Beatriz Blanco

Proyecto de ley: a un año de mantener tomada la fábrica de cerámica, los trabajadores presentaron su proyecto de ley de estatización bajo control obrero, resistieron provocaciones y se abrieron nuevos espacios de solidaridad
Octubre fue para los obreros de Zanón un mes de contrastes jalonado por festejos, provocaciones y coordinaciones estratégicas. Pero, centralmente se lo recordará como el mes en que formalizaron su propuesta de estatización con control obrero, avalado por 10 meses de producción, defendido con sus propias guardias obreras de seguridad y más de 21 fallos a su favor.
El proyecto de ley fue entregado a la Legislatura provincial el 18, por una delegación de trabajadores encabezada por el secretario general del sindicato de ceramistas, Raúl Godoy, a quien acompañaron representantes de las Madres de Plaza de Mayo, entre ellas Hebe Pastor de Bonafini.
Específicamente, el proyecto elaborado consta de ocho artículos, en los cuales figura la expropiación del inmueble, las instalaciones, el stock de productos y materias primas, maquinarias, y la marca comercial. Propone que el Estado provincial no se haga cargo de las deudas contraídas por la firma y que éstas se paguen con los bienes y patrimonio de los accionistas. Además, el Estado debería encargarse de los salarios de los obreros
- 800 pesos- y de proveer los recursos para la expansión de la fábrica. Las ganancias que generen se destinarán a planes de obras públicas para crear nuevos puestos de trabajo, y continuará funcionando con el personal actual, a los que se sumarán los que sean necesarios para completar el plantel existente al momento de declararse el lock out ofensivo.
La propuesta también prevé crear un consejo obrero integrado por nueve miembros elegidos por los trabajadores en asamblea. La función de este órgano será controlar y fiscalizar el cumplimiento de las disposiciones de la ley de expropiación. Y el mandato de los miembros será revocable por asamblea general de los obreros.
En las manos del gobierno neuquino de Jorge Sobisch cae un proyecto de ley que pone blanco sobre negro un sentir que recorre las calles de Neuquén: "Zanón es del pueblo". Por otra parte, a nivel legal existen antecedentes de aprobación de expropiación (aunque en forma transitoria y con gestión cooperativa) de fábricas que presentaron quiebra,. por parte de las legislaturas porteña y santafesina.
El tablero es complejo. Los obreros que vienen sufriendo aprietes, se encontraron el 2 de octubre, cuando volvían de festejar un año de toma por las calles de la ciudad de Neuquén junto a 1500 personas, con el ataque en las puertas de la fábrica de una patota de barrabravas, financiados por los antiguos dueños de la fábrica y dirigidos por Oscar Montes, el burócrata desplazado del sindicato de ceramistas. Los montistas, alrededor de 40, apedrearon a la guardia obrera, a los autos estacionados en la puerta de la fábrica y quemaron la bandera del sindicato, ante la mirada impávida de la policía antimotines, que había llegado junto con los provocadores, y se alistaron entre la cerámica y la ruta 7. La patota acampó 3 días, se fueron el fin de semana y volvieron el lunes 8 para permanecer dos días más. Los obreros ceramistas, por su parte, inauguraron una oficina el miércoles 31, en la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo, para que funcione una Comisión de Solidaridad con Zanón y todas las empresas ocupadas, que recibirá propuestas todos los miércoles.
Este es el escenario en que, no sólo se dirime el futuro de una fuente de trabajo para 270 personas, sino también la perspectiva de gran número de obreros organizados para consolidar un acto de resistencia con alcances más amplios, junto a otros sectores populares.