Los asesinos andan sueltos y amenazan. Ruckauf dice estar orgulloso de haber firmado el decreto que sirvió para hacer desaparecer a 30.000 personas, fusilar a 15.000 en las calles, mandar a prisión a 8.900 y a un millón y medio al exilio.

Peor que Videla y Massera juntos es este canciller.

Está anunciando desbordes que ellos mismos provocan con su política macabra de desocupación y muerte.

La represión del 19 y el 20 causó 50 muertos, y el canciller, rodeado de altos oficiales de la fuerza aérea, se regocijó de lo que hizo en 1975.

Maldito, mil veces maldito asesino que se sigue sirviendo de las fieras de uniforme para amedrentar al pueblo que sufre y pelea por la subsistencia diaria, que ama a sus hijos y les quiere dar una vida digna.

Maldito, mil veces maldito el hombre con la sonrisa de hiena que, como ellas, sonríe cuando ve sangre.

Maldito, mil veces maldito Ruckauf, que le soba el lomo a las fieras para que se preparen para atacar.

Maldito canciller, no podrá con el pueblo movilizado, no podrá con los piqueteros, no podrá con las Madres.

Ocuparemos calles, rutas, avenidas, municipios y todo lo que sea necesario para conseguir el trabajo digno que todos merecemos y la justicia que castigue con fuerza a los lobos asesinos como usted.

Juana de Pargament (Tesorera)
Hebe P. de Bonafini (Presidenta)


Buenos Aires, 24 de Junio de 2002