"Nosotros, FDLR, reunidas en Roma con el Gobierno de la RDC, propiciada por la Comunidad de Sant 'Egidio,

Considerando que todos los hombres son iguales ante Dios y ante la Ley y que el derecho a la vida es un derecho sagrado,

Conscientes de la catastrófica situación humanitaria que, desde hace unos 10 años atraviesa la Región de los Grandes Lagos,

Interpelados por los sufrimientos indescriptibles a los que están sometidos decenas de miles de hombres, mujeres y niños, a los que las guerras fratricidas e inútiles han echado de sus hogares,

Preocupados en asociarnos a las numerosas iniciativas de búsqueda de paz, diálogo y reconciliación en la sub-región.

Visto que todos los pueblos aspiran al respeto efectivo de los derechos y libertades enunciadas en la Declaración Universal de derechos humanos de 10 de diciembre de 1948,

Convencidos de que los problemas de los Grandes Lagos y, en particular los ruandeses son problemas políticos y requieren por tanto soluciones políticas. Ante Dios, la historia y el pueblo ruandés, declaramos solemnemente:

1. Los FDLR se comprometen a parar la lucha armada.Los FDLR deciden, en adelante, transformar su lucha armada en combate político. Hasta que las medidas de acompañamiento se identifiquen y se pongan en marcha, aceptan el desarme voluntario y la vuelta pacífica de sus fuerzas a Ruanda. Desde ahora anuncian que se abstienen de cualquier operación ofensiva contra Ruanda.



2. Los FDLR condenan el genocidio cometido en Ruanda y a sus autores. Se comprometen a luchar contra cualquier ideología de odio étnico y renuevan su compromiso en cooperar con la justicia internacional.

3. Los FDLR condenan el terrorismo y los crímenes de derecho internacional cometidos en la región de los Grandes Lagos. Y, para marcar su firme voluntad de luchar contra cualquier forma de impunidad, piden la apertura, lo más pronto posible, de una investigación internacional para calificar esos crímenes e identificar y castigar a sus autores.

4. Los FDLR desean el retorno de los refugiados ruandeses a su país de origen, según las normas internacionales en la materia y en el respeto de los derechos y libertades de la persona humana. En consecuencia, se comprometen a implicarse activamente en el programa de su retorno voluntario, según modalidades a convenir con el Gobierno de la RDC, el Gobierno de Ruanda y la comunidad internacional.



Como conclusión, al optar por la lucha política en detrimento de la lucha armada, los FDLR expresan la firme voluntad de aportar su cooperación en la resolución duradera y pacífica de los conflictos, no solo en Ruanda, sino también en la Región de los Grandes Lagos. Y para hacer esto, necesitan un espacio político".

Hecho en Roma, el 31 de marzo de 2005.

Por los FDLR Dr. Ignace Murwanashyaka, Presidente.