenta de la Asociación de ex detenidos desaparecidos que afirmó: "Allende fue la primera victima de la dictadura militar".
Por su lado el cubano Fernando Martinez Heredia dijo que "los sucesos del golpe fueron los más dolorosos para la Revolución cubana" y recordó que la bandera de su país fue inspirada por la bandera chilena.
Gladys Marin, presidenta del Partido Comunista de Chile , recordando a Allende señaló: "Han pasado muchos gobernantes, dictadores muchos de ellos, pero ninguno como Salvador Allende", rescatando su honradez, su sencillez, su ética y la consecuencia de sus ideas.
Ocupó también el palco el dirigente del MST, el brasileño Elemar Cezimbra: "Este acto es la mayor demostración de que la historia no para. Los dictadores pasan y los pueblos no pasan. Y están aquí como el pueblo chileno", dijo.
Encendió a la multitud, que se dio cita en este acto, las palabras de la presidente de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, : "Querido Allende, seguro que hoy estás aquí en esta plaza que más que la Plaza de la Constitución hoy se transforma en la Plaza de la Revolución.
Queridos hijos, todos los latinoamericanos no morirán jamás porque están encendidos, están encarnados en cada uno de ustedes. Cada vez los amamos más. La Revolución en Latinoamérica llegará . Viva la Revolución que viene para este tercer mundo que amamos".
Daniel Ortega, dirigente del Frente Sandinista, fue el último de los oradores que finalizó diciendo: " En este día en el que se han levantado flores y banderas, nuestro compromiso es con Salvador Allende. Por eso decimos que los hijos de Sandino, los hijos de Salvador Allende, ni se venden ni se rinden, jamás".
Y así nos despedimos de esta plaza, la que desde hoy volvió a recibir a su pueblo. La que se oscureció antes de que las poblaciones comiencen a encenderse con las barricadas y fogatas, como cada 11 de setiembre desde 1982.
FUENTE: RED ECO ALTERNATIVO