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Munguía Payes es un militar que combatió al frente Farabundo Martí de Liberación Nacional (FMLN). Ahora, revisando el pasado y apostando hacia el futuro salvadoreño se ha enrolado en el partido de la ex guerrilla. Lo que sigue es el discurso pronunciado el 16 de enero del 2004 con motivo de celebrarse un año mas de la firma de los Acuerdos de Paz.
'Quiero comenzar mis palabras agradeciendo al FMLN
y a los organizadores de este importante evento, la oportunidad de dirigirme al
pueblo salvadoreño en presencia de tan distinguida concurrencia, en esta fecha
histórica tan importante.
'Una vez mas lo hago como oficial
en retiro y en representación del movimiento de unidad nacional, conformado por
una gran cantidad de ciudadanos y ciudadanas entre los cuales destacan
profesionales civiles y militares, el movimiento de unidad nacional a su vez es
miembro de la alianza cívico política por el cambio, y apoyamos al FMLN su
plataforma política, y su formula presidencial.
'Apoyamos el cambio por que es
necesario, apoyamos la alternabilidad por que es un factor fundamental de la
democracia, donde no hay alternabilidad florece el autoritarismo donde hay
autoritarismo, hay abuso, prepotencia, corrupción, irrespeto a los derechos
humanos y confrontación social, esto ultimo queremos evitar, pues la historia
puede repetirse; porque creemos en la paz, en una gran alianza opositora y en
una gobierno de alta participación apoyamos al FMLN.
'El inicio de la década de los
ochenta, salvadoreños que pensábamos diferente, con proyectos políticos
distintos ante la imposibilidad de conciliar nuestras diferencias, decidimos ir
a la guerra, este fenómeno bélico, considerada la máxima violación de los
derechos humanos, baño al país de sangre y lo sumió en la mayor crisis
política, económica y social que en nuestra patria reconoce la historia, mas de
ochenta mil muertos y ciento veinte mil heridos, fue el saldo trágico de esa
confrontación, que sobrepasan con creces los muertos en el periodo de la
conquista, la colonia e incluso las guerras de independencia.
'Doce años de guerra fueron
largos siglos de espera para que el pueblo salvadoreño presenciara el fin del
conflicto armado, al respecto el secretario general de las naciones unidas,
Butros Butros Ghally, en su discurso pronunciado durante la firma de los
acuerdos de paz en chapultepec México el 12 de enero de 1992 en uno de sus
párrafos dijo lo siguiente 'la larga noche de el salvador a llegado a su fin,
los acuerdos firmados anuncian una nueva era para un país profundamente
perturbado, asolado por la violencia y los sufrimientos durante mas de diez
años. Es esta una ocasión para alegrarse, y para celebrar ya que una nación
desgarrada contempla las esperanzas de paz, y los retos de reconciliación y
reconstrucción'.
'Hoy hace doce años los
salvadoreños extendimos los brazos y el corazón para fundirlos en el torrente
de la concordia y la fraternidad, que abrió la firma de los acuerdos de paz,
entre el FMLN y el gobierno de la republica.
'El jubilo aleteo en nuestras
venas, palpitaron de felicidad nuestros corazones y fuimos personas renovadas,
y dispuestas al trabajo en donde el obrero, el campesino, el militar, el
empresario, el político, y todo el pueblo salvadoreño juntos y de consenso
pudiéramos forjar una patria nueva, en democracia en donde la solidaridad, la
tolerancia y el respeto, fueran los ejes de nuestras relaciones, una sociedad
de derecho con justicia, libertad y oportunidades para todos, una sociedad en
donde se recuperaran los valores éticos y morales perdidos durante la guerra.
'Creímos que la solidaridad y la
justicia calmarían la sed de todos los sedientos. Pero al analizar el paso de
los años se ha venido perfilando una distancia abismal entre el fuerte y el
débil, entre la riqueza y la miseria. Hoy hace doce años de esta gloriosa fecha
golpea con fuerza la pobreza pero se afirma en los foros internacionales que
vivimos en un país prospero, continúan imparables el éxodo de salvadoreños a
buscar en el norte lo que su país les niega. Se habla de avances en la salud y
continuamos un pueblo de enfermos, se presentan atractivos resultados
educativos pero la calidad no arranca, escasea el trabajo y florece la
corrupción, hablamos con libertad pero nadie nos escucha.
'Es cierto, el país a cambiado,
el conflicto termino, se han abierto espacios políticos, la institucionalidad
democrática se ha fortalecido pero como vimos anteriormente los logros
alcanzados están muy por debajo de las expectativas populares. Las causas del
conflicto aun persisten, la falta de consenso día a día somete al país a la
confrontación política y social.
'A doce años de haber suscrito
los acuerdos de paz y a sesenta y cinco días del evento electoral para elegir
al presidente de la republica, el pueblo salvadoreño se pregunta, que tanto a
madurado el pensamiento democrático en los sectores que han detentado el poder
y si la institución armada que históricamente ha sido fin a los sectores
conservadores, a modernizado lo suficiente para mantener la subordinación, a un
gobierno constituido por actores con los cuales confronto durante la década de
los ochenta.
'Para la primera interrogante no
soy al más indicado para opinar.
'Para la segunda, si estoy
plenamente convencido que la fuerza armada respetara la voluntad soberana del
pueblo.
'Para finalizar quiero este día,
ante el cristo de la paz, rendir un homenaje póstumo a todos aquellos miembros
de la fuerza armada, del FMLN y de otros sectores caídos durante la guerra, que
aun estando en bandos contrarios, con visiones de país diferente lucharon en
forma honesta, por defender sus propios ideales.
'Fenómenos como la guerra no
debemos permitir que se vuelvan a repetir, las diferencias entre hermanos así
como entre países deben de resolverse en forma civilizada tal como decidimos
hacerlo los salvadoreños cuando firmamos los acuerdos de paz.
'No podemos cambiar el pasado
pero si construir el futuro. Muchas gracias'.