Danny García
Cubadebate

La estrecha relación carnal del presidente del gobierno español, José Maria Aznar, con el mandatario norteamericano, George Bush, ha llegado a tal extremo, que el jefe del ejecutivo de Madrid no ha reparado en criticar a Europa, su continente, para defender al actual inquilino de la Casa Blanca.

Aznar aseguró en Washington, sin respeto alguno por sus compatriotas españoles y europeos, que la antipatía del Viejo Continente por Bush y Estados Unidos está causada por la envidia hacia la única potencia mundial y hacia Bush, de quien dijo es "una combinación de republicano, emperador, tejano y franco".

Pero el hasta hace poco líder del oficialista Partido Popular español fue más lejos aún, al agregar que muchos europeos no pueden digerir a Bush y son alérgicos a la mezcla que es el jefe de la administración norteamericana.

En su ya reiterado empeño de convertirse en una figura de estatura mundial, Aznar subrayó además que España ha tenido que afrontar frecuentemente en solitario en este continente la lucha contra el terrorismo.

El presidente del gobierno español cerró en las últimas horas otra visita a Washington para despedirse oficialmente de Bush, antes de abandonar La Moncloa, luego de las elecciones generales de marzo venidero aquí.

Desesperado por ver nuevamente a su amigo predilecto, Aznar viajó a Estados Unidos incluso antes de que el ocupante de la Casa Blanca concluyera su estancia en Monterrey, México, en donde asistió a la frustrada Cumbre de las Americas.

Después de llantos y pucheros en esta capital, cuando en un acto publicó inició sus despedidas oficiales, el todavía máximo representante de La Moncloa se dirigió raudo y veloz a Washington, al parecer también para consolar a Bush, tras este ultimo no conseguir en Monterrey sus propósitos de dominar aún más a Latinoamérica, con su conocida iniciativa del Área del Libre Comercio de las Americas (ALCA).

La mayoría de los medios de prensa españoles se hicieron eco este viernes de las declaraciones antieuropeas de Aznar en Washington, mientras que en círculos periodísticos y políticos en Madrid no son pocos los comentarios referidos a que el presidente del gobierno rompió definitivamente los termómetros que miden los vínculos carnales.

En los mismos círculos se asegura que Aznar está garantizando un empleo futuro de relevancia internacional avalado por Bush, aunque difícilmente será en Europa, luego de sus ataques a la región donde nació y vive, coinciden las fuentes.