28 de noviembre del 2002
Los soldados israelíes sufren consecuencias psicológicas a raíz de la represión sobre la población palestina
El sindrome de la intifada
Argenpress
Los soldados de las fuerzas israelíes que han matado a palestinos
civiles mientras servían en la Franja Oeste y en la Franja de Gaza, están
sufriendo lo que ya se denomina como 'síndrome de la Intifada'.
Según los medios de comunicación israelíes, muchos de los
soldados que han sido relevados de cualquier servicio militar afrontan ahora
'crisis personales' derivadas de sus 'duras' experiencias en la Franja Oeste
y Gaza. Dice el diario israelí, Ma'ariv, que el alcance del fenómeno
es alarmante ya que docenas de estos soldados están buscando un refugio
a sus problemas en las drogas, incluyendo la heroína y la cocaína.
El diario, en un informe fechado el 15 de noviembre, añadía que
algunos de estos soldados habían intentado suicidarse o herirse a sí
mismos.
El rotativo citaba a un soldado diciendo que 'no sabíamos que lo que
estábamos haciendo atormentaría nuestro futuro.' 'Entrábamos
en las casas, nos enfrentábamos con los palestinos, matábamos
civiles, algunos de ellos inocentes. Tu haces el trabajo y no piensas que pueda
herirte en el futuro. Te dicen que ese es tu trabajo. Hoy en día lamento
algunas de las cosas que hice, hoy en día, permanezco en casa golpeando
mi cabeza contra la pared. No tengo trabajo y nadie me habla'.
Un antiguo paracaidista quien ha estado bajo tratamiento psicológico
durante los tres últimos meses relataba lo siguiente:
'Entrábamos en las casas. Veíamos a niños y ancianos gritar.
Disparábamos a sus aparatos de televisión. Al principio no sientes
compasión alguna, haces tu trabajo. Pero cuando te sientas más
tarde en tu casa empiezas a pensar que has hecho cosas que te han hecho daño
emocionalmente'.
El diario hebreo señalaba que muchos de los soldados angustiados por
estos hechos habían recurrido a las drogas duras.
'Un oficial de una unidad de élite, que ha luchado contra los palestinos
durante dos años, se marchó a Tailandia. Trató de escapar
de todo lo vivido en los territorios ocupados, le fue imposible y cayó
en las drogas. Regresó a Israel y se volvió adicto a drogas aún
más duras, como la cocaína. Recibió tratamiento con la
ayuda de sus padres. Unos días después lo encontraron muerto.
Hasta al momento se desconocen las causas de su muerte.'
El ejército israelí está al corriente del fenómeno,
no obstante, como ha declarado un portavoz del ejército, 'no podemos
controlar este fenómeno. No podemos tratar a cada combatiente que cae
presa de las drogas y de conflictos emocionales.'