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Argentina: La lucha continúa

Algo huele mal en La Argentina.

Alberto Lapolla

La intromisión del asesino de Kostecky y Santillán ofende la lucha del pueblo de la Ciudad de Buenos Aires. Un artículo de Alberto Lapolla 20-01-05 'Juan José Alvarez fue el responsable directo de lo que pasó en la estación de Avellaneda, porque fue el personaje, el monje negro, que se reunió con las cuatro fuerzas y coordinó toda la represión de lo que pasó en Avellaneda. Lamentablemente, esto parece que nunca acaba, porque para aquellos que perdimos nuestros hijos, es todo una burla, es todo muy siniestro, es todo maquiavélico, porque esta clase de tipos, en vez de estar pudriéndose en una cárcel, son todos premiados, son todos premiados, porque es así.
Ahora este señor, con esta impunidad, fue uno de los responsables directos de la muerte de Daniel y de Maxi y está como que va a ser el que nos va a proteger. ¿Y cómo nos va a proteger alguien que ha matado?' Lo dijo Alberto Santillán, papá de Darío, asesinado junto a Maximiliano Kosteki en el Puente Pueyrredón por policías integrantes de un operativo conjunto que incluyó a las tres fuerzas federales (Prefectura, Gendarmería y Federal), y a la Bonaerense, bajo un mando común, el del por entonces Ministro Juan José Alvarez. Martín Echenbaum (CONOSUR) (Fecha publicación:20/1/2005) Argenpres 'Carlos Menem y su secretario privado, Ramón Hernández, recuperaron los fondos que tenían en sus cuentas en Suiza, casi 7 millones de dólares, por resolución de la juez Christine Junod, que los investigara por presunto blanqueo de dinero, confirmó a AFP el Procurador General de Ginebra, Daniel Zappelli. La juez Junod tomó esta decisión antes de dejar ese cargo el pasado 30 de septiembre de 2004, al haber postulado a otro puesto judicial, siendo reemplazada como juez de instrucción por Vincent Fournier, promovido desde su anterior función como adjunto de la procuraduría de Ginebra. En ese contexto, el Procurador general Daniel Zappelli, jefe de los fiscales del Cantón de Ginebra, ordenó el archivo del sumario, lo cual no fue apelado por el abogado mandatado por el gobierno argentino, Paolo Bernasconi, convirtiéndose en una sentencia firme, que ya no puede ser contestada al haber expirado el plazo para hacerlo.' Juan Gasparini (desde Ginebra, especial para ARGENPRESS. (Fecha publicación-20-1rnasco.' Juan Gasparini (desde Ginebra, especial para ARGENPRESS.
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'Se dice que el Gobierno busca conformar un multimedios oficialista, que por supuesto no sería conformado por Canal 7 y Radio Nacional, sino por los medios de comunicación de Tinelli y Hadad. El titular del Comité Federal de Radiodifusión (COMFER) Julio Bárbaro, dijo hace unos meses en una revista que Moneta, ex banquero de Menem, ex titular del Grupo de medios CEI, investigado por numerosos actos delictivos, es 'uno de los nuestros', porque es un empresario nacional, y también popular, como no.
Moneta es socio de Hadad en Canal 9. Hadad es dueño del Grupo Infobae (además del 9, tiene Radio 10, FM Mega, FM Amadeus, el Diario Infobae y el portal de Infobae digital). Tinelli es dueño de la productora de Ideas del Sur y de Radio del Plata. Moneta sueña con destruir al Grupo Clarín. Tinelli quiere tener un canal (piensa quedarse con el 9). Hadad quiere...
¿sólo seguir acumulando millones? Al Gobierno esta alianza le resulta encantadora. ¿Escuchaste Radio 10 últimamente? Está re progre. Ya no se escuchan arengas contra el setentismo del modelo K, el Presidente es defendido a capa y espada y aún hay más. Tras la masacre de Cromagnon, la radio de Hadad, al igual que en sus otros medios, se ocuparon de dejar en claro que la responsabilidad absoluta de la matanza era del empresario Chaban. Para Aníbal Ibarra, nada. Es más, Ibarra fue entrevistado en el mismísimo estudio de la radio por Eduardo Feinnmann (este es el malo), quien le dejó picando todas y cada una de sus preguntas, ni una crítica salió de su boca. ¿Qué tienen en común Duhalde, Kirchner, Alvarez, Ibarra, Hadad, Moneta y Tinelli? ¿Qué intereses defienden y defenderán? QSVT'.
