Sergio B
Nuevo Rumbo

En un reportaje, Estebán Pintos de Much Music (Pagina 12 del 13/2/05), dice "El rock masivo de los 90 se construyó como una suerte de militancia opositora a un modelo, nunca articulada ni dicha en estos términos. Para mi está claro que los grandes actos políticos juveniles de los 90 fueron los recitales de Los Piojos, La Renga, Bersuit Vergarabat y Los Redondos. Más allá de si tienen condiciones para eso o no, a esas bandas se les dio el rol de líderes sociales; incluso desde sus canciones, de manera más o menos tosca, hay una voz de oposición a un modelo perverso: jóvenes sin estudio, jóvenes sin trabajo, atiborrados de drogas. A mí lo que me molesta es que esta gente, que construyó su poder de líder social desde los chicos, del público, no dijeron nada ante lo que pasó en Cromañón... ".

Y yo me digo: ¿dónde están las bandas?
Los chicos, nuestros chicos, muchos niños, preadolescentes y adolescentes, consumidores de CD’s, remeras, los que siguen casi devotamente a sus bandas, lo dan y lo dieron todo.
La "tribus", con sentido de pertenencia se junta, pinta sus "trapos", se tatúan el cuerpo –para siempre-, pretendiendo unirse con sus músicos, también para siempre. Son los que hacen el "gasto" material, también el espiritual, y el de la voluntad.
Y ¿dónde están las bandas? ¿Dónde están los "stars"?
No ví, ni en el altar de Plaza Once, ni encabezando las marchas o acompañando a los chicos ni a los familiares... No ví a "Callejeros" que debía estar en primera fila. No ví a la Bersuit, no vi a Divididos, Las Pelotas, a los Piojos ni a La Renga, o a tantos otros. No ví tampoco que ellos se reunieran entre sí y se dirigieran a los fans para decirles algo, para reconocer sus errores, tomar decisiones conjuntas, con el objetivo de desprenderse de los empresarios y de los políticos corruptos que juegan con la vida de los jóvenes...
Vi sí algunas banderas levantadas por sus fans, sin los líderes rockeros al frente de las mismas...
A veces me dicen "que los Callejeros están dolidos porque también perdieron a familiares, amigos..." Y yo me pregunto: ¿Habría un dolor distinto para unos y para otros? ¿El dolor no debía ser solidariamente compartido y el grito de justicia fuerte, unido, resonante, capaz de romper las tribus musicales ante una masacre como la sucedida?
Pintos, dice que este rock es "conservador, familiar y de orden", que no es de cambio. Seguramente que es así.... También dice que el discurso de las bandas no intenta sacar a los jóvenes de la falta de futuro.
Yo, -aclaro- no pido esa función, porque la creación de una realidad diferente y de herramientas para transformarla, debe ser tarea de la juventud misma.
Con todo, la tremenda ausencia de las bandas, instala el debate sobre hasta dónde, como líderes musicales, asumen la responsabilidad de comprometerse en la seguridad de sus fans, en la solidaridad activa más desinteresada y plena con las víctimas, en la búsqueda de Justicia, sin otro cálculo que el de deberse, en las buenas y en las malas, a sus fans...
Yo y muchos otros, simplemente, esperábamos eso.
Pero estuvieron lejos de pasar la prueba. Habrá que discutir mucho, -entre todos-, por qué...
De lo que estoy seguro, es que no los reconozco como líderes.
Seguramente, pedirán, en los próximos festivales, el ritual minuto de silencio...
Ojalá no se haga silencio...