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7 de marzo del 2002
Filipinas: Duros combates entre el ejército y el Frente Moro de Liberación Islámica
Agencias
Más de 60 mil personas han abandonado sus hogares para escapar
de nuevos combates entre las tropas filipinas y el mayor grupo separatista musulmán
del país, el Frente Moro de Liberación Islámica (FMLI),
informaron ayer las autoridades.
Al menos nueve guerrilleros han muerto en esporádicos enfrentamientos
que comenzaron hace dos semanas en Maguindanao, y las fuerzas del gobierno sufrieron
tres muertos y 16 heridos.
El FMLI es el principal grupo insurgente que lucha por un Estado islámico
en el sur del país, de mayoría católica. Uno más
pequeño, Abu Sayyaf, mantiene como rehenes a una pareja de misioneros
estadunidenses y a una enfermera filipina desde hace más de nueve meses
en la isla de Basilan, cerca de Mindanao.
Fuerzas especiales de Estados Unidos realizan ejercicios militares en Basilan
para, aparentemente, mejorar las habilidades de las tropas locales en su lucha
contra Abu Sayyaf, que Washington vincula con Al Qaeda.
En este contexto, la presencia de las tropas estadunidenses ha provocado acusaciones
entre el ejército y el FMLI, y pone en peligro el diálogo de paz
que mantienen ambas partes. Eid Kabalu, vocero rebelde, considera que esa campaña
se dirige a todos los movimientos secesionistas y acusó a facciones conservadoras
de Manila de relacionar el terrorismo con el separatismo para justificar la
intervención de militares foráneos en este país.
Sectores populares, musulmanes y políticos estiman que la presencia de
fuerzas extranjeras esconde el propósito de intervenir militarmente y
dudan de las palabras de la presidenta Gloria Macapagal Arroyo, quien prometió
que los soldados estadunidenses "sólo entrenarán" a las fuerzas
locales.