COLOMBIA: MUJERES COMBATIENTES
Mujeres combatientes Nosotras, parte del pueblo oprimido, ante
la violencia que históricamente ha generado el sistema capitalista, resolvimos
luchar por nuestros derechos, los de todos y todas. Las mujeres en la guerrilla
tenemos la posibilidad de vernos diferente a como nos ve la sociedad que luchamos
por transformar, ya que tenemos la oportunidad de plantear nuestros puntos de
vista sin discriminación. En las FARC-Ejército del Pueblo las
mujeres somos aproximadamente del 30% al 40%, vestimos uniformes, llevamos fusil
terciado y nos declaramos combatientes revolucionarias de tiempo completo con
iguales deberes, derechos y responsabilidades que nuestros camaradas.
FARC-EP
Página de la Mujer,
Julio 23 del 2002
Web http://www.farc-ep.org/
En las riveras del río Caguán de Cartagena del Chairá hasta
la Bocana , área de la comandante Sonia, en el amazónico departamento
del Caquetá se encuentran ocho puertos pequeños unos, medianos
otros, de gran importancia para la economía y desarrollo de la región.
"El Plan Colombia les arrebató (a las FARC-EP) el control del Caguán..."
revista Semana; - sí, así son todas las victorias del ejército,
están más mal de lo que creíamos- comenta Cesar señalando
la revista, sentado en uno de los acogedores bares del puerto de Peñas
Coloradas, sobre el río Caguán.
Similar a la noticia de anoche en el noticiero nacional de televisión,
un general daba el parte de victoria: "se tomó un importante campamento
de las FARC en el que se encontró una plaza de toros y un aeropuerto",
mostraban imágenes de la plaza de toros y del aeropuerto en construcción
de Peñas Coloradas, ese mismo que tenemos aquí al lado- comentó.
Peñas esta de fiesta, es anfitriona del campeonato de fútbol de
los puertos del Caguán, - además del deporte queremos recolectar
fondos para la construcción del parque infantil- comenta uno de los lugareños.
En el polideportivo con la tribuna a reventar, se destaca la comandante Sonia
y las guerrilleras, compartiendo el entusiasmo de los habitantes, alientan al
equipo fariano que, en la cancha enfrenta la selección de fútbol
del Caguán.
¡Comandante Sonia!, la saludan por las calles, le hacen consultas; con una sonrisa
Sonia señala la oficina de Quejas y Reclamos de las FARC-EP, en la que
Alberto y Cristina atienden la larga fila de esperanzados pobladores en busca
de soluciones a los pleitos vecinales, mejoras en los servicios públicos,
problemas familiares e incluso sentimentales.
Cuerpo menudo, tez blanca, pelo castaño recogido en cola de caballo,
coqueta blusa blanca de cuello alto debajo del uniforme camuflado, botas militares.
Por adornos un par de anillos y pulseras llamativas, pistola y machete al cinto,
al hombro fusil AR15. Tímida sonrisa florece de sus labios, mirada penetrante
y desconfiada; Calidez, simpatía y confianza irradia la comandante fariana.
En el campamento el orden militar de las FARC-EP y la mano femenina de Sonia:
caletas bien construidas, caminos empedrados, cocina y comedor de madera, utensilios
relucientes. Destaca la extracción de agua por bomba de las napas subterráneas,
no obstante estar a la vera del río. La comandante ordena formar, da
voces militares que se cumplen de inmediato, imparte instrucciones, designa
comisiones de trabajo. ¡Compañía, retirarse!, ordena.
Por la radio, atiende las comisiones distribuidas en el área - hola,
buenos días, como amaneció, que novedades tiene?- dice la comandante
e imparte instrucciones. Reunida con el Estado Mayor de la Compañía,
discuten y acuerdan planes; en el campamento el don de mando de la comandante:
en el taller arreglan los motores fuera de borda, en el río lavan las
lanchas, un grupo de guerrilleros estudia en el aula, se respira iniciativa
y optimismo.
En lancha a 45 minutos y a cinco en helicóptero se encuentra la base
militar del ejército con 800 unidades, - hace unos días- cuentan
los guerrilleros -18 helicópteros ametrallaron el aeropuerto de Peñas
e intentaron aterrizar, cuatro compañeros tomaron posición, respondieron
fuego y sacaron los helicópteros en retirada -.
Esta semana y toda una noche se escuchó el ataque aéreo a un campamento
guerrillero, ametrallamiento y bombardeos desde la marrana (avión artillado)
dos OV-10 y helicópteros. Escaneando sus comunicaciones, escuchamos sus
criminales intenciones de exterminio con el empleo de tecnología gringa
de visores nocturnos y calóricos, queriendo matar los sueños de
una Colombia que lucha por paz y justicia. Una combatiente herida resultado
final.
- Llamo a la familia, escucho que están bien y eso para mí es
importante, no me gusta que me visiten, terminan llorando y eso no va conmigo.
Me acuerdo de mis viejos allá en Pueblo Bello donde nací hace
30 años; de 12 hermanos única guerrillera, no les interesa la
política, igual me dan su apoyo. De niña conocí la guerrilla,
pasaban por casa hablando de un mundo sin desigualdades, lindo. Cuando tenía
15 años me vine y aquí estoy ayudando a construir la Nueva Colombia
- comenta Sonia.
Y continua - no pedí permiso a los viejos, sabía que no iban a
estar de acuerdo, ya sabe como son los padres, lo sé por experiencia,
también soy madre, Carlitos mi hijo tiene siete años, vive con
sus segundos padres, lo quieren mucho, en vacaciones viene y la pasamos juntos,
lo quiero mucho, también él y, parece entender el porque no podemos
estar juntos, Wilson, el padre y mi compañero durante cinco años
murió en la toma de la base de las Delicias.
Río Caguán, famoso por la zona desmilitarizada y sede de los otrora
diálogos de verdes aguas caudalosas, aparente mansedumbre, inmenso espejo
que refleja gigantescos árboles, exuberante vegetación y el aletear
de exóticas aves. Surcan sus aguas modernas embarcaciones, transportando
los habitantes y comerciantes que desembarcan con sus utensilios y mercaderías
en los diferentes puertos y las cientos de fincas de pintorescas viviendas a
la vera del gran Caguán.
E-mail: elbarcino@laneta.apc.org