Latinoamérica
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"El pueblo voltea otro macaco al piso y van..."
"Mensaje de la 36"
La impunidad que otorga el poder político es trágica y el tiempo con que los pueblos maduran su respuesta es lento pero seguro.
En Latinoamérica ya no se puede seguir postergando las esperanzas de los pobres y humildes.
Con la caída del ex presidente Lucio Gutiérrez en Ecuador queda demostrado patentemente que los pueblos no esperan más y son capaces de voltear a los mismos mandatarios que ellos han impuesto sin esperar una nueva elección.
Una experiencia que todos los mandatarios de América Latina deberán comenzar a tener en cuenta si no son capaces de gobernar para el pueblo y no para el Fondo Monetario Internacional.
En Ecuador, otro tipo de democracia participativa y directa comenzó a practicarse contra el ex presidente Lucio Gutiérrez y los políticos tradicionales.
La gente comenzó a pedir "que se vayan todos" y Lucio Gutiérrez ya tuvo que marcharse aunque no en helicóptero como él hubiera querido.
Cuando Lucio Gutiérrez asumió el gobierno en Ecuador poco le duró el entusiasmo progresista y democrático para su pueblo.
Coronel como Hugo Chavez, se presentó como promotor de un golpe popular contra un gobierno pro norteamericano y corrupto que lo llevó a la popularidad.
Pero Lucio Gutiérrez a los pocos meses de asumir el Gobierno se distanció de la CONAIE, una organización indígena aliada y con la mayoría de las organizaciones de izquierda.
¿Que hizo Lucio Gutiérrez?
Se fue a Estados Unidos a pactar con el Fondo Monetario Internacional, y se quedó atado de patas y manos de Washington convirtiéndose en un peón más del imperialismo.
Una vez asegurado en el poder se alió con el "loco" Bucarám líder de la democracia cristiana asegurándose la mayoría y así terminar de vender el patrimonio público.
Lucio Gutiérrez continuó el camino de los anteriores neoliberales y fondomonetaristas de los presidentes Gustavo Novoa y Jamil Mahuad.
Lucio traicionó a su pueblo y ahora sus anteriores seguidores le llaman "El traicionero". Trató de privatizar todo lo que pudo entregando a las empresas extranjeras transnacionales la explotación de los hidrocarburos y la electricidad. La explotación del petróleo fue cedida bajo la modalidad de los contratos de asociación y los mejores campos petroleros fueron ofrecidos a los inversionistas privados.
Lucio Gutiérrez fue socio del Colombiano Uribe y el peruano Toledo en el Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos.
Lucio Gutiérrez pactó compromisos lesivos al interés de los ecuatorianos con el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial en su viaje a Washington.
Ahora la ola popular gigante salió por las calles de Quito y creció cada día retroalimentándose y actuando de cara al régimen.
Desde las radios, en especial radio La Luna los manifestantes daban su nombre y el número de la cédula de identidad diciendo hasta donde vivían. Miles de ecuatorianos movilizados inventando maneras de convocarse, de protestar y de comunicarse.
Sus deseos al parecer van más allá de la salida de Lucio Gutiérrez.
Ecuador deja otra nueva enseñanza y los latinoamericanos debemos aprender rápido de estas experiencias que demuestran un cambio social, sicológico y político incontrolado y con apariencia caótica y desconcentrado pero sin embargo a la distancia se le puede apreciar funcionando como un universo.
Los ecuatorianos asisten a un período de liberación, reprimidos durante por lo menos veinte años, poblados de auge de la lucha, decepciones, amarguras, preocupaciones, tristezas, hambre y desocupación.
El pueblo ahora se cobra cuentas, interroga a los políticos, abre los ojos, irrumpe en la política directa, y responsabiliza por los sueños incumplidos y las oportunidades perdidas para toda la vida.
En el caso de Lucio Gutierrez el pueblo exigió de una vez para siempre y le pasó factura a su traición.