Martín Echenbaum (CONOSUR) (Fecha publicación:20/1/2005) Argenpres 'Telerman negó vínculos con Chabán. En declaraciones a la agencia Télam, Telerman calificó las versiones que intentaban ligarlo comercialmente al empresario detenido como 'absurdas' y las atribuyó 'a servicios de inteligencia desocupados'. Sin embargo la primera conexión, no necesariamente comercial, entre Chabán y funcionarios del gobierno de la Ciudad la lanzó el abogado Marcelo Parrilli, conocido por su trayectoria en defensa de los derechos humanos. Parrilli sugirió a la jueza de la causa, María Angélica Crotto que realizara un cruce de llamadas telefónicas entre los celulares de Chabán, Telerman y el jefe de gobierno, Aníbal Ibarra.' Clarín 20-01-05. pg 34 'Ahora, para celebrar el comienzo de un nuevo año, el poder político ha resuelto obsequiarnos la resurrección de Juan José Alvarez, hombre que ha hecho de la promiscuidad su arte: entre 1991 y 1993 integró el directorio del Banco de la Provincia de Buenos Aires. De allí, y hasta el año 1995, bajo la administración Menem, ocupó la subsecretaría de la Función Pública de la Presidencia de la Nación. Luego fue electo intendente de Hurlingham, empleo político que abandonó el 26 de octubre de 2001 para instalarse en el despacho del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires: cabe recordar que Carlos Ruckauf era el gobernador. Dos meses más tarde, en los días previos a la rebelión de diciembre, supo brindarle al duhaldismo una generosa mano. Recibió en su oficina al entonces piquetero Luis D´Elía y le aconsejó: "Ustedes, si quieren darle a los comercios chicos, denle p´adelante, basta que no se metan con los hiper". Tras la caída del gobierno de la Alianza, Adolfo Rodriguez Saá lo designó ministro de Seguridad de su efímera y grotesca verbena nacional. La buena fortuna de Juanjo no finalizó allí: su amigo Duhalde juzgó oportuno premiarlo con el cargo de ministro de Seguridad, Justicia y Derechos Humanos de la Nación.
Demasía de responsabilidades a las que supo responder con aplomo y convicción. El viernes 7 de junio del 2002, es decir, diecinueve días antes de la masacre de Avellaneda, dijo: "El gobierno está decidido a impedir los cortes. No se trata de dureza o blandura, sino de una decisión política. A la ciudad no se la puede bloquear. Habrá operativos conjuntos de las Fuerzas de Seguridad para hacer frente a este tema". El día 19 de junio, advirtió: "Los intentos de aislar totalmente la Capital serán considerados una acción bélica". ¿Acción bélica? Vaya palabras. Recordar lo que sucedió una semana después en Puente Pueyrredón suena a reiteración enojosa. Pertinente, sí, es traer a la memoria la conducta de Álvarez en las horas posteriores al asesinato de Santillán y Kosteki. En la noche del mismísimo 26 de junio, en conferencia de prensa y de modo pueril, procuró justificar los asesinatos, la cacería, las balas de plomo, la brutal represión: "Se han visto agresiones con una honda, con escopetas, armas y bombas molotov". Detuvieron a 160 manifestantes y no lograron hallar siquiera un arma.
Al día siguiente, el ministro del Interior, Jorge Matzkin, leyó ante la prensa un comunicado escrito por Alvarez: "Las acciones que dejaron el trágico saldo de dos muertes, constituyen un plan de lucha organizado y sistemático, que puede llegar a amenazar y reemplazar la fórmula de consenso que la mayoría de los argentinos hemos elegido. Hay quienes prefieren el lenguaje de la violencia".Bienvenido, Alvarez, al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.(..) En la tierra de pocos el ministro del Interior es un personaje que en octubre de 1994, cuando estaba a cargo de la Intendencia de Quilmes, fue acusado de haber cometido irregularidades administrativas por el juez Ariel González Elicabe, quien finalmente ordenó su detención. Aníbal Fernández huyó de su despacho oculto en el baúl de un automóvil y, por un par de días, se refugió en alguna pocilga duhaldista. ' Hernán López Echague 15-01-05 Las hienas En un país que aun ignora que su fundador fue envenenado y arrojado al mar por el capitán de un barco británico, por pedido de sus enemigos en la Primera Junta y el siempre previsor Foreign Office, es lógico que la memoria sea una mercancía escasa.
Luego del pacto de impunidad entre K y Carlitos que le permitiera al Infame Traidor a la Patria volver al país -hasta parece que pagó su fianza con terrenos fiscales- la realidad argentina se ha tornado tan áspera y cruel, que se podría seguir citando atrocidades, que la prensa publica diariamente, casi sin emitir opinión. Todo está dicho y expuesto.
