4 de diciembre del 2002
Las ONGD de Congregaciones religiosas
pretenden incidir en los dineros de la cooperación
ATTAC Madrid
Manejarán (y manejan) millones de euros. Ahora pretenden quedarse
con los escasos dineros de la cooperación internacional. En un Estado
aconfesional como el nuestro, los movimientos de las Congregaciones religiosas
no pueden pasar inadvertidas.
Las organizaciones no gubernamentales vinculadas a congregaciones religiosas
han aprobado un convenio de colaboración con el fin de convertirse en
una red de ONGDs a partir de febrero del próximo año.
Según un despacho de la agencia de noticias EFE, el convenio parte de
una visión común de la cooperación al desarrollo desde
los valores del Evangelio que promueve la doctrina social de la Iglesia católica.
El acuerdo, según la información facilitada por la agencia de
prensa de la Conferencia de Religiosos Españoles, IVICON, se firmó
durante un encuentro de estas organizaciones vinculadas a congregaciones e institutos
religiosos, convocado para reflexionar y tomar decisiones sobre tareas conjuntas
en materia de cooperación al desarrollo.
"Este encuentro es fruto del recorrido realizado durante los dos cursos anteriores.
Las ONGDs de las congregaciones son muchas y algunas muy pequeñas, por
lo que sumar esfuerzos y actuaciones producirá una contribución
mayor a la cooperación al desarrollo", dicen en una nota informativa
los directores de los departamentos de Justicia y Paz, Acción Social
y Misiones de la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), organizadores
del encuentro.
Aunque la CONFER no forme parte del convenio de colaboración como tal
institución, los departamentos mencionados del Secretariado Nacional
"continuarán participando en el trabajo común de las entidades
firmantes, facilitando espacios para el encuentro, colaborando en las tareas
de comunicación y en la difusión de las actividades emanadas de
este convenio", añaden.
Los contenidos fundamentales en los que trabajarán conjuntamente estas
ONGDs serán la educación para el desarrollo y la sensibilización
de la sociedad española, con especial atención a la formación
y animación a nivel escolar.
Además, impulsarán una "presión política" sobre
las instituciones públicas y privadas españolas, europeas y multinacionales,
denunciando sus "estructuras alienantes" y, al mismo tiempo, actuando como interlocutores
con dichas instituciones.
Finalmente, realizarán programas y proyectos de cooperación al
desarrollo, junto a acciones de emergencia y ayuda humanitaria, y la promoción
del voluntariado .