Lejos de su país, en muchas ciudades de Europa, Asia, América, África, colombianos revolucionarios se reunieron para conmemorar el 39º aniversario de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - Ejército del Pueblo..
Participé en una de esas «actividades», como ellos dicen..
Fue discreta, casi íntima, en un apartamento prestado por amigos de las FARC. De los 50 presentes, unos 20 eran colombianos. Entre ellos, solidarios, militantes del ELN..
Ni una de esas reuniones tuvo noticia alguna, en país alguno, en la prensa escrita, la televisión o la radio. Desde que el gobierno de los EEUU inscribiera a las FARC en su lista de organizaciones terroristas, y la Unión Europea le imitara, cediendo a las presiones del presidente Bush, los miembros de la organización de Manuel Marulanda pasaron a ser perseguidos por la Interpol en todo el mundo, como delincuentes. Hay recompensa de cientos de miles de dólares por la cabeza de los principales dirigentes. Por el comandante Manuel Marulanda, el legendario Tiro Fijo cuya muerte fue anunciada veinte veces por la CIA que tuvo que resucitarlo otras tantas, Bush pagaría millones..
En la fiesta de aniversario en que estuve, como invitado, todo fue muy simple. La sorpresa fue la presencia de un fundador de las FARC, un comandante cuya vida útil casi se confunde con la historia de su partido revolucionario..
Leído el comunicado del Estado Mayor Central de las FARC conmemorativo del acontecimiento, alguien le pidió que hablase..
Es un campesino. Se pasó la mano por la cabellera grisácea, reflexionó unos instantes, y con voz arrastrada, expresándose en un purísmo castellano de los Andes colombianos, comenzó a contar historias de la lucha..
Recordó primero la época y el escenario. Las FARC nacieron como respuesta y desafío a una política de represión, matanzas de campesinos y promesas no cumplidas. Cuando el presidente Guillermo León Valencia movilizó a 16 000 hombres del Ejército y los lanzó contra un puñado de guerrilleros en la región de Marquetália, la sobrevivencia de esos combatientes fue considerada imposible. El gobierno, para justificar la represión, inventó el mito de la República de Marquetália, insinuando que en los Andes tomaba forma un estado revolucionario dentro del Estado..
Fueron episodios de la ofensiva para liquidar la guerrilla lo que el viejo comandante contó en aquella fiesta de aniversario..
En realidad no había en Marquetália estructura administrativa alguna. Los guerrilleros eran apenas 48, y mal armados. A pesar de todo se produjo el «milagro» revolucionario. Marulanda y su gente resistieron y rompieron las tenazas del cerco montado por el ejército..
Para celebrar la victoria y crear condiciones respecto a una lucha de larga duración, las FARC fueron oficialmente constituidas el 27 de mayo de 1964. Actualmente se asumen como un Ejército del Pueblo, con 18 000 hombres y mujeres que luchan en 60 frentes distribuidos por el territorio nacional..
Al escuchar en voz de alguien que fuera protagonista de esas jornadas el relato de la epopeya de los 48 de Marquetalia, se subía en mí, desprendiéndose del sentimiento de admiración, otro de indignación por las calumnias que persiguen presentar a esa heroica gente como un bando de terroristas y narcotraficantes..
Yo sabía, por experiencia personal vivida en campamentos de las FARC, que las mujeres y hombres que en las montañas y selvas de Colombia se baten en condiciones durísimas por una sociedad humanizada, como la soñada por Bolívar, son la antítesis de la imagen que de ellos proyecta la propaganda imperialista. Pero es ésa, la falsa, y no la real, la que los media internacionales difunden por todo el mundo..
Un torrente de mentiras sobre los comandantes de las FARC llega a ritmo acelerado a los cuatro puntos del mundo. Mas aquello que el viejo comandante sentía cuando en los páramos andinos sus compañeros padecían molestias desconocidas y repugnantes introducidas por la CIA, eso nunca llegará al conocimiento de la opinión pública mundial. En la propia Colombia pocas personas supieron que el ejército suspendía los ataques cuando, en el contexto de un cerco, armas bacteriológicas llegadas de los EUA eran utilizadas para contaminar a la guerrilla..
Fue muy bella, repito, la fiesta en que participé. Allí, en una atmósfera de fraternidad revolucionaria se cantó el himno de las FARC y la Internacional, y muchachas y muchachos colombianos han traído a través de la danza la cultura de su pueblo indomable a aquella pequeña sala, similar a decenas de otras donde, por el mundo, fue recordada la saga de Marquetália..
Hace cuatro décadas que ellos se baten con coraje ejemplar. Una emoción comprensible crispó el rostro anguloso del veterano fundador de las FARC cuando fueron leídas las palabras finales del saludo de aniversario, emitido desde las montañas de Colombia por el comandante Marulanda en nombre del Secretariado del Estado Mayor Central :.
«Rendimos conmovido homenaje a todos los combatientes farcianos que ofrecieron su sangre generosa, desde Marquetália hasta hoy, por la causa de la justicia social, la paz y la libertad. Su ejemplo es un fuego moral que empuja nuestra lucha hacia la victoria final»..
Esa victoria puede tardar mucho. Pero el calendario no les afecta el ánimo. La resistencia de la insurrección colombiana ya se convirtió en un capítulo revolucionario de la historia contemporánea.. Lisboa, 3 de junio de 2003
Este artículo se encuentra en http://resistir,info
Traducción Marla Muñoz
Latinoamérica
