El presupuesto militar mundial es hoy de 900 mil millones de dólares al año.
Colombia gasta 400 millones de pesos diarios, sólo en el llamado "Plan Patriota", y la pobreza afecta a más del 60% de la población del país.
El director del Programa Nacional de Desarrollo Humano, Alfredo Sarmiento dijo: "no podemos considerar el desarrollo como la riqueza de unos cuantos, o el crecimiento de unos puntos de la economía, ya que este debe abarcar la satisfacción de la mayoría de los habitantes". (Ver El Tiempo, miércoles 19 de enero 2005).
Colombia está rezagada y atrasada respecto de las metas de reducción de la pobreza trazadas en el año 2000, en la denominada "Cumbre del Milenio", donde estuvieron 190 países.
En esa cumbre, una de tantas donde se firman documentos que pronto van al cesto de la basura, se expusieron los siguientes objetivos: extirpar la pobreza extrema y el hambre, lograr la educación primaria universal, combatir enfermedades que en países desarrollados desaparecieron, como la malaria y la fiebre amarilla, reducir las aterradoras cifras de mortalidad infantil y promover la autonomía de la mujer.
El cuadro no puede ser más desalentador en 2005: más de mil millones de personas sufren hambre todos los días, la desnutrición afecta a 270 millones de niños, 114 millones de ellos no logran la educación primaria y 584 millones de mujeres no saben leer ni escribir.
Ese es el escenario de la lucha de clases, manifestada en las contradicciones sociales generadas por el capitalismo y su mundo criminal de injusticias, donde se benefician las grandes multinacionales y se menosprecian las necesidades de millones de seres humanos.
Jeffrey Sachs, coordinador del Informe de Desigualdad e Inequidad de las Naciones Unidas, propone este ejercicio:
"Si los países desarrollados destinaran más recursos movilizando 195.000 millones de dólares al año, se podría reducir a 500 millones el número de pobres en el mundo.
"Esta cifra es baja, comparada con el presupuesto militar mundial y equivale apenas al 0,54% del Producto Interno Bruto de los países ricos. Creo que no pedimos mucho si reclamamos 50 centavos de cada 100 dólares que ingresaron a los países ricos".
Las potencias desarrolladas invierten más dinero en armas que en la dignificación de la vida de los seres humanos, y en la mayor de ellas, los Estados Unidos, hay más negros en las cárceles que en los colegios o universidades de toda la Unión.
Las estadísticas de Colombia dicen que 7% de los niños menores de cinco años tienen desnutrición crónica, un millón de niños no va a la escuela, 590 mujeres mueren al año por complicaciones del embarazo, y el departamento del Chocó tiene un atraso muy parecido al de las regiones más pobres de África.
Este es el país enclenque que hoy tenemos, con un desbarajuste institucional colosal, fruto de las mentiras de su clase dirigente apátrida, que se apresta a entregar lo poco que queda al zarpazo del Tratado de Libre Comercio, la nueva esclavitud que le espera a las generaciones futuras.