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Latinoamérica

24 de diciembre del 2002

Repasando el 2002
Uruguay: un año para el olvido

Rolando W. Sasso

Esta es la peor crisis que se haya visto en el Uruguay. Frases como ésta o parecidas, todos hemos escuchado en el correr del año. Pero lo peor es que nos venimos acostumbrando a las cosas jodidas. El aumento de la desocupación, de la miseria, del hambre ya son cosas cotidianas. Niños que comen pasto, que duermen a la intemperie, que no van a la escuela o que ni siquiera tienen documentos, es algo normal. Pero aún no hemos tocado fondo. Aún queda mucho para robar y las espaldas de la gente aún pueden ser jineteadas un poco más. Repasemos lo transitado entonces, para calibrar lo que puede venir.
Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra. Sin embargo parece que los uruguayos somos capaces de tropezar varias veces con el mismo adoquín. Nos damos de narices contra una política económica y volvemos a pedir más de los mismo. Así pasó el "Cejas" que acumuló multimillonarias obras de arte en su casa de Punta Carretas al tiempo que reprimía los reclamos de los trabajadores. Pasó también el "Cuqui" borracho de grapa, que aceleró la entrega del país y de las empresas públicas, mientras protegía corruptos. Luego el segundo plato del ex ministro de la dictadura y amigote de torturadores fundiendo industrias para privilegiar bancos y ladrones de cuello duro. Y ahora el hazmerreír de la comunidad internacional: la víctima de la aftosa, de la sequía, de las inundaciones, de la crisis regional, de los argentinos, de los malos uruguayos que esconden sus ahorros debajo del colchón en lugar de dársela a los banqueros para que se la lleven. Pero todos con un denominador común: la política económica neoliberal, la corruptela y el acomodo. Los Peirano que se repiten desde los años de Pacheco Areco hasta hoy, mientras que los que se ajustan el cinturón continúan siendo los mismos. Sin embargo pese a todo la gente del pueblo sigue defendiendo las empresas públicas a firmazo limpio y en otras áreas también tuvimos algunas cosas positivas para destacar.
DDHH
En el tema de los derechos humanos, efectivamente tuvimos alguna alegría. Luego de tanto trajinar por el mundo, finalmente Sara Méndez encontró a Simón. Las hojas del almanaque marcaban marzo de esperanza, cuando Sara recibió el resultado del análisis de ADN efectuado por el Banco Nacional Genético de la ciudad de Buenos Aires, confirmando que el joven de 25 años adoptado por una familia argentina en 1976, era su hijo Simón. Sara fue separada de su hijo el 13 de julio de 1976 cuando le fue robado por el hoy coronel retirado del Ejército uruguayo José "Nino" Gavazzo, en un operativo del Plan Cóndor en la ciudad de Bs. As. El joven supo que era adoptado el domingo 3 de marzo, cuando sus padres adoptivos se lo dijeron luego de que el senador Rafael Michelini se contactara con ellos.
Era una buena que se sumaba a la aparición de la nieta del poeta Juan Gelman en Uruguay. El padre de la niña, Marcelo Gelman había aparecido muerto en un tanque de petróleo, en el delta del Tigre: los vuelos de la muerte habían hecho su trabajo. Pero la historia continúa: falta encontrar a la madre de la niña, a María Claudia, la nuera de Gelman.
El presidente Jorge Batlle, reveló hace algún tiempo al senador Rafael Michelini que sabía quien mató a la joven argentina; sin embargo hasta ahora "Jorgito" no ha hecho nada para esclarecer su desaparición. Por tal motivo, Juan Gelman luego de una espera más que prudencial -de dos años- recurre nuevamente a la justicia. Se sabe dónde se debe investigar. Todos sabemos que el mayor retirado José "Nino" Gavazzo está implicado en esto, pero debe actuar la justicia y develar los misterios de una historia que comienza en Automotoras Orletti el 25 de agosto de 1976, o quizás antes.
La Comisión Para la Paz concluía su trabajo y todo quedaba en aguas de borraja. Sin embargo la alegría retornó de la mano de Juan Carlos Blanco, el ex canciller de la dictadura es la primera persona procesada en Uruguay por delitos de lesa humanidad. (Lo de persona es relativo, claro). Lo cierto es que el juez Eduardo Cavalli encontró al columnista del diario "El Observador" y ex senador del Partido Colorado, responsable en primera instancia de la desaparición de la maestra Elena Quinteros, ocurrida en Montevideo en 1976 provocando un conflicto diplomático con Venezuela, y lo procesó con prisión bajo la acusación de "privación de libertad". Blanco se fue a reunir con sus amigotes los Peirano en Cárcel Central. Pero aún falta esclarecer casos emblemáticos como los de la propia Elena Quinteros y los asesinatos de Michelini y Gutiérrez Ruíz.
Devaluación de junio
La situación en el plano económico durante los primeros meses del año no era buena, pero el mazazo nos lo dio el gobierno con la devaluación del 20 de junio y todo lo que vino después. Veamos cómo describe la situación el Informe de Coyuntura elaborado por el Instituto Costa Duarte del PIT-CNT: "Antes del 20 de junio, Uruguay tenía una economía en crisis, con 4 años de caída del producto, con 250 mil desocupados, más de 600 mil personas con problemas de empleo, salarios reales en baja, entre 35 y 40% de empresas que cerraron desde 1999 y casi 1.000 millones de dólares menos de consumo interno. Todo ello implica una grave situación en la que coexisten 6 dimensiones de la crisis: productiva, laboral, distributiva, social, fiscal y financiera.
