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Guatemala
Se aprueba el TLC con Estados Unidos a pesar de la fuerte oposición social
Reuters
A pesar de las fuertes protestas encabezadas por sindicalistas y campesinos, que en los últimos días conmovieron al país, el Congreso de Guatemala ratificó el jueves un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos, que forma parte de un pacto regional de Washington con Centroamérica.
Con 126 votos a favor, 12 en contra y 20 diputados ausentes, el parlamento unicameral aprobó el pacto como de ''urgencia nacional'', con lo cual evitó un extenso trámite de ratificación.
Manifestantes protestaron el miércoles contra el acuerdo y se enfrentaron con palos y piedras a la policía, que respondió con gases lacrimógenos, en una jornada que dejó seis heridos y un autobús incendiado. Pero el jueves las protestas fueron tibias.
Dirigentes sindicales y campesinos convocaron a una huelga para el lunes como protesta por el acuerdo aprobado en Guatemala, país donde 80 por ciento de sus 11 millones de habitantes vive en la pobreza.
El pacto comercial, conocido como Cafta, por sus siglas en inglés, eliminará las trabas al comercio entre Estados Unidos y Centroamérica.
Una reciente encuesta mostró que el acuerdo comercial es rechazado por la mayoría de centroamericanos, porque consideran que afectará a los campesinos pobres, en una región que no puede competir con la agricultura subsidiada de Estados Unidos.
El tratado no corre mejor suerte en Estados Unidos, donde ha languidecido en el Congreso mientras la administración del presidente George W. Bush busca apoyo para el acuerdo, al que se oponen productores de azúcar y textiles de ese país por temor a que las importaciones generen una creciente competencia.
Los Congresos de Honduras y El Salvador, además del de Guatemala, ya ratificaron el tratado comercial, pero todavía falta que los parlamentos de Nicaragua, Costa Rica, República Dominicana y Estados Unidos lo avalen.
El 90 por ciento de las exportaciones de Guatemala, que en 2004 fueron de 3 mil 75 millones de dólares, van a Estados Unidos y el 80 por ciento de las importaciones del país centroamericano proviene de ese país.