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Caracas.-Todavía resuenan en la cuna de Bolívar los pasos firmes de UN MILLÓN de venezolanas y venezolanos decididos a poner punto final al fascismo patronal, al golpismo mediático, a la provocación criminal y mercenaria, al boicot de la burocracia tecnócrata y pirata en la distribución de gas y gasolina y a la abierta intervención extranjera, especialmente de los gobiernos de Aznar y Bush.
LA MARCHA POPULAR Y LA INTERVENCIÓN DEL PRESIDENTE CHÁVEZ
Centenares de miles de personas caminaron desde el popular sector de El Valle hasta el Palacio presidencial de Miraflores, copando todo el centro de Caracas, a lo largo de 16 kilómetros. En la marcha se pudo observar a la militancia de los partidos que integran la coalición gubernamental junto a la gran mayoría de organizaciones sociales, a trabajadores y desempleados, a habitantes de los barrios pobres y a millares de jóvenes e intelectuales.
Al final de la concentración intervino el presidente constitucional Hugo Chávez para asegurar que la oposición que es "golpista, fascista y desestabilizadora", "será derrotada una y cien veces". El líder bolivariano aseguró que militarizará los servicios petroleros para evitar una crisis criminal en contra de la población venezolana, pues "esta oposición golpista y sanguinaria que lamentablemente tenemos, dificulta construir un camino pacífico y democrático, como el que venimos construyendo.
La oposición "fascista y terrorista... tiene una carta oculta y un puñal escondido para clavárselo al corazón de la revolución bolivariana", dijo Chávez.
A toda voz se pudo escuchar la exigencia de los movimientos sociales de que los dueños de los poderosos medios televisivos sean integrados en las mesas de diálogos, dada su activa participación en las intentonas golpistas. Los otros participantes en las mesas (Fedecámaras y la central "sindical" pro-estadunidense) tienen, al decir de los observadores, poca representatividad social.
EL PISTOLERO DETENIDO
Joao de Goveia, es el nombre del ciudadano portugués, taxista de oficio, acusado de ser el autor de los disparos que terminaron con la vida de dos personas en la Plaza Francia de Altamira el pasado viernes 6 de diciembre. Allí vació dos cargadores de su pistola Glock austriaca. Este provocador había ingresado a Venezuela el 4 de mayo de este año y desde entonces residía en un apart-hotel junto a tres individuos más.
En estos momentos se realizan las investigaciones para definir bajo qué auspicios se encontraban el criminal y sus acompañantes en Venezuela y quién o quienes proveyeron el arma y sufragaron los gastos de viaje y alojamiento de la pandilla. Es interesante anotar que el portugués pretende ser calificado como "desquiciado mental", burdo argumento que ha sido ya recogido por los medios de comunicación opositores, en una clara maniobra de encubrimiento.
EL GOLPE EN PDVESA
Donde se han movido con éxito los fascistas es en el amotinamiento y control de 11 buques cargueros de combustible, con, aproximadamente, 44.000 galones cada uno. Hasta el momento 4 naves han sido recuperadas por las fuerzas militares y los órganos judiciales competentes.
La intención de este bloqueo es impedir la refinación del petróleo venezolano, bloquear sus puertos, medios y vías de exportación y provocar una crisis energética en la distribución local y en los países consumidores, lo que aceleraría según sus "malévolos cálculos" una interesada intervención extranjera.
Varios sectores políticos de Venezuela y América Latina han expresado su rechazo a las maniobras de "guerra sucia" que parecen provenir de círculos gubernamentales de España y Estados Unidos.