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Continuidades. 26 de Julio. Avellaneda...
Como si fuera una broma de la historia, empeñada en recordarnos de que ella no es una pelicula que empieza cuando nosotros llegamos, en Avellaneda, el 26 de Julio, vamos a recordar a Maxi Costequi y a Darío Santillan piqueteros de la Anibal Verón, asesinados hace un mes.
Avellaneda
A pocas cuadras de alli, enfrente a la Plaza Mitre, en un restaurant que ahora tiene nombre italiano, pero hasta hace pocos años se llamaba Confiteria y Pizzería La Real, el 13 de mayo de 1966, mataron a dos trabajadores que vivía de changas llamados Blajakis y Zalazar.
Blajakis, como Darío era un militante. Zalazar como Maxi era nuevito, recién
se acercaba a la lucha.
A Blajaquis y Zalazar los mató la burocracia sindical peronista, a Darío y Maxi , los mató un gobierno peronista. Blajaquis había sido del PC y colaboraba con la resistencia peronista, Zalazar era peronista. Darío Santillán también.
En la masacre de La Real, que cuenta magistralmente Rodolfo Walsh en "Quien Mató a Rosendo" – para mi gusto, el libro mas importante de la literatura política argentina del siglo XX – aparece un dirigente de base sindical llamado Raimundo Villaflor.
Raimundo, "el Negro Raul" para los compañeros, era hijo de Don Anibal, un anarquista protagonista del 17 de octubre .
Pero además de eso era el hijo político dilecto de John William Cooke, un hombre cuyo origen fue el radicalismo alvearista, pero que sería sucesivamente diputado peronista del 46, interventor del Partido Justicialista en el 55, delegado de Perón durante la resistencia y el principal hombre de confianza en la Argentina de Ernesto Che Guevara y la Revolucion Cubana.
Quizás por eso y también por el aporte de su compañera, Elsa Martinez una gallega que disparó de Uruguay por su militancia tupamara, que le contagió la irreverencia de Sendic, Raimundo fue el mentor de la propuesta de Alternativa Independiente, formulada a principios de la década del 70.
Esa propuesta sostenía que la imprescindible independencia política de la clase trabajadora y su hegemonía en un frente de liberación solo se podía concretar a travez del desarrollo de sus organizaciones autónomas . Desde esa perspectiva la propia organización que lideraba Villaflor ( FAP- PB) era nada mas que una herramienta al servicio de la construcción y desarrollo de las organizaciones autonomas de los trabajadores.
La propuesta no quedó solamente en los papeles. Tuvo su apogeo en los los años 74-75, donde florecieron las coodinadoras interfabriles y en fabricas donde la Alternativa Independiente hacía un importe importante se desarrollaron experiencias de control obrero, consejos obreros y autogestión. Recordamos algunos nombres: Hilandería Olmos, Bagley, La Hidrófila. Antecesoras hace casi 30 años de Zanon y Brukman.
La dictadura del 76 hizo desaparecer 30000 compañeros (entre ellos Raimundo Villaflor), y pretendió borrar la historia.
No tuvieron suerte. Y no fue en este caso responsabilidad de cientos de trabajos de recuperación de la memoria histórica. La mayoría de los viejos militantes que aportaron a esos trabajos no los registraron, no por mala leche, sino simplemente porque funcionaban en circuitos diferentes. No los conocían. De la misma manera que muchos militantes y periodistas progresistas necesitaron una masacre para enterarse quienes eran y que pensaban los dirigentes de la Anibal Verón.
Pero algo debe haber quedado en los sotanos de la memoria de los trabajadores, en los intersticios del empedrado que transitan ahora pocos obreros fabriles y muchos desocupados, para que en la Zona Sur del conurbano vuelvan a florecer la palabra autonomía. Para que reconozcamos en rostros encapuchados la música que alguna vez escuchamos de activistas sindicales de base.
Para que las conversaciones de aquellos piquetes madrugadores para parar a los carneros, se reproduzcan en los fogones piqueteros para parar el hambre y el ninguneo. Para que los nietos de aquellos antiguos resistentes vuelvan a repetir 25 años despues que: lucha, democracia de base, autogestión y formación, son las bases de un proyecto autónomo. Que las construcciones organizativas inmersas en el conflicto social son las verdaderas usinas de una política de los trabajadores. Que los partidos politicos que se asumen como representantes de la clase obrera o como vanguardias a priori son meras imposturas. Que el peronismo dejó de ser una identidad popular y antimperialista para convertirse en una lápida al servicio de los enemigos de los trabajadores y los intereses nacionales.
Hay muchas personas sorprendidas por la profundidad de las respuestas que encontraron en los compañeros de la Verón, como también se sorprenderían si se dan una vuelta por el Movimiento Campesino de Santiago del Estero (Mocase). Mas que de novedades teóricas se trata de continuidades. La zona sur del conurbano fue un lugar de importante desarrollo de las coordinadoras fabriles de los 70 , y de los asentamientos en los 80. En el Mocase hay un importante aporte fundacional de quienes traían la experiencia de la Forestal.
26 de Julio.
Uno pertenece a una generación donde los 26 de julio siempre había un acto. Legal o clandestino. Por Evita y por el Che.
Evita porque representaba el peronismo que no pudo ser.
El Che por la Revolucion Cubana y todo lo demás.
El 26 de Julio era una fecha parteaguas, porque la reivindicación exclusiva de Evita molestaba a los custodios de la pureza peronista que nos acusaban de "olvidarnos de El General".
Y también para los que politicamente se identificaban como marxistas. Porque el Che durante muchos años fue un hereje de las iglesias rojas y un sospechoso en la lista de los comisarios politicos.
El 26 de Julio era una fecha síntesis.
Los años, las luchas, los exilios, las carceles, los campos de concentración fueron demoliendo los prejuicios y pudimos descubrir que, efectivamente, los que nos juntábamos los 26 de Julio, eran los compañeros y las compañeras. Y los otros, los comisarios, jugaban para el otro bando.
Que significaban Evita y el Che para los dos chicos de veinte años que asesinaron en el puente ?.
Nunca hablé con Maxi.
Pero he visto una foto de Evita en el local del MTD Lanus. Y he visto a Dario con la cara del Che en una remera.
No tiene mucha importancia si conocían a fondo sus biografías. Ellos empezaban a ser como Evita y como el Che.
El 26 de Julio en Avellaneda, en el puente, van a cruzarse el pasado y el futuro, los metalúrgicos de Raimundo y los desocupados de la Verón. Blajaquis, Zalazar, Maxi y Darío. Evita y el Che. Y habrá un momento mágico, donde los mas viejos concluyamos que, finalmente, pasó el invierno y la vida vuelve a empezar.
Guillermo Cieza
Retruco