A partir del 20 de junio, con la decisión de dejar flotar libremente el dólar, se generó una devaluación que redistribuye ingresos a favor de los que tienen ingresos en dólares y en perjuicio de los que tienen ingresos en pesos.
La devaluación en lo inmediato implica: La caída del salario real que surge del aumento del ritmo inflacionario. La reducción de los ingresos disponibles de las familias por el aumento de su endeudamiento. La caída de los gastos públicos tanto de salarios, como corrientes o de inversión que deberán reducirse para financiar el aumento del gasto de la deuda externa que, al estar valuada en dólares, se encarecerá.
Por ello está claro que la devaluación tiene como objetivo: profundizar y consolidar la reducción del salario y posibilitar una nueva transferencia de riqueza del trabajo hacia las formas concentradas del capital". Era el regalo de Bensión antes de partir.
Pero ¿qué viene sucediendo con la producción? ¿Qué pasa con el famoso PBI? Dice el citado Informe de Coyuntura que en los primeros 6 meses del año, "se profundizó la caída de la actividad económica en nuestro país: el PBI se redujo 7,8% respecto a igual período del año pasado. Desde finales de los noventa, el PBI ha registrado caídas sostenidas: 2,9% en 1999, 1,4% en 2000 y 3,1% en 2001. Estimaciones del Fondo Monetario Internacional señalan que la disminución del producto podría alcanzar 11% en este año y adelantan una de 4,5% para el próximo".
Bensión y Atchugarry
Era el jueves 11 de julio. En medio de gran expectativa el senador Curiel interpeló al entonces ministro Bensión. Pero el interpelante no le preguntó al amigo de los banqueros sobre el monto total de lo gastado por nosotros en salvataje a los bancos privados. Pero ¿no hubiera sido mejor ir quedándose con esos bancos a medida que los saneábamos? Brutal reforma bancaria nos hubiéramos mandado y tendríamos capitales genuinos para prestar en beneficio de la producción nacional.
A grandes titulares la gran prensa alcahueta garganteó que "sin consecuencias políticas para el equipo económico del gobierno culminó la interpelación" al contador Bensión. Interpelación que comenzó mal: con el abrazo de interpelante e interpelado. Interpelante que ya había dado señales dudosas cuando declaró a los cuatro vientos que iba a hacer el máximo esfuerzo para evitar perjudicar al sistema financiero, para que no continúe el retiro de capitales de la plaza.
Una interpelación que apuntó contra la política económica a sabiendas de que dicha política era inamovible. Se atacó lo inalterable, pero se cuidó de tocar los controles del Banco Central sobre el sistema financiero y de golpear a los bancos especuladores que son los verdaderos responsables de la crisis. Necesitamos del sistema financiero dijo Curiel. Cuando gane las elecciones el EP-FA, el sistema financiero debe estar vivo para invertir en la reactivación económica. Parece que no se dan cuenta que para esa época el sistema financiero no va a ser más que una enorme e impagable deuda externa. Lo que van a heredar es el agujero.
Lo cierto es que ninguna de las tres mociones presentadas obtuvo mayoría. Sin embargo y a pesar de lo cuidadosa, la interpelación traería cola. Los blancos que en el Palacio Legislativo cerraron filas con los colorados, negociaron cambios en el equipo económico, despegados en el tiempo de la interpelación, para que no se malinterprete.
Pero para tocar a Bensión y al primo Rodríguez Batlle, Jorgito "el Compadrito" exigió la renuncia de los otros directores del Banco Central. En la volteada cayó la contadora Rosario Mederos (Herrerista) y la también contadora Eva Holtz (Forista). Pero Jorgito cambió de idea y el domingo 21 de julio levantó el teléfono y anunció a sus aliados que el ministro Bensión se queda. Así nomás. El jefe nacionalista Lacalle montó en cólera y no era para menos. Pero el lunes Jorgito reconoció molesto con los blancos -casi lloroso- que Bensión ya no era el ministro de economía.
Finalmente el martes 23, cuando escaseaban 5 minutos para que abrieran los bancos Jorgito anunció desde el Edificio Libertad que el próximo ministro de economía sería el senador Alejandro Atchugarry. Lo acompañarán como viceministro el ex asesor de Bensión, economista Isaac Alfie, quien fuera denunciado públicamente por el colega Samuel Blixen por retiros de fondos de la banca oficial, en momentos en que el presidente Batlle suplicaba parar la corrida y por Julio de Brun en la presidencia del Banco Central. En la OPP seguirá el ya inamovible Ariel Davrieux. Fueron los cambios necesarios para que todo siguiera igual.
Así se fue un año para el olvido. Atrás quedó la imprevisión con la aftosa, las maniobras y la vista gorda del Banco Central para beneficiar a los Peyrano; atrás quedaron los papelones presidenciales y la huelga municipal montevideana. No así huellas y heridas de estos y otros acontecimientos lamentables, que permanecerán presentes por mucho tiempo.
Fuentes consultadas: COMCOSUR, Quincenario Mate Amargo, Informe de Coyuntura -octubre 2002- Inst. Cuesta Duarte