Europa |
Los holandeses dicen no a la constitución de los neoliberales
Eduardo Andrade Bone
Una nueva aplastante derrota han sufrido en Holanda los preconizadores del
texto constitucional de la Unión Europea, que fuera elaborado por los políticos
neoliberales, para proteger los intereses de los capitales europeos y
trasnacionales.
Los resultados electorales han dado como resultado, un 62% a favor del NO y un
38% para el SI, la participación de los electores fue de un 60% una cifra
considerada muy alta, tratándose de un país que por primera vez participa en un
referéndum en el marco de la ratificación de una Constitución Europea, elaborada
al margen de la ciudadanía.
En el caso concreto de Holanda, el referéndum tiene carácter consultivo y debe
ser ratificado por el parlamento, que en su gran mayoría (80%) estaba por la
protección de los intereses económicos neoliberales.
Como en el caso de los franceses, los ciudadanos holandeses, están por una
Europa más social, por una Europa que este al servicio de la clase trabajadora y
menos para el capital neoliberalista, que se caracteriza por ser brutal e
inhumano.
Al igual que en Francia, los capitales de estos países han movido todas sus
piezas para presionar desde el punto de vista mediático, para que la
constitución fuera aprobada, sin embargo, los pueblos de estos países, ha
resuelto todo lo contrario.
En Holanda, el universo electoral está compuesto por 12 millones de electores,
que de una u otra manera han sido arrastrado por la influencia generada por el
NO del pueblo francés.
El descontento de los holandeses, se ve reflejado en lo que ha significado el
aumento de los precios, en los productos de primera necesidad, una vez que en
este país se asumiera el Euro como moneda única. Cuyos resultados han
significado una gran perdida del poder adquisitivo de la población de este país.
Pero el NO rotundo es un llamado de atención a la clase política holandesa y
europea, que ha venido desarrollando su actividad de espaldas a los intereses
inmediatos de sus pueblos.
En Holanda, Francia y otros países que forman parte de la Unión Europea surge la
decepción, la frustración y el descontento social, ante los resultados que han
significado la aplicación de las políticas de libre comercio y mercado. Que han
dado como resultado un crecimiento de la cesantía, la inestabilidad laboral, el
deterioro de los ingresos y un empobrecimiento paulatino de los que viven de un
sueldo o salario.
El pueblo de Holanda y Francia, al votar por el NO a la constitución de los
capitales, ha entregado una clara señal de que las economías de estos países,
debe estar al servicio de los ciudadanos, pues la Europa de los capitales no
hace soñar a nadie y solo ha contribuido aun crecimiento cada vez mayor de las
desigualdades sociales en estos países, en donde la brecha entre ricos y pobres
es cada vez mayor. El seguir insistiendo con un modelo económico que ya esta
fracasado, es seguir profundizando en una fractura social entre las políticas de
derecha y el conjunto de la sociedad.
Otro antecedente importante del voto de estos pueblos, ha sido la exigencia de
mayor participación y debate, ante las decisiones que afectan directamente a
todos los ciudadanos, y este privilegio no puede ser tan solo de la casta
política en el poder, que la mayor parte de la veces cuando se trata de
cuestiones económicas, siempre legislan a favor del capital. Los pueblos de
Holanda y Francia, han dado así, un duro batacazo a la Constitución de los
capitales.