Felipe Pérez
Conexión Social

Teniendo en cuenta que a pesar de lo ocurrido en estos días, de conmoción política, debemos dar continuidad a nuestra labor de impulso de la democracia participativa, luego de la posposición del Encuentro Nacional del Poder Popular Participativo y Protagónico, y se propone a todos los promotores del poder popular, la estrategia para el mes de marzo, que consta de medidas:

1. Defensivas: Ejercer acciones legales contra Alcaldes y otras instituciones que hayan incumplido la legislación que promueve la participación ciudadana en el gobierno.

2. Ofensivas: Convocar a asambleas populares para elegir apropiadamente a los consejeros de los CLPP, definir las prioridades presupuestarias, y evaluar la gestión del Alcalde, a la vez que barajar precandidatos a todos los cargos locales de representación popular.

En materia de estrategia defensiva, ya se ha detallado el tipo de acción que puede emprenderse, y puede encontrarse en el portal www.conexionsocial.org.ve. Es de enfatizarse que no debemos quedarnos sólo en acciones defensivas. En la práctica, lo defensivo persigue destruir lo mal hecho, o criticar lo que no se ha hecho. Pero el pueblo puede hacer muchísimo más que esto: puede construir, basado en la Constitución y las leyes; puede asumir el poder, empezar a gobernar por lo menos a nivel local, en todos los aspectos, que tienen que ver con lo económico, lo social, y también con la seguridad y defensa.

*Asambleas comunales y parroquiales*

Dado el vencimiento a finales de marzo del plazo para reformular los presupuestos municipales, deben hacerse, cuanto antes, convocatorias a asambleas de comunidades organizadas, sean vecinos, o grupos organizados (ecológicos, deportivos, culturales, campesinos, de trabadores, etc.). La convocatoria puede hacerla cualquier ciudadano o grupo de ellos, pero lo importante es que quienes convoquen tengan poder de convocatoria, para que a la asamblea vaya el mayor grupo posible de ciudadanos. Debemos en este sentido trabajar unidos los grupos organizados que impulsan la participación, como los Círculos Bolivarianos, los Comités de Tierras, Clase Media en Positivo, Comités de Salud (incluyendo los activistas del Plan Barrio Adentro), grupos implicados en las Misiones educativas (Robinson, Ribas, etc.), y todo tipo de organizaciones vecinales y comunitarias.

Las asambleas deben ser legales. Para esto beben enviarse por lo menos cuatro cartas: al Presidente de Junta Parroquial y demás miembros, con un máximo de firmas; al Defensor del pueblo; al Contralor municipal (quien es el que debe estar al tanto de las propuestas); y al Síndico municipal, en representación legal de la alcaldía. Las cartas deben tener una copia que sea contenga el acuse de recibo.

Las asambleas deben tener el máximo posible de cuidadanos, para que tengan el máximo grado posible de legitimidad, dadas las condiciones objetivas. Para ello, la convocatoria debe ser pública y notoria (debe existir por lo menos una invitación por medio impreso, aunque sea pequeño, como en una mancheta, para que conste luego legalmente). Debe ser convocada con un mínimo de 15 días de anticipación, en un lugar apropiado. Las decisiones deben ser consignadas en un acta, firmada por todos los asistentes. Se propone que el libro de actas, de pasta gruesa, sea registrado en una notaría. Se propone que se circule una hoja para consignar los nombres y modo de localización de los asistentes, para que se pueda firmar luego el acta si no hay tiempo en el momento. Se propone que se tomen fotos en la asamblea, como prueba documental de su realización.

Cuando son asambleas de los sectores, debe identificarse a las personas del sector que se llevará al CLPP o a la Alcaldía, en su defecto. La asamblea es válida si sus integrantes están plenamente identificados con el sector y debidamente registrados ante el CLPP o la Alcaldía. Las identificación debe contener prueba idónea de estar activos en el sector.

Se propone a los promotores locales y regionales establecer un cronograma regional, a fin de poder asistir a la mayoría de las asambleas, y se propone publicar en la página _www.conexionsocial.org.ve_ ese cronograma para informar al resto del país.

*Acotaciones imporantes*

Es muy posible que las autoridades municipales, en particular si han designado "a dedo" a los consejeros del CLPP, no consideren legítimas las asambleas realizadas en este proceso. Es conveniente que las comunidades, junto con sus consejeros legítimos, se reúnan para acordar acciones conjuntas, y presionen a las autoridades municipales, y a la defensoría del pueblo, para hacer valer sus derechos.

Es importante que las asambleas propuestas tomen decisiones con relación a sus candidatos a alcalde y otros cargos de representación local (consejales, juntas parroquiales). Es de hacer notar que la Ley de los CLPP sólo permite a la comunidad organizada incidir sobre el presupuesto de inversiones, que significa entre un 20 y 30% de los ingresos totales del municipio.

Mientras se modifica la ley para que el pueblo pueda controlar el 100% del presupuesto municipal (para que se pueda reestructurar completamente la administración pública local, en particular para que se erradique el clientelismo en la designación de funcionarios, se controle la calidad de los servicios de educación y salud, etc.), el pueblo debe tener alcaldes que permitan que todo el presupuesto sea controlado por el pueblo organizado.

Es también una falla de la actual ley que en las ciudades grandes como Caracas, Valencia, Maracaibo y Barquisimeto, el número de consejeros de los CLPP es obviamente insuficiente para permitir la democracia directa. Para evitar que los CLPP se constituyan, de hecho, en un organismo más de democracia representativa, se propone la conformación de un Consejo Local Ampliado de Planificación Pública, una asamblea de delegados de comunidades y grupos organizados que gobierne las grandes ciudades. Para esto también se necesitan alcaldes que permitan esta forma de gobierno directo mientra se modifica la ley. Se propone que todos los precandidatos a alcalde vayan a las asambleas comunales y planteen sus programas de gobierno y su compromiso a gobernar con el pueblo. En Valencia ya se está proponiendo dentro del tercer punto de la agenda de las asambleas que se vote uninominalmente por los precandidatos, para que, una vez sumados los resultados de cada asamblea, se designe a quien saque mayoría como el candidato del pueblo organizado, y los demás precandidatos declinen su candidatura, en función de la unidad, pero "desde abajo", y no impuesta por mecanismos de concertación o negociación "desde arriba".

Finalmente, se recuerda una vez más que hasta el 31 de marzo hay plazo para que los presupuestos municipales sean reformulados. La única manera en que se garantiza que los ciudadanos puedan plasmar en los planes municipales sus prioridades es realizar reuniones de los CLPP antes de esa fecha para decidir esta importante etapa de gobierno. Las asambleas de ciudadanos deben seguirse convocando, de todas maneras, aún si no se han conseguido convocar adecuadamente antes de esa fecha. Están planteadas de todas maneras todos los otros aspectos de gobierno local: gestión y control de ejecución presupuetaria. Además está el asunto de la selección de candidatos a de alcaldes y otras autoridades locales que representen el sentir popular.