Argentina: La lucha continúa
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"Estilo K": un gobierno a la medida de las petroleras (Parte 1)
Por Marcelo García
La Fogata
Integrante del programa radial "El cielo por asalto" de Comodoro
Rivadavia e investigador del Centro Regional de Estudios Económicos de
la Patagonia Central. Mail: subrodo25@hotmail.com
Con la conclusión del carnaval los murgueros se sacaron las mascaritas,
pero al presidente Néstor Kirchner se le cayó la careta con la
que ocultaba su defensa a ultranza de las multinacionales petroleras. El "estilo
K" no es ni mas ni menos que el de garantizarle a las empresas hidrocarburíferas
abultadas ganancias, liberándole la liquidación en el del 70%
de las exportaciones; responder a todos sus pedidos de aumentos tarifarios;
favorecerlas al no hablar de ellas en la revisión de los contratos de
las privatizadas y posibilitarle la explotación indiscriminada los recursos
naturales.
Lentamente las máscaras se van cayendo. Aunque todavía hoy el
canto de las sirenas sigue obnubilando a un pueblo al que le cuesta salir del
encanto, aunque cada vez queda más claro hacía dónde apunta
el gobierno de Néstor Kirchner. El "estilo K" no es más que el
de la defensa de los capitales petroleros multinacionales, quienes surgen como
los mayores beneficiados de una administración que parece plantarse como
administradora de los explotadores del oro negro.
El último dato que trasunta esta relación "carnal" entre Kirchner
las petroleras es el reciente aumento en el gas y la electricidad, aunque es
solamente la punta de un iceberg que permanece oculto para el conjunto del pueblo.
Pero a esta situación se le deben sumar los magníficos beneficios
obtenidos por las petroleras al no tener que liquidar en el mercado interno
el 70% de los dividendos conseguidos por exportación.
Por mas que el gobierno se desgañite intentando argumentar que los incrementos
no afectarán a los sectores de menores recursos, nadie puede asegurar
que los incrementos en el gas y la electricidad no repercutirán en los
consumidores y ya se está hablando de trasladar los aumentos a los precios.
Las variaciones en los valores del gas en boca de pozo eran unos de los reclamos
más insistentes de las multinacionales del sector, los que se escucharon
nuevamente en el último viaje de Kirchner a España. [1]
Tras reunirse con el titular de Repsol-YPF, Alfonso Cortina, y con los reyes
de España, a una semana del regreso el gobierno anunció los incrementos
tarifarios que fueron recibidos con bombos y platillos por aquellos que hasta
amenazaron con reducir las inversiones o con irse del país.
El aumento en el precio del Gas Natural Comprimido se convierte en uno de los
pocos rubros faltantes donde las compañías petroleras anhelaban
una suba. Luego que se dispararan los valores en el 2002 de las naftas y el
gasoil, muchos transportistas (transportes livianos, fletes, taxis y remises)
y automovilistas particulares se volcaron al GNC producto de su bajo costo.
Ahora ellos también sentirán el peso de las petroleras sobre sus
espaldas, esas mismas empresas que cuentan con la anuencia de los gobiernos
para subir los valores de los combustibles cuando se eleva el precio internacional
del petróleo o del dólar, pero que no los bajan cuando alguna
de estas variables retroceden. [2]
Otro elemento vital a tener en cuenta es la inexistente presión a las
multinacionales para que inviertan en, así se les ha posibilitado extraer
grandes cantidades de petróleo crudo, sin que se efectúen nuevos
descubrimientos de reservas, que luego es vendido a un alto precio internacional
mientras que su costo de extracción es verdaderamente bajo y no superaría
la franja de los 4 o 7 dólares (Ver "La pérdida de recursos naturales
estratégicos y el camino a la tumba").
El privatizador
Los grandes discursos altisonantes esbozados por Kirchner contra las privatizadas
desentona profundamente con la situación que se viene dando en el ámbito
hidrocarburífero. Tras haber planteado "revisiones" de los contratos
de las prestatarias de los servicios públicos, de jugar al gato y al
ratón con los concesionarios del Correo Argentino, en el rubro del petróleo
y el gas no hizo absolutamente nada, ni siquiera parece tratarse de un sector
privatizado y todo hace pensar que nada bueno sucederá.
