Europa |
Impresiones del congreso del Partido Comunista de Ucrania
Viacheslav Titiokin
Sovietskaya Rossia
Traducido del ruso para Rebelión por Josafat S.Comín
Los pasados 25 y 26 de junio tuvo lugar en Kiev el 39 congreso del Partido
Comunista de Ucrania. Un acontecimiento notable, pues el partido comunista
continúa siendo una de las fuerzas políticas relevantes, en el convulso panorama
político de la sociedad ucraniana. En el informe del CC presentado por su
Secretario General, P. Simonenko, se señalaba que la militancia del partido
asciende a 95.872 comunistas, integrados en 8549 organizaciones de base, 750
organizaciones municipales y comarcales. En el periodo entre congresos han
ingresado al partido 7819 nuevos afiliados. El número de diputados de todos los
niveles con los que cuenta el partido asciende a 4500, entre ellos 56 escaños en
el parlamento.
Como vemos, el partido mantiene una importante presencia en todos los rincones
de Ucrania y en todos los niveles del poder legislativo.
Analicemos para empezar el trasfondo en el que se ha celebrado el congreso.
Nada más cruzar la frontera se advierten las primeras señales de crisis, si lo
comparamos con Bielorrusia, donde estuve hace dos semanas. Allí saltaban a la
vista unos campos bien cuidados. En Ucrania en cambio, los campos parecen
abandonados, repletos de malas hierbas. Pensé que lo que veía desde la ventana
de mi compartimento del tren, podría ser casual, atípico. Pero no. En el viaje
de vuelta, venía conmigo una familia, que regresaba de visitar a sus padres en
la región de Zhitomir. No tuve que interrogarles sobre sus impresiones, ellos
mismos necesitaban compartir su pesadumbre por la situación en que habían
encontrado su pueblo natal. Todo estaba descuidado, vacío. Los establos y
vaquerías presentaban tejados y ventanas rotas. No hay maquinaria, el ganado
sacrificado. Toda la juventud se ha ido. En los pueblos solo quedan los
ancianos. Y esto a solo 40-50 kilómetros de la frontera con Bielorrusia, donde
las aldeas crecen como la levadura.
Kiev a primera vista ofrece un aspecto próspero. Desde la estación, se pueden
ver grandes bloques de apartamentos de aspecto elegante. Sin embargo, no deja de
ser la misma decoración que presenta Moscú, que sorprende a los extranjeros por
el lujo. El conductor que me llevó al lugar donde se celebraba el congreso, me
contaba que su salario es de poco más de 1000 griben, alrededor de 6000 rublos,
que es el salario medio en Ucrania (unos 200$. N de la T). El coste medio de la
cesta de la compra para una familia de 5 miembros, es de unos 100 griben. El
kilo de carne está a 30, 35 griben. La manteca de cerdo a 20, 25 griben.
Muchos confiaban que el cambio de gobierno, haría mejorar las cosas. Lo único
que ha subido de momento son los precios de todo, especialmente los productos de
alimentación y la vivienda. No es de extrañar que crezca la decepción y el
malestar. Entre tanto, la influencia el partido ha descendido notablemente. El
dirigente de una de las organizaciones regionales, me contaba en el congreso que
en 1998 en su región, en las elecciones al parlamento, el PCU había logrado el
52 %, en el 2002 el 27%, y en las presidenciales del 2004 por el candidato del
PCU votó solo el 8’6%.
El informe político, como es lógico, se centró en el análisis de las causas de
los últimos reveses y en las vías de superación de las tendencias negativas para
el partido. En él, se señalaba que el PCU tiene actualmente 3 frentes abiertos.
El primero contra el régimen nacionalista, pro-americano. El segundo contra la
oposición burguesa de derechas (Partido de las regiones, Partido
social-demócrata, Partido de los industriales y empresarios). El tercer frente,
contra los oportunistas de "izquierdas" (Partido Socialista, PCUS, PCU(r) y
otros).
En las intervenciones que se pudieron oír durante el congreso, se recalcó que se
ha de trabajar teniendo en cuenta las nuevas condiciones. En la actualidad,
todas las fuerzas políticas, incluyendo a la derecha, aspiran a apropiarse de
los lemas y las propuestas sociales y económicas de los comunistas. Por
descontado, esa agitación solo dura hasta la víspera de las elecciones. Pero al
contar con un enorme potencial mediático, financiero etc., los enemigos de los
comunistas consiguen engañar a la gente, "derrubiar" las filas de sus
partidarios tradicionales.
Uno de los principales debates del congreso giró en torno a la política de
alianzas. El PCU se reafirma en sus principios, de que el partido no debe
sacrificar sus posiciones de clase, en pos de una alianza con fuerzas políticas
ajenas. Una de las causas de la derrota radicó precisamente en que durante los
años 2002-2003, con el objetivo de apartar del poder al entonces presidente
Kuchma, se llegó a acuerdos con las fuerzas nacionalistas y pro-occidentales de
Yuschenko, Timoschenko y similares. Entonces los "naranjas" eran poco numerosos.
