Luego de la marcha del jueves 13 de junio de 2002, habló a los presentes Mercedes Meroño (Porota):
Hay tantas cosas para decir: se terminó el mundial de fútbol, se terminó el corso, ya no pueden engañarnos con el mundial.
Hay diarios, que se dicen progresistas, que hoy le dedicaron diez hojas al mundial que ya no está. ¡Diez hojas! Antes se decía que el opio de los pueblos era la religión, ahora decimos que es el fútbol. Con el fútbol tapamos todo. ¡Por suerte no ganamos! Lo que pasa es que hay muchos países que lo necesitan, entonces como es una ruleta, cada vez le toca a uno distinto. Porque también Brasil lo está necesitando. No puedo ensañarme con esto, porque dicen que a mucha gente le haría muy bien. Yo creo que a nadie le hace bien, pero no los puedo convencer de lo que creo que no les hace bien.
Ustedes saben como nos costó a las Madres imponer la palabra "resistir". Cuando hicimos la marcha que la consigna era "Resistir es Combatir" tuvimos oposición de todos los lados. Resistir es una palabra dura. Ahora se ha formado el Movimiento Argentino que Resiste (MAR). Y les voy a decir lo que ellos dicen: hablan de una Argentina que existe y resiste. Hablan de miles de argentinos de todos los extractos sociales que defienden su derecho a alimentarse, a educarse, a tener trabajo, que tienen el derecho de elegirse y ser elegidos en libertad y democracia. Lo que no nos dicen es cómo nos vamos a deshacer de todos estos mafiosos que nos gobiernan, que se presentarán en las próximas elecciones, ellos, o sus hijos, o sus parientes, todos criados y educados sabiendo cuál es la forma más fácil de robar sin importarle a quién dejan o matan en el camino. Eso nos dice la MAR.
Este movimiento está formado por intelectuales como Lito Cruz, Cipe Linkovsky, Atilio Borón, Torcuato Di Tella, Aldo Ferrer, Norma Morandini, Strassera, Magdalena Ruiz Guiñazú –que todos sabemos que le hacía la prensa a Martínez de Hoz y ahora es progresista- y otros más.
¡Pero miren qué ambiciones que tienen, ahora ellos quieren resistir! Ayudaron a la dictadura y ahora dicen que van a resistir...
A ninguno de los que firmaron este MAR de mierda, a ninguno lo hemos visto el otro día en Villa Fiorito, a la mañana, cuando hacía cinco grados bajo cero y les pasaron la aplanadora a quinientas familias y las dejaron al aire libre, sin cama, sin casa. A esa gente les costó la vida construir esas casas. Vaya a saber de qué milico debe ser el terreno, para que ahora, que están prohibidos los desalojos, los pasen por arriba con la aplanadora.
Uno veía a los hombres llorar y digo: ¡qué hijos de puta! Ninguno de ellos estaba allá, resistiendo con ellos. Porque ellos ni fuerza para resistir tienen. Le tiraron abajo lo poco que tenían y ¿a dónde fue esa gente?
Ninguno de esos que tienen poder, ninguno de esos periodistas, ninguno de esos intelectuales estaba ahí ayudando y resistiendo con esa gente.
Yo les digo que nos espera algo feo, pero que tenemos que seguir resistiendo. Y que resistir es combatir. Y que no tenemos que dejar de luchar. Y que luchando vamos a vencer.