Zapatero anuncia la retirada inmediata de las tropas españolas en Irak haciendo "honor a la palabra dada"
Europa Press
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció hoy, su primera gran decisión en el cargo, apenas unas horas después de que todo su Ejecutivo haya tomado posesión de su cargo. Esta decisión no es otra que la retirada en el menor tiempo posible de las tropas españolas destinadas en Irak, cumpliendo así la promesa realizada durante la campaña electoral. Rodríguez Zapatero no ha querido esperar más para "hacer honor al palabra dada" para así demostrar a los ciudadanos españoles que el Gobierno "no quiere, no puede y no va a actuar ni en contra de ni de espaldas" a su voluntad.
El jefe del Ejecutivo ya ha informado de su decisión al secretario general del PP, Mariano Rajoy, y ha solicitado su comparecencia en el Congreso de los Diputados para dar cuenta de la misma a todos los grupos parlamentarios.
Rodríguez Zapatero leyó una declaración institucional y no aceptó preguntas. Lo hizo ante la bandera española y en presencia de su vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, y su ministro de Defensa, José Bono. Con un retraso de algo más de media hora con respecto a la hora a la que anunció su declaración, el presidente del Gobierno anunció que ha ordenado a Bono que disponga "todo lo necesario" para que las tropas españoles destinadas en Irak regresen a nuestro país "en el menor tiempo y con la mayor seguridad posibles".
El jefe del Ejecutivo recordó que el pasado mes de febrero se comprometió a que ordenaría el regreso de las tropas españolas en el país árabe si la ONU no se hacía cargo de la situación, política y militarmente. Según explicó, con la información que ha recabado el nuevo Gobierno desde que el PSOE ganó las elecciones generales el pasado 14 de marzo, incluyendo la reunión que él mismo mantuvo con el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, con motivo de su visita a Madrid para asistir a los funerales por las víctimas del 11-M, no parece "previsible" una resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que recoja las condiciones planteadas por el nuevo Gobierno español.
Rodríguez Zapatero hizo alusión expresa a las reuniones que ha mantenido el ministro de Defensa en las últimas fechas y a las declaraciones públicas de dirigentes implicados en el conflicto, seguramente en referencia a la reciente reunión entre el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, y el primer ministro británico, Tony Blair, y que no han permitido atisbar "indicios que permitan prever una variación sustancial en la situación política y militar existente en Irak en los plazos previstos". Por eso, insistió Rodríguez Zapatero, no se esperara a la fecha límite anunciada del 30 de junio y el contingente español volverá a nuestro país con la mayor brevedad posible.
El jefe del Ejecutivo explicó que esta decisión, anunciada por sorpresa en la misma jornada en la que sus ministros tomaron posesión de sus cargos, responde a su voluntad "de hacer honor a la palabra dada" a los españoles. "El Gobierno no quiere, no puede y no va a actuar ni en contra ni de espaldas a la voluntad de los españoles", dijo, puesto que esa es "su principal obligación y su principal compromiso".
LUCHARÁ CONTRA EL TERRORISMO Y POR IRAK
La retirada de las tropas, añadió, no significa en modo alguno que España renuncie a contribuir en la lucha contra el terrorismo internacional, pero advirtió que esa ayuda se hará "desde el respeto a la legalidad internacional". El Gobierno español, dijo Rodríguez Zapatero, seguirá apoyando la democratización y reconstrucción de Irak, y para ello promoverá en el seno de Naciones Unidas y de la Unión Europea todas las actuaciones que sean necesarias, para garantizar a los iraquíes "un futuro de paz, independencia y seguridad".
Rodríguez Zapatero también garantizó que España seguirá siendo aliada de sus socios y cumplirá todos los compromisos internacional existentes, en especial los relativos a misiones de paz y seguridad.
El presidente del Gobierno no escatimó elogios hacia las fuerzas armadas, a las que agradeció en nombre de todos los españoles su profesionalidad, disciplina, humanidad y entrega en ayuda a la población civil iraquí. La Brigada 'Plus Ultra', ante la compleja situación que se vive últimamente en Irak, ha centrado sus esfuerzos en repeler ataques más que en contribuir a la misión humanitaria que le encargó el anterior Gobierno.
A partir de ahora será el ministro de Defensa quien comunique a los medios de comunicación y a la opinión pública el modo en el que se producirá este regreso. Rodríguez Zapatero comunicó previamente su decisión al líder de la oposición, Mariano Rajoy, y como también había garantizado, comparecerá en el Congreso de los Diputados para dar cuenta a los grupos parlamentarios de "las razones y el alcance de esta decisión".
COMPROMISO DE LA INVESTIDURA
La retirada de las tropas de Irak fue uno de los principales compromisos de Rodríguez Zapatero durante la campaña electoral. Lo reiteró durante el debate de investidura, aunque algunos quisieron ver en su primera intervención (en la que únicamente dijo que su compromiso era bien conocido) un intento de conseguir de la ONU una resolución que le permitiera mantener las tropas sin incumplir su promesa. En su réplica al coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, a última hora de la noche de la primera jornada del debate, confirmó su compromiso de retirar a las tropas si no había un mandato claro de la ONU.
La primera reunión que mantuvo Rodríguez Zapatero con José María Aznar tras su victoria electoral del 14-M derivó en una polémica sobre estas tropas. El ya ex presidente del Gobierno le exigió que plasmara su postura sobre el relevo de estas tropas, que debía culminarse la próxima semana, e incluso paralizó el envío de los primeros soldados. Rodríguez Zapatero exigió entonces a Aznar que garantizar el derecho de los soldados en Irak a ser reemplazados.
Esta declaración institucional ha sido el primer contacto que Rodríguez Zapatero ha mantenido con los medios de comunicación después de prometer su cargo como presidente del Gobierno. El jefe del Ejecutivo ni siquiera ha querido esperar a su primer Consejo de Ministros, que tendrá lugar este lunes, para anunciar esta decisión, que le mantuvo en permanente conflicto con el Gobierno popular desde hace un año.