|
FINAL EN SEGUNDA VUELTA PARA LA ASAMBLEA DE LA UBA
And the winner is... Jaim Apoyado por un heterogéneo bloque opositor al shuberoffismo, Guillermo Jaim Etcheverry sumó 120 votos frente a los 57 de Aldo Ferrer y se consagró como el nuevo rector de la UBA.
Tras 16 años de mandato, ayer se selló la despedida del rector radical Oscar Shuberoff.
Por Javier Lorca
La Universidad de Buenos Aires tiene nuevo rector. Guillermo Jaim Etcheverry se impuso anoche en la asamblea universitaria, con 120 votos, uno de más de los que necesitaba para ganar en esa segunda vuelta. Detrás, por debajo de lo esperado por sus operadores, se ubicó el candidato consensuado a último momento por el radicalismo, el economista Aldo Ferrer, con 57 votos. En una agotadora jornada que culminó a la medianoche, realizada a puertas cerradas en el Colegio Nacional de Buenos Aires, la asamblea universitaria cerró así el ciclo de 16 años que monopolizó el radical Oscar Shuberoff. En la primera vuelta de votación, Jaim había obtenido 101 votos sobre 59 de Ferrer. Ahí ya quedó claro que la diferencia era inalcanzable y, cuando se largó la segunda ronda, 19 consejeros trocaron su voto y ungieron al nuevo titular del rectorado, que asumirá en mayo. Los demás votos de la asamblea se distribuyeron entre el decano de Filosofía y Letras, Félix Schuster, que sumó 21 sufragios, y el filósofo León Rozitchner, que logró 13.
Antes de la votación, Jaim Etcheverry hizo públicas por primera vez sus ideas para la UBA. "Resulta imprescindible despartidizarla, volver a hacerla pública y no presa de intereses privados como hoy", dijo, parado frente a un atril, de frente a los asambleístas presentes. Se manifestó a favor de reformar el estatuto de la universidad, institucionalizar el diálogo entre claustros, convocar a una asamblea al año como instancia de control, transformar al Ciclo Básico Común, activar la realización de concursos docentes, promover la inserción social y de transparentar y racionalizar el uso de recursos. También se pronunció contra el arancelamiento: "En este contexto del país, no haría más que agravar la situación de nuestros jóvenes", dijo. "La función social de la universidad es formar personas completas, crear ciudadanos, por eso es imprescindible garantizar el más amplio acceso en la universidad. Debemos repensar la relación con la enseñanza media, analizar la experiencia del CBC, que debe ser más básico y más común", detalló el ahora flamante rector.
Pocas horas antes, a las 18 en punto, el saliente titular de la UBA, Oscar Shuberoff, había anunciado que se abordaba el primer punto del orden del día. Hacía casi ocho horas que sesionaba la asamblea, pero todo el lapso anterior se había dilapidado en discusiones laterales sobre qué temas se debían incorporar y cómo se los debía votar. La jornada había empezado a las 10 de la mañana. De los 236 asambleístas –representantes de profesores, graduados y alumnos de la UBA–, ayer se presentaron 228. La puerta del Nacional Buenos Aires estaba decorada con una caracolesca valla plagada de policías cuya misión era impedir que se repitieran los incidentes que, hace una semana, frustraron la sesión de la asamblea. Decenas de estudiantes que quisieron ver la asamblea se reunieron sobre Bolívar al 200, en la puerta de la escuela entre cuyas escalinatas se había dispuesto dos pantallas gigantes que transmitían lo que ocurría adentro, en el aula magna.
La primera decisión que tomó la asamblea, a las 18, fue la de modificar el estatuto para impedir que los futuros rectores sean reelegidos más de una vez. La aprobación del proyecto fue por unanimidad y aclamación.
Profesor en Medicina, Mario Parisi abrió el juego y propuso como rector al ex decano de su facultad. "El doctor Jaim Etcheverry representa la ruptura posible con el clientelismo y el amiguismo y representa el mensaje que queremos transmitirle a la sociedad", disparó. El profesor Juan Azcoaga, de Psicología, redundó en elogios a Jaim. Los apoyos en el mismo sentido siguieron. En la consolidación del principal candidato fue clave la definición de tres decanos radicales que, en los últimos días, sellaron su apartamiento del bloque. "Los decanos de Arquitectura, Psicología y Ciencias Económicas creemos que Jaim Etcheverry representa la vocación académica y la estatura ética y moral necesarias para conducir la universidad", sentenció Carlos Degrossi, decano de Económicas. Así, el especialista en educación llegaba impulsado desde Medicina, Agronomía, Sociales, Veterinarias, Odontología, además de las tres casas citadas. Después, cuando giró la segunda rueda de votación, las mayorías de profesores y graduados de Ciencias Exactas, más minorías de Ingeniería, Farmacia, Sociales y Económicas cambiaban sus primeros sufragios y le subían el pulgar a Jaim Etcheverry.
La segunda candidatura de la noche fue presentada por profesor Arquitectura, Jaime Sorín. "La universidad ha estado 16 años sometida al bipartidismo y la burocracia, sus autoridades fueron cómplices de la conversión del país en una colonia de los capitales internacionales", dijo, para terminar proponiendo al filósofo León Rozitchner, que "no ha sido miembro de ningún gobierno dictatorial", agregó, en alusión a Aldo Ferrer. Luego, el vicedecano de Filosofía y Letras, Hugo Trinchero, se encargó de presentar otra candidatura de izquierda, la de su decano, Félix Schuster. "Nuestro pueblo espera que la UBA le ofrezca su palabra después de un largo período que ha erosionado las bases de su función social y se ha transformado en una institución sometida a las prebendas", argumentó y enfatizó la necesidad de "realizar un trabajo interclaustros". "De ganar, el nuevo candidato del oficialismo, Ferrer, se verá obligado a hacer un pacto de impunidad hacia atrás –aseguró Guillermo Durán, consejero por los graduados, al apoyar a Schuster–. Y a Jaim le digo: cuidado con sus supuestos operadores, que son representantes de la política que queremos desterrar." Más tarde, alumnos independientes postularon a Axel Kiciloff, creador de la agrupación TNT, como rector para comandar un período de transición. Pero no logró ningún voto.
Para el final quedó la presentación del candidato acordado a último momento por el radicalismo universitario. "La mayoría de los profesores, graduados y alumnos de Derecho y de otras facultades queremos proponer a Aldo Ferrer, un hombre que no ha tenido ligazón con la política universitaria en los últimos años, que significa un punto y aparte en la universidad", enunció el decano de Derecho, Atilio Alterini, quien enumeró que el ingreso irrestricto, la gratuidad, la libertad de cátedra y el cogobierno eran "dogmas" que Ferrer piensa "mantener más allá de las circunstancias que atraviese el país". El prestigioso economista cosechó también el apoyo de las mayorías de Farmacia, los estudiantes de Franja Morada y de lo que fue el Frente Grande, algunos profesores de Económicas y Filosofía, graduados de varias unidades académicas. Pero no le alcanzó.