Uno de los pocos hechos concretos que se asomaba como interesante en la relación
del Estado con las privatizadas fue la contratación de los investigadores
de FLACSO para la elaboración de un proyecto marco para la renegociación
con las empresas entregadas a capitales privados. Esto se convirtió en
un nuevo fiasco al "estilo K" ya que fuentes confiables confirmaron que en realidad
todo pareció ser una pantalla para blanquear un proyecto ya existente
en las huestes gubernamentales. Como si fuera poco cuando los miembros de FLACSO
recibieron la devolución anteproyecto corregido por los funcionarios
públicos se encontraron con la eliminación de todo el capítulo
dedicado al sector petrolero.
En realidad Kirchner no hace más que mantener la concepción menemista
de los recursos naturales como bienes transables comercialmente (commoditys)
y lejos está de considerarlos bienes estratégicos para el Estado
y pueblo argentino, ni que hablar de intentar avanzar en la creación
de una compañía petrolera latinoamericana (incluyendo entre otros
a Venezuela, Brasil, Ecuador y Argentina) tal como lo planteó el presidente
venezolano Hugo Chávez.
Lejos ha quedado aquella falacia de campaña cuando Kirchner prometía:
"El candidato presidencial por el justicialismo Néstor Kirchner insistió
ayer en su discurso estatizador, y se pronunció a favor de la creación
de una empresa petrolera estatal que actúe ‘como testigo en cuanto a
los precios’. El gobernador de Santa Cruz explicó que ‘más que
una empresa de producción puede ser una empresa testigo en cuanto a los
precios, y que pueda intervenir en la comercialización". [3]
Para el integrante del Grupo MoRENO, Gustavo Calleja [4], la política
de la actual administración es mas que clara. "La presencia de los máximos
ejecutivos de Repsol-YPF y de Petrobras en los actos protocolares de toma del
poder por las nuevas autoridades y su ingreso irrestricto y privilegiado al
despacho presidencial, no son ajenos a la reciente firma del Decreto 456 –cesión
a las Provincias de la áreas no explotadas- ni a las manifestaciones
presidenciales que, tergiversando claras disposiciones constitucionales e invocando
un falso y exacerbado federalismo, aboga por la sanción de una nueva
Ley de Hidrocarburos", enfatizó.
El rol jugado por Kirchner es la continuación de la política transicional
establecida por el ex presidente, Eduardo Duhalde, quien tomó un Estado
en llamas, quebrado y con un pueblo encaminado hacia una revolución insurreccional.
En medio de una bisagra histórica y mientras el pueblo reclamaba en las
calles cambios categóricos y "que se vayan todos", fue justamente Duhalde
el que bendijo a las petroleras desde su corta gestión y de esa manera
entrelazó las políticas pro multinacionales de la última
década.
Para comprender parte de lo que hoy está aconteciendo entre el Presidente
y las compañías petroleras extranjeras hay retrotraerse hasta
principios de la década del ’90 cuando el entonces gobernador de Santa
Cruz (Néstor Kirchner) fue uno de los grandes promotores del proceso
privatista y se convirtió en una pieza clave de la entrega de Yacimiento
Petrolíferos Fiscales (YPF). Su impronta privatista también se
reflejó en la entrega a manos privadas el yacimiento de carbón
de Río Turbio el que finalmente debió ser reestatizado luego de
grandes negociados y de el casi desguace de la empresa que puesta en marcha
en la década del ’40.
El 24 de septiembre de 1992 el Congreso de la Nación sancionó
la ley 24.145 que privatizó la primera petrolera estatal conocida en
América Latina, pero para conseguirlo hizo falta la presencia de un diputado
nacional proveniente de Santa Cruz. Según Calleja el ex diputado radical
Raúl Baglini comentó que el entonces legislador justicialista
Rafael Flores se encontraba en su provincia natal convaleciente y con su pierna
enyesada, pero el gobernador Kirchner puso a su disposición el avión
de la Gobernación para que pudiese llegar a la sesión, se lograra
el quórum –se comenta que sentándose en una banca y haciendo lo
propio con el yeso en la banca vecina, marcando una doble presencia- y se sancionara
una de las más nefastas leyes que finalizó con la YPF estatal.
