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EL PARTIDO DE ROSEANA SARNEY
DEJO A CARDOSO
Cuando la derecha termina de romper
Es un hecho. El conservador Partido del Frente Liberal (PFL), socio clave de
la coalición del presidente brasileño Fernando Henrique Cardoso,
anunció ayer su salida de la alianza. El diputado Inocencio Oliveira
dijo que el PFL, heredero de las fuerzas políticas que apoyaron a la
dictadura militar en Brasil (1964-1985), había resuelto abandonar la
coalición de cuatro partidos en solidaridad con la candidata presidencial
de la agrupación, Roseana Sarney.
Sarney, gobernadora del estado norteño de Maranhao, acusó a miembros
del gobierno por una operación policial para investigar la participación
de una empresa de su esposo en un escándalo de corrupción con
la disuelta Superintendencia de la Amazonia (Sudam). Según ella, la operación
policial fue orquestada para desprestigiar su imagen ante su ascenso en las
encuestas de opinión, que la señalan como favorita para ganar
las elecciones presidenciales de octubre, junto al izquierdista Luiz Inacio
Lula da Silva, del Partido de los Trabajadores (PT). Entre tanto, el ex ministro
de Salud José Serra, apoyado por Cardoso, ha contado con poco apoyo en
su candidatura presidencial por el Partido de la Social Democracia Brasileña.
"Por decisión unánime, el partido decidió separarse
de la base del gobierno. La decisión es irreversible", dijo Oliveira,
líder de la bancada del PFL en la Cámara de Diputados. La policía
irrumpió el viernes en la oficina del esposo de Roseana Sarney, quien
también ocupa un alto cargo en el gobierno del estado de Maranhao, en
busca de documentos que probaran un desvío millonario de la Sudam, una
entidad gubernamental que financiaba proyectos en la Amazonia. La superintendencia
fue cerrada el año pasado por el presidente Cardoso ante numerosas denuncias
de corrupción. Pero Oliveira negó que el rompimiento con la base
gobernante afecte la votación de proyectos esenciales en el Congreso,
como la extensión de un impuesto sobre movimientos financieros, ni afectar
la estabilidad del país.
La amenaza de rompimiento del PFL con la coalición gobernante sacudió
los mercados financieros brasileños. El partido fue crucial para aprobar
las profundas reformas económicas que impulsó Cardoso en sus dos
períodos de gobierno, iniciados en 1995. El ministro de Desarrollo Agrario
Raúl Jungmann dijo en Washington que el panorama político en Brasil
está complicado por varios factores, incluido el conflicto con el PFL,
pero se mostró confiado en que Brasil podrá mantener la estabilidad.
"Nosotros estábamos observando en Brasil que no teníamos
las turbulencias argentinas, sobre todo en el plano político. Yo espero
que continuemos sin tenerlas", dijo Jungmann, precandidato presidencial
por el Partido Movimiento Democrático Brasileño, socio del bloque
oficialista.