En la Argentina posterior a la dictadura, el poder se conforma de hienas, chacales y perversos. El peronismo posterior a Carlitos es un partido de hienas. Sólo ellos pudieron volar la ciudad de Río Tercero para tapar las coimas del contrabando de armas. Sólo Ruckauf pudo decir lo que dijo y hacer lo que hizo.
Sólo K puede pactar con Carlitos o con Haddad por mezquinos cálculos electorales. De la misma manera las hienas ahora cobraron su precio en la tragedia que nos sacude en la inmolación juvenil de Cromagnon. Así el duhaldismo, heredero directo de Carlitos, pudo decirle a Ibarra: '-Mirá lo que tengo. Lo tengo a Telerman con Chabán. Mirá vos!. ¿Qué te puedo cobrar?. -¿? - !Juanjo vá o vá!'. Palabras más, palabras menos, las que le dijo el padrino Duhalde a un demudado -sabiendo porqué- chico del Colegio Ibarra ¿Se acuerdan de la defección de Reutemann y la famosa película con un disfraz de odalisca, entregada por el sobrino de Carlitos? Duhalde viene a destruir las conquistas democráticas de Buenos Aires El poder colonial real, dueño de la Argentina, está a punto de asestar el golpe más duro al corazón de la rebelión popular del 19 y 20 y su propagación democrática. Golpe que Duhalde intentó durante todo el tiempo que duró su interinato en la Rosada. Y que incluyó el odio y el desprecio de la población de Buenos Aires. Intentos que incluyeron la matanza del Puente Pueyrredón como pieza fundamental para destruir al movimiento popular emergido del 19 y 20. Intentos que suman el asesinato del Oso Cisneros, entre otras provocaciones. Pero no pudo. La potencia y la madurez instintiva del movimiento popular se lo impidieron.
Pero la derecha -el poder- es incansable. Su trabajo es ese, ver como perdurar y aplastar la rebelión.
Tiene todo el tiempo del mundo. Y hoy en la Argentina, tiene también mucho poder de influencia. Los medios de comunicación y las campañas de terror por medio de la orquestada inseguridad, le permiten continuamente macerar el cerebro de la clase media, fragmentando el frente popular. El no haber podido construir una nueva herramienta popular superadora del peronismo mafioso y colonial, de la UCR andrajosa y colonial, del Frepaso gatopardista y colonial y de una izquierda infantil y también colonial, sigue siendo el talón de Aquiles del campo popular. El duhaldismo, el núcleo central del poder colonial de la Argentina -el que venció a Carlitos y lo heredó- viene a destruir la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Viene 'a destruir su permisividad' como acaba de decir el antiguo 'Contador' del Concejo Deliberante de Carlos Grosso, Jorge Giorno, hoy legislador, pronto a saltar al duhaldismo. Como si delincuentes como él nos fueran a dar el permiso para vivir. Pero eso cree la casta colonial gobernante. El duhaldismo viene a hacer cumplir el nuevo Código Contravencional aprobado por el macrismo durante la ofensiva de Herr Blumberg y que el ibarrismo aplicaría tenuemente. Está claro que el núcleo central de dicho Código -amén de la supresión de conquistas democráticas- se refiere a la represión de las marchas y movilizaciones que desde el 19 y 20 han recortado -sólo eso- los planes de la derecha.
Duhalde viene a destruir las asambleas populares, las que pese a la mirada liquidacionista de J.P. Feinmann siguen existiendo y ocupan un lugar importante en la cosntrucucción democrática de una nueva alternativa política en la Ciudad. Si en el conurbano el enemigo de Duhalde es el movimiento piquetero autónomo porque destruye la esclavitud clintelística de los pobres, en Buenos Aires el enemigo jurado del poder colonial son las asambleas y el poder autónomo que de ellas emerge.