Tras esto el ex gobernador santacruceño embolsó en las arcas provinciales
una millonaria suma (más de 500 millones de dólares) por el pago
de las regalías mal liquidadas por el Estado Nacional, la que sutilmente
depositó en cuentas bancarias del extranjero y así evitó
al "corralito" bancario del 2001. Además, esos ingresos le permitieron
establecer una especie de feudo provincial donde generó una alta dependencia
del empleo público y por consiguiente un fuerte clientelismo político.
Ganancias exportables
Otro de los elementos que expone con contundencia quiénes son los grandes
beneficiados del modelo político-económico imperante en la actualidad,
son las abultadas ganancias que han obtenido desde la devaluación los
sectores exportadores y en particular las petroleras. Además, respecto
de último rubro hay que sumarle los beneficios otorgados por las administraciones
de Duhalde y Kirchner para poder llevarse al exterior el 70% de los dividendos
obtenidos en concepto de exportaciones.
La administración transicional de Duhalde introdujo, en enero de 2002,
las retenciones a las exportaciones a través de la Ley 25.561 que: gravó
las exportaciones de hidrocarburos y sus derivados; anuló la indexación
de tarifas en base a índices de Estados Unidos y las pesificó;
dispuso la revisión total de los contratos derivados de las privatizaciones;
entre otros temas.
Tras la puesta en marcha de las retenciones a las exportaciones, los gobernadores
de las provincias productoras de petróleo y gas comenzaron a montar un
operativo opositor al que sumaron a los sindicalistas que terminaron protagonizando
un hecho casi inédito en la historia del movimiento obrero. Las grandes
operadoras multinacionales incentivaron la protesta contra la determinación
del Gobierno nacional, argumentando que la medida generaría reducción
de inversiones y una oleada de despidos de trabajadores. Así se coordinaron
movilizaciones en varios puntos del país.
Uno de los actos, con corte de ruta incluido, lo protagonizaron empresarios,
sindicalistas, trabajadores y hasta funcionarios políticos de las ciudades
del sur de Chubut y la zona norte de la provincia de Santa Cruz, en la denominada
Cuenca del Golfo San Jorge. Los empresarios tuvieron como orador piquetero al
gerente de operaciones de Repsol-YPF en la Cuenca y fue éste el que dio
la pauta de la verdadera intencionalidad del piquete. Los dirigentes del Sindicato
de Petroleros Privados de Chubut cumplieron un rol fundamental en la movilización
de los obreros para que defendieran los intereses de quienes los explotan y
los amenazaban con transformarlos en desocupados.
Retomando la cuestión de las retenciones a las exportaciones, el especialista
en temáticas petroleras y miembro del MoRENO, Félix Herrero, explicó:
"en el caso de la actual devaluación, si el dólar se mantuviera
a 3 pesos (con una revaluación del dólar del 200% y una devaluación
de nuestro peso del 66%) y si se quisiera hacer una retención similar
a la de 1967, la retención actual a los hidrocarburos debería
haber alcanzado al 40%. Por ello es que varios analistas consideraron durante
el mes de enero pasado que la retención establecida en la reglamentación
de la Ley de Emergencia resultaba exigua". [5]
Para Herrero, el lobby petrolero ha conseguido imponer su voluntad a partir
de las legislaciones menemistas, aliancistas, duhaldistas y kirchneristas, lograron
hacer realidad un sueño: bajas retenciones a las exportaciones y al mismo
tiempo rebajas en los impuestos de transferencia a los combustibles.
Buena parte de los excelentes resultados financieros obtenidos por las petroleras
en los últimos años están relacionados a las exportaciones,
rubro donde la devaluación las ha favorecido de manera más que
notoria. Tal como puede apreciarse en el cuadro, tras la ruptura de la Convertibilidad
los valores exportados en conceptos de hidrocarburos se vieron ampliamente favorecidos.