Pero los actos conjuntos con los comunistas les permitieron presentarse ante la
opinión pública como puntal de la oposición al régimen de Kuchma. "Treparon
hacia el poder, apoyándose en nuestra espalda", como dijo uno de los delegados
del congreso.
En la conferencia de prensa, al responder a las preguntas sobre la posible
colaboración con el Partido de las regiones de Yanukovich (antiguo 1er ministro,
contrincante de Yuschenko en las pasadas elecciones presidenciales. N de la T),
Simonenko subrayó que este partido representa los intereses del gran capital
(aunque a escala regional). Y esto es algo que determina la actitud del PCU
hacia ellos.
En las intervenciones se señaló, que tras el fiasco electoral, en algunos
lugares hay una sensación de derrotismo y de falta de fe en las posibilidades
del partido. Han empezado a aparecer elementos rupturistas y sectarios, como
ocurriera en Rusia con Semiguin. El poder intenta aprovechar el momento para
atraer a su lado o comprar a una parte de la militancia, intentando que la
dirección del partido se vea obligada a ocuparse de disputas internas, que le
distraigan de la lucha política real. Pero esta enfermedad ha sido cogida a
tiempo. Se han tomado ya las medidas necesarias. El partido ha cerrado filas y
se presenta unido y cohesionado.
Allí donde los comunistas trabajan con imaginación y empeño, con plena
dedicación, comienzan a verse los resultados. En el informe de la comisión de
seguimiento del congreso se señalaba que la tercera delegación con mayor
representación en el congreso, tras las regiones industriales y superpobladas de
Donetsk y Dnepropetrovsk (con 56 y 54 delegados respectivamente) ha sido la
representación de Zhitomir, fundamentalmente agrícola, con 41 delegados. En el
informe político del CC, se señaló que es precisamente en esa región donde se ha
observado un fuerte impulso en la campaña de afiliación, con 1700 nuevos
militantes en 2 años.
Una de las causas, creí verla en la apasionada intervención del primer
secretario de la organización regional del PCU en Zhitomir, N.Timoschenko. En mi
vida había visto a una persona con más energía. En uno de los descansos me
acerqué a él, para entrevistarle. Mencionó varios motivos del éxito del
funcionamiento del partido en su organización. En primer lugar señaló que la
mayoría de los dirigentes del partido no cambiaron de chaqueta después de 1991,
y se mantuvieron fieles a sus convicciones. Por eso el sistema de cuadros de la
organización territorial se mantiene estable y firme.
La segunda explicación (a mi juicio, la más importante) para el éxito de los
comunistas en Zhitomir, es el hincapié que hacen en los asuntos concretos.
Nuestra gente no sabe solo pronunciar bonitos discursos, sino que cada uno en su
puesto, hace algo real, necesario para la gente. El principio es sencillo:
"aunque sea clavar un clavo, pero haz algo por la gente". Se han sabido ganar la
confianza de la gente. En la región hay 269 diputados comunistas en los
diferentes ayuntamientos y órganos comarcales.
Hubo un sinfín de interesantísimas intervenciones, que no podríamos resumir en
un solo artículo. Recuerdo por ejemplo la intervención del secretario del
partido por la región de Odessa. Después de oírle, pensé que todavía queda gente
joven en Ucrania dispuesta a levantar la bandera de Pavel Korchaguin (1). Vi con
satisfacción una cara conocida en la mesa del congreso. Se trataba del general
del ejército I. Guerasimov, antiguo comandante de la 1ª guardia de la división
acorazada, (destinada en Dresde) de la que mi padre fue máximo responsable. A
diferencia de otros muchos importantes oficiales soviéticos, quienes como el
mariscal Kulikov, pasaron a servir a la camarilla de Yeltsin y Putin, o se
convirtieron en pancistas apolíticos, el general Guerasimov es miembro del CC
del PCU, y miembro del grupo parlamentario del PCU en el parlamento. Cuando le
conté de las andanzas de V. Variennikov, se asombró de la incongruencia del que
había sido un destacado general. Guerasimov con 64 años de militancia en el
partido comunista, no está dispuesto a renunciar a sus ideales.
Entre los asistentes al congreso, tuvo una cálida acogida la intervención del
Sec.Gral. del PCFR, Guennadi Ziuganov. Intervino con un pormenorizado análisis
de la situación en Rusia, de las tareas que se plantean ante el PCFR y de la
estrategia y táctica para resolverlas. Concedió especial importancia al
significado de la lucha por conseguir que salga adelante el referéndum (2), y
dar la mayor difusión posible a nuestras propuestas programáticas. Al finalizar
su intervención toda la sala se puso en pie y rompió en aplausos de
reconocimiento al líder de un partido hermano. Tampoco extraña la importancia
que concedió la prensa ucraniana a la visita de Ziuganov. En la conferencia de
prensa, la mitad de las preguntas iban dirigidas a Simonenko y la mitad a
Ziuganov.