O cualquier otro. Incluso el de las empresas recuperadas. ¿O no nos acordamos de la despedida de Duhalde de la Rosada con la salvaje represión en Brukman? Todos ellos son viejos anhelos de la derecha, más allá de la estupidez del gobierno ibarrista. En un sentido estricto Ibarra, ha cumplido a rajatabla el viejo apotegma de Ernesto Palacio: 'El jacobino que actúa como conservador, da la razón a su enemigo y está pronto a ser reemplazado por éste.' (1) Juanjo te tengo junado Juanjo, como lo demostró desde el primer día viene a reprimir. Reprimió cada marcha de los familiares de los jóvenes inmolados con un enorme aparato policial, con actitudes claramente agresivas. Cazando jóvenes manifestantes al mejor estilo de los grupos parapoliciales que detuvieron a los 16 presos de la Legislatura. Viene a impedir otro 19 y 20 y a cobrarse aquel, que el pueblo de Buenos Aires birló a los planes del duhaldismo y don Alfonso. Viene a avanzar sobre las conquistas del pueblo de la Ciudad. Esas conquistas siempre molestaron al duhaldismo porque lo dejan en evidencia. Si bien el gobierno de Ibarra no ha sido ni el 1% de lo que el Frente Grande prometiera allá por 1995, la propia construcción social de la Ciudad, su enorme movimiento popular, su larga historia de rebeliones desde 1806, consiguieron un alto grado de democracia concreta. De control sobre la policía. De disfrute del espacio público. De libertad cultural. De libertades concretas. De control de gestión. De participación. De algún control sobre el autoritarismo del poder. Todas cuestiones que son impensables del otro lado de la General Paz, donde gobierna la mafia narco-policial de Duhalde. El sólo hecho que en la Ciudad no rijan los edictos policiales siempre molestó al brutal autoritarismo duhaldista. De cuya producción son las cárceles más atroces del mundo. Las que construyeron Duhalde y Ruckauf y hoy regentea Felipillo. Juanjo viene a echar a los pobres que ocupan espacios en la Ciudad y que las empresas que Duhalde representa reclaman. Viene a echar a los desocupados que construyeron sus casillas en la Costanera Sur, para que Irsa pueda construir sus torres. Viene por la Reserva Ecológica, una de las mayores conquistas del pueblo de la Ciudad, para que Macri, Roggio y Techint construyan el pueblo para ricos planificado por el doblemente genocida Brigadier Cacciatore. Viene a poner en regla a las chicas y los trabas que le achican la caja a la federal y a los punteros y dan mal ejemplo para el control social en la provincia. '-Burdeles sí. Putas sueltas, libres, no'. Es el slogan de los chupacirios y moralistas macristas que cuidan la caja de los gigoló de uniforme y corbata.
Resistir es la consigna...
El duhaldismo ha intervenido la Ciudad de Buenos Aires en un claro chantaje por la brutal responsabilidad de Ibarra y Telerman en el desmanejo de la Ciudad. El jefe de gobierno debió pagar con la intervención de su gobierno a la mafia duhaldista -que K dejó hacer, porque siempre deja hacer cuando la realidad lo supera-, su cobardía de no asumir la catástrofe ocurrida por su responsabilidad. Por supuesto que era más digno ponerse a la cabeza del salvataje, exponiéndose a los insultos merecidos de los familiares, estando donde debía estar. Hasta era más digno renunciar y llamar a elecciones anticipadas, ante tamaña catástrofe que desnudaba la incapacidad de su gobierno. Alguna vez deberá volver la política de principios y acabar con la estupidez mediática. Sin embargo Ibarra no pudo escapar al destino de telgopor, de la fuerza creada por Chacho. ¿Es que alguien se acuerda de Graciela Fernández Meijide? Pues Ibarra solo dejó pasar varios trenes, antes de ir a encontrarse con la 'Vieja'.
Duhalde hace playa en Buenos Aires para atacar las conquistas democráticas del pueblo de la Ciudad, desde el asesinato de Bulacio hasta aquí y para prevenirse de su posible próxima derrota electoral a manos de Cristina. Si es que eso ocurre, porque tal vez K decida que lo mejor es que Duhalde y Chiche sigan manejando la provincia, a ver si se menean cosas que no deben menearse. Además para que el cavallista Alberto Fernández sea candidato hace falta destruir al ibarrismo. Total a Duhalde siempre le gustaron las tareas sucias. En última instancia Duhalde, que es aliado de Macri está asegurando el triunfo de su pupilo en las elecciones del 2007, destruyendo el progresismo vacío y antipopular de Ibarra.
Por eso es más necesario que nunca juntar todas las fuerzas democráticas, populares y nacionales contra la avanzada del duhaldismo en la Ciudad. Sigue siendo necesaria la construcción de una nueva fuerza política nacional, que pueda abrir un nuevo destino a la liberación del pueblo argentino. No hay que olvidar -como nos lo recuerda la tragedia de Cromagnon- que el plan del poder es el genocidio. El pueblo argentino debe y puede escapar a ese destino que la clase dominante le depara y como supo decir en la calle, para eso es necesario 'que se vayan todos', crenado un nuevo movimiento popular.


(1) Palacio Ernesto, Historia de la Argentina. Tomo I.
Abeledo Perrot. BA. 1986.