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Latinoamérica

Imagine

Julio Fermín
EFIP ALAI-AMLATINA

Imagine que Ud. está en su ciudad, en su país, cualquiera que sea...
Imagine que en los sectores de clase media y clase alta de la ciudad se realizan protestas similares a la de los piqueteros en Argentina, pero sin las demandas de inclusión social de éstos...
Imagine que un grupo de los manifestantes realiza un acto de desagravio en la sede de la embajada de Estados Unidos en medio de una de las coyunturas internacionales más anti- norteamiericanas que se vive en el mundo...
Imagine que las policías municipales responsables del orden público son los custodias de los manifestantes, facilitan la destrucción urbana y establecen un toque de queda extraoficial en algunas zonas de la ciudad...
Imagine que en la ciudad se intenta imitar el estilo de los rebeldes haitianos, sin que este pobre país tenga el petróleo y las reservas de más de 20 mil millones de dólares que posee el suyo...
Imagine que se denuncia la violación de los derechos humanos, mientras los manifestantes se impiden a sí mismos el libre tránsito, ponen en peligro sus vidas, la de sus familias y vecinos...
Imagine que no hay un solo fallecido ni herido que forme parte de la militancia o dirigencia de los partidos opositores...
Imagine que, como algo muy extraño, el 60% de la población que vive en barrios y representan la mayoría excluida socialmente no está participando en las manifestaciones violentas...
Imagine que quienes respaldan al gobierno, se mantienen en calma y los dirigentes hacen llamados a no caer en provocaciones...
Imagine que la dirigencia opositora desconoce la autoridad electoral porque sencillamente no da el resultado al que aspiran...
Imagine que las operaciones de protesta social se planifican, coordinan, estimulan, alientan y evalúan desde los medios de información privados mientras se cuestiona la libertad de prensa...
Imagine que la dirigencia de la gente que protesta le habla desde un hotel 5 estrellas, bien vestidos y llamando a la resistencia pacífica sin cuestionar los destrozos que sufre la ciudad ni condenar la violencia...
Imagine a dirigentes opositores al gobierno que cuestionan la democracia vigente pero se niegan o dificultan el diálogo...
Imagine a la Guardia Nacional a la defensiva y presionada para aumentar la represión, saliéndose del libreto que respeta los derechos humanos...
Imagine al responsable de la Defensa Nacional esperando que lo llamen los Alcaldes opositores de las zonas donde se realizan las protestas...
Imagine a un Gobierno también a la defensiva cuidándose de las provocaciones anónimas o camufladas de la oposición para no empeorar la situación...
Imagine a un Gobierno esperando peligrosamente el desgaste de la protesta sin un plan efectivo de negociación ganar/ganar...
Imagine que su país es uno de los más observados del continente por los organismos internacionales, quienes son la última esperanza de los opositores, pero al mismo tiempo exigen respeto a la autoridad electoral...
Imagine que estos organismos internacionales hacen un llamado preciso a los medios informativos para que llamen a la calma...
Ya no imagine nada, es demasiada tensión, Ud. se encuentra a esta hora en Caracas o cualquier ciudad de Venezuela.