Desde hacía tiempo que le decían de todo como si las maldiciones alcanzaran para resarcirse del dolor. Nunca un presidente había sido tan insultado como este, lo hacían maldiciendo y llorando a la vez por que habían sido sus seguidores.
Había un poco de iglesia evangélica como si la palabra ayudara a sanar las heridas.
En Quito hacía un mes que se respiraba un aire enrarecido, los vehículos sin chapa, con vidrios ahumados por todas partes acompañaban el escándalo que vinculaba al presidente y al vicepresidente con empresarios que habían financiado su campaña electoral. Después fue asesinado uno de los principales activistas de una demanda contra la empresa Texaco en medio del silencio oficial.
Posteriormente hubo una arremetida de una petrolera argentina que obtuvo una licitación totalmente irregular con el apoyo del Estado.
Cuando asumió la presidencia Lucio Gutiérrez, seis presidentes y más de 1.300 invitados presenciaron la investidura.
Con un 60 por ciento de pobres, salarios adeudados a la salud, educación y seguridad y un acuerdo pendiente con el Fondo Monetario Internacional.
Esta crisis ecuatoriana, el hambre del pueblo, el estallido social, los heridos y el muerto, deben ser incluidos en la larga lista de mártires víctimas del FMI, el Banco Mundial y el BID.
Los organismos internacionales de crédito a los cuales el ministro de economía uruguayo ha ido a pedir más dinero siguiendo el camino de Lucio Gutiérrez.
El enorme peso de la deuda externa cuyos compromisos de pago alcanzan a los 2067 millones de dólares, obligaron a Lucio Gutiérrez a buscar un nuevo acuerdo con el FMI y desbloquear así la ayuda pendiente por falta de un compromiso con ese organismo.
El presidente saliente en aquel momento Gustavo Novoa no había logrado un acuerdo con el FMI por unos 240 millones de dólares debido a diferencias de carácter fiscal mientras que el FMI optaba por esperar al futuro ex presidente para iniciar nuevas conversaciones.
"Necesitamos un acuerdo con el FMI, no por recursos, porque no alcanzarían para cubrir todas las obligaciones pendientes, sino por el aval para que otros organismos no nos cierren las puertas y para reducir el riesgo país". Decía Lucio Gutiérrez.
Oiga amigo, escuche amiga ¿no escucha usted algo parecido en estos días al regreso de Washington de los funcionarios de gobierno uruguayo?.
Lucio Gutiérrez asumió la presidencia del Ecuador, y tres días después él mismo -ya que no enviaría a Washington a ningún intermediario- se sentaría ante un interlocutor que enfriaría su verbo populista el Fondo Monetario Internacional.
El FMI lo acechaba detrás de la jungla de cemento el sábado mismo con una misión que exigiría claridad y compromiso en las cuentas fiscales para un crucial acuerdo de créditos.
La cantinela usted la sabe al igual que nosotros.
Riguroso control fiscal, superávit primario de tanto por ciento, apertura a los mercados, inversiones extranjeras, aumento de las exportaciones, asociaciones y privatizaciones, no aumento salarial, reducción presupuestal, y ayuda social para evitar las protestas populares.
Gutiérrez no era un desconocido para el Fondo Monetario Internacional, en noviembre anterior se había presentado ante el organismo multilateral a rendir su primer examen.
Días después Anoop Singh, jefe de Asuntos Latinoamericanos dijo que el ex presidente era un hombre con quien se podía dialogar.
Desde entonces el FMI estuvo siempre dispuesto a asesorarle en asuntos macroeconómicos, envió a Quito un técnico y después una misión exploratoria.
Fue entonces que Jean Dehen analista del banco de inversiones Credit Swiss First Boston sostuvo incluso que Gutiérrez ya ha llegado a un acuerdo de principios guías con el FMI por lo que la misión del Fondo iría a Quito para discutir propuestas especificas y medios para lograr los objetivos.
Obsérvese cuales eran entonces las conclusiones en Quito en aquel entonces y encuentre usted las coincidencias.
