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Latinoamérica

El Salvador podrá tener su primer presidente de izquierda

Brasil- Adital*
Micheline Matos

Tres millones y medio de salvadoreños participarán en una decisiva elección presidencial el próximo domingo día 21. A través del voto estos ciudadanos podrán elegir, por primera vez, a un partido de izquierda. El actual partido del gobierno está en el poder hace más de una década, o sea, desde entonces no hubo otra alternativa de gobierno, prevista en la Constitución Nacional como un punto fundamental de la democracia. Los candidatos al cargo de jefe de Estado son: Shafick Jorge Handal, por el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN); Tony Saca, de Arena; Rafael Machuca, del PCN; y Héctor Silva, de la Coalición de Partidos Centro Democrático Unido y Demócrata Cristiano (CDU/PDC).

El actual gobierno está a cargo de la Alianza Republicana Nacionalista (Arena) y los dos partidos que están al frente de las preferencias electorales son: FMLN, partido de izquierda y de oposición, que arrastra sobre sí un pasado de conflicto, pero también de luch; y Arena, de extrema derecha. Esos dos grupos han sido parte del proceso histórico del país, pues tuvieron un papel fundamental en el proceso de paz tras 12 años de conflicto armado. Estos acuerdos de paz fueron firmados el 16 de enero de 1992, comprobando que el proceso democrático de El Salvador tiene pocos años.

Años de conflicto

La guerra civil que se desarrolló en El Salvador entre 1981 y 1992 fue resultado de conflictos sociales generados por el sistema político y económico de corte oligárquico que se implantó en el país a finales del siglo pasado. El inicio del conflicto fue en 1970, cuando pequeños grupos revolucionarios iniciaron la lucha armada y, en aquel momento, la represión gubernamental contra las organizaciones populares y sectores de oposición se intensificó. En este contexto son fundadas las organizaciones político-militares, formadas por sindicatos, organizaciones estudiantiles y partidos de oposición. El periodo entre 1980 y 1992 fue marcado por intensos y sangrientos enfrentamientos, caracterizado por la profundización del terrorismo.

La guerra civil dejó, aproximadamente, 75 mil víctimas, 8 mil desaparecidos, 12 mil lisiados, 1,5 millón desplazados y miles de víctimas afectadas moralmente por la pérdida de sus entes queridos. Sin embargo, con los acuerdos de paz, las partes involucradas: gobierno, Fuerzas Armadas de El Salvador y el FMLN, se responsabilizaron en la construcción de una sociedad democrática, un estado de derecho con reformas constitucionales, respeto a los derechos humanos, monitoreo internacional, reestructuración y reducción de los sectores armados y reformas al sistema judicial y electoral.

Encuesta

Un estudio de análisis de los avances de gobernabilidad en El Salvador, financiado por Oxfam de América, muestra que los salvadoreños no están satisfechos con el gobierno y aconseja que "la sociedad genere modelos de participación de la ciudadanía y que ésta sea el eje fundamental del diseño de las políticas públicas. Con esto, los ciudadanos tendrían la capacidad de ejercer control social sobre las políticas y políticos que la representan".

La más reciente encuesta hecha por el Centro de Investigación de la Opinión Pública (Ciops) muestra que el partido del gobierno obtendría el 51% de los votos necesarios para ganar la presidencia en este 21 de marzo. Si las elecciones se hubieran realizado entre el 27 y el 29 de febrero, según los datos arrojados por el Ciops, Arena, el partido oficial, logra una intención de voto del 52,47%, mientras el FMLN obtiene un 37,88%. Pero es también importante señalar que está siendo hecha una "campaña sucia" contra el FMLN.

Desde hace algunas semanas se ha desarrollado una verdadera campaña en contra del FMNL, al cual se ha acusado, sin ninguna prueba y con argumentos que, más tarde, se revelaron como una mentira del actual presidente Francisco Flores. El mandatario acusa a su opositor de estar armando a las "maras", las temidas pandillas juveniles que proliferan por todo el istmo. Los expertos de Ciops creen que la consecuencia de esas acusaciones infundadas fue la caída de 3 puntos en las encuestas. 42.96% de las personas que manifestaron estar temerosas de la llegada del FMLN al poder, el 33.95% afirmaron que el temor lo genera el candidato; y el 27.53% la posibilidad de tener un gobierno socialista o comunista.

FMLN y Arena

Sobre la historia del FMLN, el estudio de la Oxfam de América afirma que es importante recordar que su naturaleza es parte de un conflicto, de una lucha de clases y que pretendían llegar al poder a través de la lucha armada, que vendría a establecer un cambio de sociedad, donde hubiese justicia y equidad. Después de los acuerdos, busca una vía política y se constituye como partido de oposición.

En cambio, Arena es una fuerza de derecha surgida sobre la base del combate al "comunismo". Sus líderes, involucrados en asesinatos como el de Monseñor Óscar Arnulfo Romero, representan la ideología de los más fuertes del país: los empresarios, los banqueros, los cafetaleros, entre otros. El estudio afirma además que Arena nació como el ala política de los infames escuadrones de la muerte que torturaron y asesinaron a decenas de miles de salvadoreños y a muchos extranjeros. Sus víctimas incluyeron numerosos reporteros, sindicalistas y monjas estadounidenses, y varios sacerdotes salvadoreños y españoles.

Estas dos fuerzas se ubican en el contexto actual donde una de éstas definirá el rumbo de El Salvador, un país lleno de problemas estructurales y que tiene una fuerte influencia de Estados Unidos. Del mismo modo que Guatemala en 2003, las elecciones salvadoreñas también serán observadas por algunos organismos como las organizaciones de inmigrantes en Los Ángeles, la Asociación Americana Nacional Salvadoreña (Sana), el Centro de Recursos Centroamericanos (Carecen), el Comité de Solidaridad con la gente de El Salvador (Cipes), además de grupos estudiantiles y líderes religiosos. El objetivo de esos grupos es hacer transparente el proceso electoral.

* Micheline Matos es periodista de Adital. Con informaciones de Roberto Pineda, Centro de Paz, Guillermo Alvarado, Red Spike Press y prensa local.