Quito: Una marcha multicolor acordonada por la policía
Martha Cecilia Ruiz ALAI-AMLATINA
Indígenas de Ecuador, Colombia y Bolivia, campesinos y campesinas, afrodescendientes, mujeres, gays, jóvenes, ecologistas, pequeños productores, sindicalistas, estudiantes. Así de diversa y multicolor fue la marcha de protesta en contra del Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), que congregó a cerca de 15 mil personas en la capital ecuatoriana.
Desde muy temprano en la mañana, las diversas organizaciones sociales que se han sumado durante toda esta semana a las Jornadas Continentales de Lucha contra el ALCA se reunieron en un parque del norte de Quito, con música, pancartas y banderas de todos los colores. El propósito era llegar hasta el hotel donde está previsto que se reúnan los cancilleres y ministros de comercio exterior de la región, que mañana harán pronunciamientos oficiales sobre el borrador del ALCA.
Sin embargo, lo/as manifestantes no pudieron llegar hasta donde querían. Helicópteros y patrullas vigilaban la marcha, mientras algo más de 5.300 policías custodiaban las calles de Quito, cerrando el paso a los y las manifestantes.
Aunque la marcha se desarrolló en forma pacífica, los policías -equipados con escudos y toletes- decidieron lanzar bombas lacrimógenas. El resultado fue un empleado del sector judicial herido en el pecho y el brazo y un menor de edad fuertemente asfixiado, además de seis detenidos por enfrentamientos con la policía.
Sin duda, los líderes indígenas, organizados alrededor de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) lideraron la marcha, y además movilizaron a cerca de 5.000 hombres y mujeres que llegaron desde la Sierra Norte hasta Quito. Así mismo, organizaciones de campesinos, mujeres y pequeños agricultores caminaron durante cuatro días desde el sur del Ecuador para participar en esta marcha.
También estuvieron presentes líderes y organizaciones de otros países del continente, como lo/as miembros del Movimiento Sin Tierra del Brasil y la Confederación Nacional de Indígenas de Colombia (CONIC). De igual manera, participaron personalidades como el Premio Nóbel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, de Argentina, y algunos parlamentarios del continente, que ayer se pronunciaron el contra de la propuesta de crear un Área de Libre Comercio para las Américas.
Debido al fuerte control policial y a las condiciones adversas que enfrentó la marcha, las agrupaciones sociales decidieron no entregar el documento que habían previsto presentar a los cancilleres. Se trata del "Mensaje de la movilización de los pueblos de América a los ministros de economía y comercio reunidos en Quito, Ecuador", en donde se explica las razones por las cuales existe una oposición contundente frente al ALCA.
Una de las principales razones tiene que ver con la forma secreta en que se han dado las negociaciones. Y es que, el proceso de discusión y negociación para dar vida al ALCA - iniciado en 1994- no solo ha excluido a la sociedad civil, sino que ni siquiera ha sido consultado con los parlamentos de cada país.
De igual manera, las organizaciones sociales que se han manifestado en contra del ALCA cuestionan el hecho de que este acuerdo desconozca las desigualdades estructurales de los 34 países que pretende integrar, y que proponga una competencia en desigualdad de condiciones y un trato parecido a pequeños agricultores y grandes empresas transnacionales. ¿Cómo competirán, por ejemplo, Estados Unidos con Haití, o Canadá con Bolivia, Perú o Ecuador? Existen condiciones desfavorables para los pequeños productores y para los países latinoamericanos y del Caribe.
"No estamos en contra del intercambio y los acuerdos entre países -dice el mensaje-. Estamos por un modelo distinto al que se quiere imponer con el ALCA; estamos por acuerdos soberanos y democráticos que verdaderamente garanticen un desarrollo justo, equitativo y sustentable para cada una de nuestras naciones".