Exportaciones en pesos del sector hidrocarburífero
Fuente: Elaboración propia en base al Sistema SESCO de la Secretaría
de Energía de la Nación.
La bondad con que ha tratado la devaluación al sector hidrocarburífero
exportador se puede ver reflejado al comparar los valores en pesos con los volúmenes
en metros cúbicos enviados al exterior. Así se constató
que mientras en el 2000 la totalidad de hidrocarburos era de 4,6 mil millones
de metros cúbicos de hidrocarburos en general, en el 2001 aumentaron
a 6,2 mil millones y en el 2003 treparon a 6,4 mil millones. Una situación
diametralmente opuesta a la relacionada con los valores en pesos.
Volumen de exportaciones en metros cúbicos
del sector hidrocarburífero
2000 2001 2002 2003 |
Hidrocarburos 4.668.263.489 6.204.153.678 5.869.515.601 6.481.753.896 |
Petróleo 16.099.798 16.685.616 15.460.848 13.335.675 |
Gas 4.646.921.691 6.180.275.115 5.846.336.570 6.460.531.300 |
Fuente: Elaboración propia en base al Sistema SESCO de
la Secretaría de Energía de la Nación.
En el caso del petróleo de pudo verificar una realidad similar, aunque
no se puede dejar de mencionar que las petroleras no solamente se vieron beneficiadas
con la devaluación sino también con el incremento que valor del
precio internacional del crudo que pasó de 30,31 dólares el barril
a 31,05 en el 2003, habiendo descendido a 25,91 en el 2001 y a 26,10 en el 2002.
No se puede dejar de mencionar que el costo de elaboración de un barril
de crudo en la Argentina se estima que ronda entre los 4 y los 7 dólares.
Finalmente, en el apartado correspondiente al gas las exportaciones han crecido
en forma pronunciada pasando de 4,6 mil millones metros cúbicos en el
2000 a casi 6,5 mil millones de metros cúbicos en el 2003, lo que ha
representado un incremento del 39 por ciento.
Notas:
[1] El diario Clarín en su edición del 29 de enero de 2004
publicó: "Se conocen de antaño (Kirchner y Cortina) y los sacudones
de la crisis con Kirchner convertido en Presidente los hicieron verse asiduamente.
Repsol es la empresa más grande de la Argentina por facturación
y por liderar las exportaciones. Y es la mayor pagadora de impuestos...
Aunque no lo admitió públicamente (Cortinas) también
llevó el reclamo para acercar el valor del precio del gas en boca
de pozo, de los US$ 0,60 por millón de BTU a US$ 1,50, que domina
en el escenario internacional, según reveló un testigo del encuentro...
Al salir de la residencia del embajador argentino, Cortina fue escueto en las
declaraciones. Negó que hubiera hablado de tarifas ya que no son distribuidores,
y comentó que habían discutido con el Presidente ‘la posibilidad
de incrementar las reservas de gas de cara al futuro’".
[2] Un estudio del Centro Regional de Estudios Económicos de la Patagonia
Central (www.creepace.com.ar)
analiza, durante el lapso 2001-2002, el aumento de los combustibles en Comodoro
Rivadavia y el resto de la Patagonia respecto de las fluctuaciones que tuvieron
durante el mismo período el precio del petróleo crudo internacional
(WTI) y el dólar estadounidense.
[3] Tomado del resumen informativo Pregón Energético 445 del 12
de febrero de 2003, citando al diario BAE.
[4] Gustavo Adolfo Calleja forma parte junto a Félix Herrero, Pino Solanas
y otros del denominado Movimiento por la Recuperación de la Energía
Nacional Orientadora (MoRENO), y además estuvo a cargo de la Subsecretaría
de Combustibles durante el gobierno de Raúl Alfonsín.
[5] Nota publicada en junio del 2002 en la revista Línea bajo
el nombre "Los monopolios petroleros se han impuesto".