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Latinoamérica

Uruguay presentó ayer en Ginebra, faltando 60 minutos para que venciera el plazo reglamentario, una moción de 4 puntos que, como quería EEUU, pide inspeccionar a Cuba por DDHH.

 

Nuestro país, según anunció Batlle, defenderá y argumentará en su favor ante la ONU
Uruguay cumplió con Estados Unidos y presentó la moción contra Cuba

 
Batlle, junto a su par de Costa Rica, Miguel Angel Rodríguez, saluda a escolares en un acto protocolar en la residencia presidencial en San José de Costa Rica.

REDACCION PL Y AFP
La moción uruguaya fue sostenida por los 8 países que esperan apoyo económico de Bush: Argentina, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá y Perú. Uruguay firma este viernes en Montevideo el protocolo para iniciar una negociación hacia un Tratado de Libre Comercio con EEUU. Argentina espera como tabla de salvación un crédito del FMI. Los cinco países centroamericanos recibieron la promesa de George W. Bush de un tratamiento comercial preferencial y Perú negocia actualmente un acuerdo comercial con el vecino del norte.
El presidente Jorge Batlle fue consultado en Costa Rica sobre las presiones ejercidas por EEUU. Batlle preguntó de dónde sacaban esa información. La respuesta de una periodista fue de un medio uruguayo. "¿Cuál medio?" interrogó Batlle. LA REPUBLICA, fue la respuesta. "Por supuesto, tenía que ser", fue el comentario presidencial.
El representante cubano en Ginebra calificó de "traición" la presentación de la moción y dijo que "Cuba responderá a esta maniobra".
Como ya informara LA REPUBLICA, Batlle en su último viaje a Nueva York se comprometió ante EEUU a promover una moción para asegurar que el tema Cuba fuera tratado en Ginebra.
Este año EEUU por primera vez no integra la Comisión de DDHH de la ONU y presionó durante estos dos últimos meses a los países latinoamericanos para lograr que Cuba estuviera en la agenda de discusión.
La moción de cuatro puntos no contiene una condena expresa, porque no habría sido acompañada y no tendría los votos. EEUU aceptó ese precio e incluso que se reconozcan los logros sociales de Cuba, vetó la referencia al "embargo" que sufre la isla desde hace 42 años y quedó una aun más eliptica mención a "condiciones internacionales desfavorables". También reclama que Cuba adhiera a instrumentos jurídicos interamericanos como el Pacto de DDHH pero no menciona nada sobre su participación en organismos políticos como la OEA. El punto 4 es el clave: allí se plantea una inspección internacional sobre la situación de los DDHH en Cuba. EEUU quería esto como punto central e incluso promovía la creación de un relator especial. Se tuvo que conformar con un convenio de cooperación con la alta comisionada de la ONU, Mary Robinson.
La votación en Ginebra se realizará el 16 de abril.
Los cuatro puntos y los argumentos de Batlle
Confirmando lo adelantado por LA REPUBLICA el pasado martes, el proyecto tiene 4 puntos e indica que "la Comisión de Derechos Humanos, sin perjuicio de reconocer los esfuerzos hechos por la República de Cuba en la realización de los derechos sociales de la población, pese a un entorno internacional adverso, invita al Gobierno de Cuba a realizar esfuerzos para obtener similares avances en el campo de los derechos humanos, civiles y políticos".
La moción expresa además que Cuba coopere con Mary Robinson, alto comisionada para los Derechos Humanos, para un convenio igual al que se firmó con la República Popular de China.
El embajador cubano ante las Naciones Unidas en Ginebra, Iván Mora, consideró como "una traición" la moción presentada por Uruguay. En declaraciones a periodistas sostuvo que quienes promueven y apoyan esa declaración "están sirviendo a los intereses de Estados Unidos".
"Buscamos un mecanismo para generar los cambios". De esta manera el presidente Jorge Batlle explicó ayer en San José de Costa Rica por qué el gobierno uruguayo presentó la moción.
La confirmación oficial del papel de Uruguay la dieron ayer durante una conferencia de prensa Batlle y el presidente de Costa Rica Miguel, Angel Rodríguez. Ambos mandatarios aseguraron que de esta manera ningún país presentará una moción de condena contra la isla, tal como sucedió en los últimos tres años.
"Costa Rica ha tomado la decisión de acompañar como copatrocinador la posición del Uruguay que será llevada a la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas en Ginebra", dijo Rodríguez. El mandatario reconoció que en la isla se han dado "progresos" en materia de derechos económicos, pero dijo que aún "es necesario avanzar en los derechos humanos".
A su vez, el presidente Batlle dijo: "No creemos que seamos países que tengan derecho a sanción.
No estamos actuando como jueces, únicamente buscamos un mecanismo para generar los cambios". Agregó que ese mecanismo debe salir de un organismo internacional como Naciones Unidas.
El jefe de Estado uruguayo descartó ue la propuesta haya sido acordada también por el gobierno de Argentina, tal como se había informado.
Consultado sobre la existencia de un planteamiento peruano distinto al uruguayo, Batlle señaló que según le informó el canciller Didier Opertti, este documento a nombre de Perú no sería presentado, pero "los peruanos podrían sumarse a nuestra propuesta". En este caso, "sería una sola propuesta americana", afirmó.
Independientes
En tanto, Batlle rechazó que Uruguay haya sido presionado por el gobierno norteamericano para adelantar la propuesta.
"Es falso que al Uruguay le hayan planteado, durante mi reciente reunión con el presidente (George) Bush, un tema con respecto a Cuba. Es más, yo fui el que introduje el tema de Cuba en la agenda bilateral. Lo que yo planteé fue que había que levantar el embargo", declaró Batlle, quien dijo que Bush "no dijo nada" ante ese planteo.
Recordó que Estados Unidos no puede presentar una propuesta de este tipo a su nombre pues "no forma parte de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU.
"Nosotros queremos ser independientes y lo hemos sido siempre", sostuvo Batlle. Agregó que la propuesta "únicamente ha sido conversada aquí en Costa Rica", pero "sabemos que otros gobiernos pueden participar de este planteamiento que, como nosotros lo encabezamos, somos nosotros los que tenemos que defenderlo ante la Comisión".
Tras su reunión bilateral, los presidentes Rodríguez y Batlle suscribieron una declaración conjunta en la que "manifestaron su esperanza de ver iniciada una reforma democrática en Cuba con la plena participación de ese país dentro de los mecanismos de integración política y económica hemisféricos. Asimismo, demandaron el mejoramiento de la situación de los derechos humanos en Cuba".
Ambos mandatarios rechazaron que su propuesta vaya a ser presentada en la Cumbre de Jefes de Estado y Gobierno del Grupo de Río, que comienza hoy. Sin embargo, el tema sería abordado en los diálogos "informales" de los presidentes. *