(editorial de Radio "Città Aperta", Italia)

Esta mañana Madrid fue sacudida por cuatro explosiones che destruyeron tres trenes ocupados por viajeros que se dirigian a las ecuelas, universidades y lugares de trabajo Mientras les estamos escribiendo las autoridades españolas hablan de màs de 140 muertos y varios centenares de heridos: todos inicentes golpeados por una violencia ciega, barnara, injustificables.

Dicho esto, seria muy fàcil,por cada uno de nosotros, unirsi al coro de condenas que desde horas pone de acuerdo partidos polìticos españoles de centro derecha y cebntro izquierda, Naciones Unidas, Otan, EEUU, el gobierno Berlusconi y el Pontintificio. Un coro que, a pocos minutos de los atentados que redujeron el caos una de las metròpolis màs grande de Europa, ya ha individuado como responsables de los ataques a los independientes Vascos del ETA. Apenas despues de trenta minutos de las explosiones, las agencias de prensa del Estado Español eran ya en grado de comnfirmar, con precisiòn milimètrica, que los atentados de Madrid fue provocada pos la explosiòn simultànea de explosivos puestos en tres trenes distintos y en los andenes de las estaciones, explosivos accionados pore control remoto y escondidos en el interior de sobres de plàsticos ( Con la seguridad que se recostruyeron los hechos esta mañana es màs que sospechosas.
No solo la organizaciòn armada no ha ni declarado anticipadamente los atentados ni lo han reivindicado esta mañana, tambien las organizaciones polìticas por la independencia Vasca han desmentido con fuerza las responsabilidades de la organizaciòn guerrillera Vasca en la tragedia de Madrid.
Nunca la organizaciòn armada que defiende la independencia del Pais Vasco ha golpeado en el montòn; sus acciones fueron siempre anunciadas con llamadas telefònicas anònimas que informaban su hora y lugar exacto de los atentados, para poder permitir la evacuaciòn. El el caso del Supermercado Hipercor de Barcelona, donde un atentado provocò la muerte de 21 personas por la negaciòn del director del centro comercial de hacer evacuar el local, la Organizaciòn armada Vasca hizo una dura autocrìtica respecto a la propia estratègia,.
Al contrario, quien poso esas bombas en Madrid buscaba el màximo posible de muertos y heridos, ua esopectacularidad que, a tres dìas de las elecciones legislativas del Estado Español, entregan al Partido Popular de Aznar e y de su delfìn Rajoy un poder absoluto sin rivales en un paìs donde la opiniòn pùblica es desda hace años es incitada e instigada no tanto contra ETA sino contra todo lo que tenga que hacer con el Paìs Vasco.
La sensaciòn de estar otra vez delante un nuevo incendio del Reichstag que justificò la toma del poder Nazista es muy fuerte, asi tambien como aquella de asistir a una reediciòn, en salsa española, que aquella estrategia de la tensiòn que permitiò al establishen italiano de quedarse en el poder delante un evidente crecer de movimientos polìticos y sociales progresistes y revolucionarios acusados màs veces de querer subvertir el orden constituido utilizando bombas y atentados.
La crònica primero y la historia despues revelaron que los mandantes de las matanzas en las estacione y en los trenes fueron justamente los que, en nombre a la lucha al terrorismo, enviaron en las càrceles a millares de jòvenes militanters de los movimientos sociales.
Desde hoy la misma incolumnidad fìsica de cada ciudadano estarà a riesgos delante una campaña de odio que sea la derecha o la izquierda nacionalista española desataràn a uso y cosumo para las elecciones del domingo pròximo.
Si el 11 de septiembre del 2001 permitiò al gobierno de Bush de hacer todo lo que hizo, què nos tendremos que esperar del pròximo gobierno español despues del 11 de marzo del 2004?