Decía el FMI en Ecuador; "El diálogo se verá facilitado por la sustancial buena voluntad y el sentido de objetivos compartidos que ahora existen entre el FMI y el presidente entrante, en contraste con la situación del año pasado".
Dijo Dehn en una carta de noticias enviada a sus clientes en Wall Street.
El FMI había suspendido un año antes un crédito stand by de 240 millones de dólares con Ecuador.
Una mayoría parlamentaria decidió hoy legalmente cesar al presidente de la República Ecuatoriana Lucio Gutiérrez. Los Diputados esgrimieron la causal de "abandonado del cargo" para tomar esta decisión. Además de declarar cesante a Gutiérrez los congresistas llamaron a Alfredo Palacio actual vicepresidente como nuevo mandatario del país.
En realidad el parlamento dio un paso, hace días tomado por el pueblo en las calles de Quito y otras importantes ciudades del país.
Ahora la gente esta en la calle y habrá que ver quien se encarga de meterla nuevamente en sus casas.
La política está en camino y la gente movilizada no discriminan y todo acto político está bajo sospecha y hasta condenado.
Lo están los viejos y no tan viejos líderes políticos de Ecuador de todos los partidos y todas las funciones, en todos los entes que como el Parlamento representan para el pueblo el status quo y lo está la gran prensa que no escapa a la acusación de complicidad con el poder.
El pueblo se cansó y se cansó en serio, el pueblo está revolucionado y el movimiento espontáneo es una verdadera rebelión.
Se autoconvocan en asambleas abiertas y ahora tienen miles de ideas.
Hoy cuando escuchábamos los informes de radio La Luna, no quieren ni jefes ni líderes se cansaron de todo y de todos.
Ahora buscan refundar un país, una nueva forma de política, quieren moverse por fuera de la violencia y dentro de la legalidad con valores transparentes de honradez sin acomodos ni lucha por cargos políticos o de gobierno.
No les importa aparentemente el caos ni la represión con que han sido atacados, al fin y al cabo cualquier cosa que se les ocurra en adelante será mejor que lo que tenían hasta ahora.
Sentíamos a las madres hablando a los soldados, a los trabajadores convocando a sumarse a los policías y veíamos sentimientos, emotividad y control sobre la realidad.
Un movimiento desestabilizador político del sistema imperante se cree fuerte y se está extendiendo a todo el país poco a poco.
Ojalá dure más que otras experiencia de Argentina, Bolivia, Paraguay, Perú por que entonces servirá no solo para los ecuatorianos sino también para los latinoamericanos en general.
Hará que los mandatarios piensen un poco más antes de dar vuelta la espalda a sus pueblos por cumplir con el Fondo Monetario Internacional y a la vez hará que los pueblos se preparen para salir a la calle nuevamente en caso de ser traicionados.
Movimiento sociales como este serán convocados a permanecer en el tiempo y a incidir socialmente, políticamente en materia de comunicación y a una verdadera revolución cultural en la cabeza de la gente.
Sin la cual por más cambios políticos que hayan siempre terminarán siendo meros relevos en el poder y la alternancia en el gobierno, solo como virtud democrática y beneficio para los gobernantes de turno.
Ojalá no queden nuestros hermanos ecuatorianos como otras tantas "Comunas de París" en comuneros mesiánicos, puros y carentes de organización política e ideología.
HA CAIDO OTRO PRESIDENTE PROGRESISTA QUE ASUMIÓ CON MÁS DE LA MITAD DE LOS VOTOS DEL PUEBLO.
FIRMÓ CON EL FONDO, CUMPLIÓ CON EL FONDO Y EL FONDO FUE QUIEN LO ENTERRÓ DEFINITIVAMENTE.
Y A LA HORA DE LA DISPARADA NO HAY QUIEN LE OFRESCA ASILO.
¡CASTILLOS MUY GRANDES SE HAN VENIDO AL SUELO!