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Argentina: La lucha continúa

MILITARIZACION DE LA SEGURIDAD

por DILITIO
Indymedia.org

AVANZA EL GOLPE INSTITUCIONAL DE LA DERECHA
Tal como estaba previsto por el COMANDO SUR DEL EJERCITO DE LOS ESTADOS UNIDOS, y como se venía ensayando desde los operativos conjuntos con las fuerzas armadas argentinas, "CABAÑAS II (2001)", ha llegado el momento de militarizar el conflicto social.

Los objetivos de estos ejercicios del operativo Cabañas II fueron abiertamente anti-insurgentes. Tienden al control de la población interna y no a conflictos exteriores.

Fue el entrenamiento de las Fuerzas Armadas de la región, en un campo de batalla compuesto por CIVILES, ORGANIZACIONES NO GUBERNAMENTALES Y "AGRESORES POTENCIALES"-

Como lo venían reclamando el gobernador de Neuquén, Jorge Sobisch, el ex legislador menemista Miguel Toma y el columnista Mariano Grondona, los hombres del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea serán los "especialistas" que faltan para restablecer la seguridad interior.

Finalmente, las Fuerzas Armadas "colaboraran con la seguridad en la Provincia de Buenos aires"

Lo anunció esta tarde (ayer) el ministro de Defensa. Precisó que darán una "apoyatura técnica y logística" a la Policía Bonaerense. Pero no intervendrán en operativos contra el delito. (Clarín.com.ar, 12/4

En otra apuesta del Gobierno por intentar solucionar la "ola de inseguridad" en la provincia de Buenos Aires, el ministro de Defensa, José Pampuro, anunció esta tarde que las Fuerzas Armadas entregarán "una apoyatura técnica" a la Policía. Además, ofreció el respaldo del Ejecutivo al nuevo ministro de Seguridad bonaerense, León Arslanián

BLUMBERG: ¿DELITO O CRIMEN ESTRATÉGICO?

El caso Blumberg, es la excusa perfecta que estaban esperando. Como si hubiera sido premeditado.

Con toda la operativa, logística, inteligencia, "zonas liberadas" y participación policial necesaria; con la complicidad de la policía con el sistema político; con la subordinación del sistema político argentino a los Estados Unidos.

Con el entrenamiento y supervisión de las fuerzas armadas y de seguridad argentinas por parte de los Estados Unidos.

Con todo el brote de sectores ultra-reaccionarios de la derecha recalcitrante pidiendo hasta un general comandando la bonaerense

¿Se puede hablar de un crimen estratégico?

¿Se puede hablar de un cadáver emblemático, que justifique la firma de un nuevo decreto de aniquilación, como en 1975, pero esta vez de los sectores marginales y empobrecidos, con la excusa de la seguridad?

"El jefe de la cartera de Defensa precisó que el apoyo de la Nación al plan de Seguridad que anunciará mañana Arslanián cuando asuma formalmente en el cargo "se hará dentro de lo que marca la Ley de Defensa, que impide a las Fuerzas Armadas intervenir en el combate contra el delito".

Sin embargo, Pampuro adelantó que firmará con Arslanián convenios de cooperación "para darle apoyatura técnica y colaboración permanente en diferentes áreas".

O sea, que entre otras cosas, Inteligencia militar sobre amplios sectores de la población empobrecida y excluída, como ya vienen haciendo gendarmería y prefectura en los barrios humildes.

Pero eso no es todo:

El funcionario agregó que evaluará además con el ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Beliz, la posibilidad de que el Ejército custodie puestos fijos que actualmente están a cargo de Gendarmería y Prefectura "para que estos efectivos colaboren en la lucha contra el delito en el conurbano provincial".

Pampuro dijo además que evaluó con Arslanián la posibilidad de que las Fuerzas Armadas cedan algún edificio que poseen en la provincia de Buenos Aires para que el Gobierno la transforme en cárceles.

¿Donde será "algún edificio"? ¿En Campo de Mayo?
¿Vuelven los CAMPOS DE CONCENTRACIÓN?

Coincidentemente, el 24 de marzo pasado el jefe del Comando Sur del Ejército de los Estados Unidos, James Hill, avanzó, a modo de presión a la Argentina.

Hill dijo que la amenaza que plantean bandas criminales cada vez "más sofisticadas" obligan a los dirigentes latinoamericanos a resolver esta cuestión de jurisdicciones para promover la colaboración entre sus fuerzas policiales y militares, al mismo tiempo que reestructuran sus fuerzas de seguridad provinciales, incluyendo "contratistas privados" –seguridad privada- como en Colombia, si es posible.

León Arslanián dice: "que en el primer cordón del conurbano bonaerense se encuentran los principales problemas de seguridad por la marginalidad y la exclusión social en la que viven muchas personas. En ese sentido, la policía es incapaz de asumir por si sola el control de la sociedad". Grandes coincidencias con el discurso del jefe del Comando Sur de EEUU.

La pregunta es: ¿Y los grandes crímenes, las grandes redes de corrupción; la implicancia de los cuadros de la bonaerense y la dirigencia política punteril del conurbano?

Si a esta altura no quieren reconocer que las fuerzas de seguridad están totalmente corrompidas de lo institucional; ¿las están preservando para la reaparición de las "fuerzas de tareas" combinadas con las fuerzas armadas?