18 de diciembre del 2002
La tragedia Palestina: capitalistas, colonos y psicópatas
Sergio Yahni
The Alternative Information Center
El invierno llego a palestina. Y con el llegaron las lluvias, el frío
que entra los huesos, las flores que fueron quemadas por el sol del verano y
la ocupación de la ciudad de Belen. El ejército de Israel continúa
con su política de ejecuciones sumarias, y ejecuciones por otros métodos.
Abu Dis es una aldea palestina en los suburbios de Jerusalem. La mayor parte
de su población presisa de Jerusalen para subsistir, ya sea para salir
a trabajar, ya sea para llegar al hospital, o para comprar alimentos. Pero el
ejército de Israel ha decidido eregir una muralla medieval protegida
con el más moderno armamento alrededor de Abu Dis. Condenando así
a muerte a su comunidad: aquel que se quede a vivir en Abu Dis, no puede salir
a trabajar, no puede llegar al hospital y no puede aprovisionarse de alimentos.
Es mas, aquel que se quede a vivir en Abu Dis no puede salir de su casa porque
ya que varios meses la aldea esta bajo toque de queda. Para vivir, la gente
de Abu Dis tiene que irse. Quedarse a vivir en Abu Dis, puede ser también
una condena a muerte. Ya que la ciudad esta bajo toque de queda permanente,
las ambulancias no pueden entrar, y no pueden llevar a enfermos y ansianos al
hospital que así están condenados a morir por falta de tratamiento
médico.
Estas muertes, son también parte de las ejecuciones sumarias del pueblo
palestino, que se ha transformado en rehén de la represión israelí:
si continúa la lucha de liberación, no hay tratamiento médico,
no hay abastecimiento de alimentos, no hay escuelas y no hay universidades.
Para poder conseguir tratamientos médico, abastecimientos, escuelas y
universidades, los palestinos tienen que dejar de lado su sueño de libertad.
Asi podrán tener escuelas que enseñen todo y universidades que
estudien la tecnología de vivir humillados.
¿Qué otra cosa puede enseñar la escuela de quién ya no
tiene sueños de libertad? ¿Qué otra tecnología se puede
estudiar en una universidad humillada?
La vida de lo palestinos se ha transformado en un ejecución sumaria colectiva,
donde los comandos israelíes apuntan a las mismas razones de vivir, y
los palestinos se han transformado en muertos que caminan. Por eso, tantos jóvenes
han elegido el camino del suicidio como arma política, llevando una bomba
en su cuerpo.
Me dan miedo las bombas, mucho miedo. Todos los días tengo que tomar
un omnibus y temo que explote. Escucho una falla en el motor y supongo que ahí
está, ahora explota. Estas bombas me parecen injustas ya que sus víctimas
no son los generales que han condenado a muerte a tres millones de palestinos,
ni los políticos corruptos que avalan la colonización, tanto los
unos como los otros tienen sus coches blindados y su chofer. Las víctimas
en los omnibuses son obreros y obreras, gente pobre que sale a trabajar para
seguir pobre, o son desempleados que salen a buscar un trabajo que nunca encontraran.
Por otro lado puedo comprender a los jóvenes palestinos que elijen el
arma del suicidio. Ellos ya han muerto, y siguen muriendo con cada control militar,
con cada humillación, con cada demolición de una casa o la destrucción
de un campo. Así, los generales y los políticos corruptos transforman
a los obreros israelíes en víctimas de sus víctimas.
La ocupación y la colonización continúan por corrupción,
es un negocio redondo. El Estado paga por cada casa construída a los
contratadores y los últimos se encargan de comprarles votos en las internas
del partido. En las internas del Likud, el partido gobernante, que se hicieron
la semana pasada, cada voto costo !500 dólares! pero, eso sí también
hubieron "descuentos" para candidatos nuevos que pudieron comprar votos a precio
de 250 dólares cada uno.
Las construcción de las colonias no es el único negocio en la
Cisjordania, ahora lo es también la construcción de las murallas
alrededor de los centros de poblacion palestina. Millones de dólares
invierte el Estado en estas murallas que estrangulan a la población,
que crean nuevos suicidas desesperados. Así que los constructores estan
dispuestos a invertir mucho dinero en el Comité Central del Likud, ya
que este se ha transformado en una mina de oro. Mientras continée la
política de de humillación, continuarán los suicidas y
así continuará el negocio de la construcción de murallas
de defensa. Es un negocio de sangres.
Shoni Gabrieli decidió que su hija de 27 años puede y tiene que
ser diputada. Asi también lo penso el tío, Reuben Gabrieli, que
se hizo multimillonario en el negocio de los casinos en Europa, y que también
tiene dinero invertido en la construcción en las colonias. Así
que padre y tío, se pusieron en contacto con David Appel, otro constructor
multimillonario, y con la familia Alperon, que son prestamistas en el mercado
gris. La niña, Inbal, fue electa candidata en el lugar 31 de la lista
del Likud, lo que asegura que será diputada después de las elecciones.
De tal forma, que las familias Gabrieli, Appel y Alperon tendran una pariente
para cuidar de sus intereses dentro del parlamento.
La semana pasada, mientras que en el Comité Central del Likud se compraban
y se vendían votos, en la Franja de Gaza una mujer y sus tres hijos,
el mayor de 12 años, fueron asesinados en la calle mientras iban a visitar
a una tía. No había toque de queda, era legal caminar por esa
calle. El ejército declaro que los soldados dispararon al ver efectivos
armados. Otro niño, de 10 años, fue asesinado en Ramala, Cisjordania,
hace un mes, mientras iba a comprar cigarrillos para el padre bajo el toque
de queda, el niño vió los soldados, intento escaparse y estos
dispararon.
En este país donde un padre le puede comprar a su hija un lugar en el
parlamento, todos los días, otros padres ponen en peligro inmediato la
vida de sus hijos al mandarlos a la escuela en transporte público, y
los padres palestinos ponen en peligro las vidas de sus hijos solo por haberlos
dejado nacer.
En un bosque a las afueras de Jerusalem se encontró la semana pasada
el cadáver de la niña Hodaya, de dos años, asesinada por
su padre. El padre declaró durante la investigación policial que
lo hizo para hacer sufrir a la madre de la niñaa. En otro lado de la
ciudad, un dia después, en un pozo, se encontró el cadáver
de Nur. Una nina palestina, asesinada y no se sabe por quien. Quizás
no haya nada fuera de lo normal en estos asesinatos psicópatas cuando
el capital, la política y el ejército hayan decidido ejecutar
sumariamente lo que queda de la vida.
Correo de prensa de la IV Internacional