A propósito. Esta proporción 50-50, sorprendentemente fue la que se mantuvo en
el congreso en lo que respecta al idioma empleado por los delegados. No pienso
que fuese algo premeditado, pero a una intervención en ruso, le seguía una en
ucraniano y así sucesivamente. Algo que era contemplado por la sala como
absolutamente natural. En la sala de prensa las preguntas se hacían tanto en
ruso como en ucraniano, y Simonenko respondía en los dos idiomas. Una evidencia
más de que el intento de suprimir el ruso con la excusa de la defensa del
ucraniano, contradice por completo el natural bilingüismo.
Antes de abandonar Kiev, tuve ocasión de visitar la engalanada plaza de la
Independencia (Maidan). Era la tarde del sábado. La avenida Kreschatik estaba
cortada al tráfico. Había un concierto. Después de estar allí diez minutos,
comienzas a entender una de las causas de la "conducción " de masas
multitudinarias, que el pasado otoño estaban dispuestas siguiendo a Yuschenko y
Timoschenko, a ir a donde hiciese falta, incluso a asaltar los edificios
gubernamentales. Parece cierto. La "música" agresiva que golpea el cerebro desde
los enormes altavoces, es capaz de zombificar a la gente, llevarlos a un estado
de exaltación, en le que están dispuestos a seguir al que "dirige" la música.
Claro que la explicación no está en la música. En el periódico del CC del PCU "Kommunist"
(uno de los más leídos en Ucrania con 780 mil ejemplares de tirada), fue
reproducida una entrevista aparecida en le periódico inglés "Guardian", con uno
de los lideres naranjas, quien se sinceraba desvelando los mecanismos de la
"espontánea energía de las masas". Según él, en la plaza Maidan, diariamente se
suministraban 5 toneladas de gachas, 10 mil barras de pan, 200 bombonas de gas
para calentar las tiendas. Antes de las elecciones fueron adiestrados 150 mil "naranjistas"
para hacer el papel de observadores, a los que se entregaron 10 mil cámaras de
video para filmar en los colegios electorales. Por supuesto no era Yuschenko ni
su equipo el que corría con los gastos.
El cuarto frente con el que se las tiene que ver el PCU es la poderosa
intromisión de Occidente en los asuntos internos ucranianos.
Dicho de otro modo. La compra masiva de votos a costa de cientos de millones de
dólares.
Pero los comunistas ucranianos también cuentan con apoyo internacional. En el
congreso, aparte de las delegaciones de los partidos hermanos de las vecinas
Rusia, Bielorrusia y Moldavia, estaban presentes delegaciones de las partidos
comunistas de Vietnam, Portugal, Siria, Francia, etc.
¿Cuál es la sensación general que deja el congreso? El partido reconoce que
sufrió una severa derrota en las recientes elecciones presidenciales. Pero nadie
baja los brazos. Se aspira a frenar la tendencia en la deceleración de la
afiliación y de perdida de apoyo electoral. Y saben el camino a seguir para
enfrentar estos problemas. Hay importantes indicios que indican que la confianza
del pueblo se está restableciendo. Pero, como se señalaba en el informe
político, el partido no puede permitirse dormirse en los laureles y abandonarse
en la "placidez burocrática". Tanto el informe, como las intervenciones de los
delegados, fueron duras y autocríticas.
El PCU comienza a prepararse para las futuras elecciones al parlamento, fijadas
para marzo del 2006. Hay fundamentos para considerar que el partido saldrá
airoso.
En el congreso fue elegido el nuevo CC del PCU, compuesto por 163 miembros y la
comisión de control compuesta por 54 miembros. Simonenko fue reelegido como 1er
secretario del CC.
Notas
1. Héroe de la novela de Ostrovsky "Así se templo el acero".
2. La estrategia política de los últimos meses del PCFR ha estado centrada en
buscar apoyos para la celebración de un referéndum a nivel nacional, donde la
gente se pudiese pronunciar en torno a los temas candentes de la vida nacional.
Son un total de 17 preguntas, entre las que se encuentran las relativas a las
preferencias sobre el tipo de propiedad (estatal o privada) sobre los medios de
producción, sobre los recursos naturales, sobre la gratuidad universal de la
educación o el sistema sanitario, sobre los gastos de vivienda, sobre el salario
y la pensión mínimos, sobre el acceso de los partidos a exponer sus posiciones
por la TV, sobre la legislación electoral, etc.
De momento, tanto la Comisión Electoral Central, como el Tribunal Supremo, han
rechazado la propuesta de celebración del referéndum. El asunto se encuentra en
los tribunales.