20 de noviembre del 2003
Palestina-Israel
¿Se despeja el cielo?
Régine Deforges
Podría creerse que la paloma muestra la punta de sus alas al oír a un general de la aviación de Israel, Yiftah Spector, cuando dice: "La ocupación es la principal causa del terrorismo; al ocupar cada vez más tierra palestina ponemos en peligro la existencia del estado judío que creamos con tanto éxito. Si los palestinos no tienen su propio Estado, deberán vivir con nosotros en el mismísimo país. Y entonces, nos derrotarán, porque la demografía trabaja a su favor. La ocupación comenzó de manera no- intencional. Los palestinos aprovechaban esa situación y nosotros también. Su nivel de vida ha mejorado. Nosotros esperábamos que la prosperidad nos pondría en ruta hacia la paz. Pero, al comenzar la primera Intifada, comprendí que Israel ocupaba a otra nación y que ésta tenía derecho a un Estado". El general Yiftah Spector ha participado en numerosas batallas decisivas del estado hebreo, sobre todo la Guerra de Seis Días. No vaciló al firmar, junto con veintisiete pilotos, la carta al gobierno israelí en la que se compromete a no continuar "obedeciendo órdenes ilegales e inmorales" y se niega a "participar en ataques aéreos contra centros de población civil" en Cisjordania y en la franja de Gaza. Esa carta provocó gran escándalo en Israel, cuyo gobierno declaró, el mes pasado, una "guerra total" contra los islamistas del Yihád y de Hamás, después del recomienzo de los ataques suicidas. "Yo no soy un 'baba-cool'. Estoy a favor de que se ataque y detenga, por todos los medios, a las bombas humanas en camino y a todos los cochinos; pero me niego a convertirme yo mismo en un cochino. Estoy en contra de que se mate a mujeres y niños palestinos. No se puede matar a un enemigo aniquilando el corazón de una muchacha, aunque eso signifique que otras muchachas mueran de nuestro lado, bajo las bombas de los terroristas. Estoy contra el terrorismo y el antisemitismo. Pero le digo a mi pueblo: 'No se conviertan en anti-árabes'", declaró el general Yiftah Spector. El jefe de la aviación, Dan Haloutz, acusó a los firmantes "de haber clavado un cuchillo en la espalda de los combatientes y de la democracia israelí". Acusación a la cual responde Yiftah Spector: "Yo no soy un insumiso. Israel es un estado basado en la moral. Desde el proceso de Eichmann, que había argumentado ante la justicia israelí que no había hecho otra cosa que obedecer órdenes, una ley dice que nadie, en Israel, puede escapar a sus responsabilidades si viola las convenciones internacionales que protegen a los civiles en los conflictos. Cada soldado israelí coloca, en su salón, el texto de la ley de la 'bandera negra'. Ésta dice que si se alza una bandera negra ante tu conciencia cuando recibes una orden inmoral, tienes derecho a desobedecerla".
En estos días, en Ginebra, ha sido firmado un plan de paz no-oficial entre el antiguo ministro laborista de justicia, el israelí Yossi Beilin, y el ex ministro de información palestino, Yasser Abed-Rabbo. El acuerdo propone soluciones a los principales obstáculos del proceso de paz, previendo, entre otras cosas, que los palestinos renuncien al retorno a Israel, que se divida la soberanía sobre la ciudad vieja de Jerusalén; el monte del Templo, el sitio más sagrado del judaísmo donde se encuentra la explanada de las Mezquitas, tercer lugar santo del Islam, pasaría a estar bajo autoridad palestina. El muro de los lamentos, así como el barrio judío, quedarían bajo Israel. Por su parte, el estado israelí se comprometería a restituir a los palestinos un 97,5% de Cisjordania ocupada desde 1967. Esto no le conviene ni a Ariel Sharon ni a Yasir Arafat, que consideran que la iniciativa de Ginebra es "peligrosa". "Hay que luchar para impedir la adopción de la Iniciativa de Ginebra y contra la ayuda que le es aportada por los estados europeos", ha declarado el primer ministro israelí. David Leffler, antiguo colaborador de Yitzhak Rabin, y se felicita del apoyo aportado por un cierto número de artistas de Hollywood, entre ellos Brad Pitt, preconizando un referendo con las dos poblaciones. "Deseamos que la solución de ese conflicto sanguinario provenga de la base y no sea presentada bajo la forma de un plan prefabricado que habría que tomar o dejar", declaró David Leffler. ¿Se estaría aclarando el cielo israelí-palestino?
El libro de Israel Shamir, "La otra cara de Israel" (1), ha sido retirado de la venta como consecuencia de presiones sobre Denis Bourgois, coeditor de la obra con Franck Spengler, con el pretexto de que contiene "pasajes antisemitas". Hay pasajes de la traducción francesa, que si son leídos apresuradamente, presentan un carácter antisemita. Las Ediciones Ballard, asimismo, "han decidido interrumpir inmediatamente la comercialización de la obra" anunció Denis Bourgois contrariamente a la opinión de Franck Spengler. Según el editor, "el autor de ese libro traducido del inglés, del ciudadano israelí de origen ruso, ataca la política actual del gobierno Sharon y defiende la creación pacífica de un estado israelí-palestino". Una toma de posición que por lo menos justifica que se retire el libro de la venta, antes de quemarlo, junto con su autor...
(1) En Éditions Blanche-Ballard
5 de noviembre de 2003. Página impresa en: http://www.humanite.fr
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