TEMA DE UN SEMINARIO HUMANISTA CELEBRADO EN MEXICO Y ORGANIZADO POR EL PARTIDO DEL TRABAJO DE ESE PAÍS.

Miguel Urbano Rodrigues (de Resumen Latinoamericano).

Cuatrocientos delegados, representando 94 partidos y organizaciones de 31 países de América, Africa, Asia y Europa participaron en Ciudad de México, del 14 al 16 de marzo, en el VII seminario «Los partidos y la nueva sociedad», auspiciado por el Partido del Trabajo de aquel país.
Las intervenciones incidieron en cinco temas: capitalismo contemporáneo y globalización; movimiento de resistencia y alternativas al neoliberalismo; reformulación del proyecto socialista -de la Comuna de París al siglo XXI; temas de conyuntura -11 de septiembre, nueva coyuntura mundial, movimientos sociales y movimientos políticos.
La calidad de muchas de las ponencias correspondió al reto de una temática tan ambiciosa y actual. La reflexión sobre los grandes desafíos que la humanidad enfrenta en este comienzo del siglo XXI adquirió un interés y profundidad poco comunes, manifestada en discursos que expresaban diferentes corrientes de pensamiento, llamando la atención hacia temas ideológicos, luchas universales y nacionales y la búsqueda de alternativas a la dominación imperialista y la globalización neoliberal subyacente. El predominio de las posiciones marxistas fue transparente, pero en algunas intervenciones eran identificables concepciones idealistas de raíces cristianas o cartesianas. Esa presencia de diferentes miradas sobre el mundo de intelectuales dispuestos al combate contra un enemigo común fue lo que dió valor al seminario. El plenario demostró madurez al reaccionar con serenidad a la inesperada arenga de un aventurero de la política que tomó la palabra para responsabilizar a Marx y Lenin por los fracasos de lo que llamó «el paradigma marxista-leninista de la revolución».
Estábamos en vísperas de una guerra genocida que sería desencadenada por un sistema de poder de contornos neofascistas, en violación frontal de la carta de la ONU. Esa amenaza ha sido naturalmente el tema de algunas de las ponencias presentadas (1).
En un acontecimiento político, ideológico y cultural de tan amplio espectro es difícil, en un breve comentario como éste, descender de lo general a lo particular. Pero uno de los méritos mayores del VII seminario del PT habrá sido la manera armoniosa en que algunas ponencias, que llamaron la atención de los participantes, contribuyeron a que una enorme masa de informaciones poco difundidas se insertara en la problemática de las ideas, a través del abordaje de cuestiones muy polémicas.

CHINA, RUSIA ,VIETNAM.

La ponencia de Wang Hua, director del departamento de América Latina del CC del PC de China, fue una de las escuchadas con mayor interés. Hablando de manera improvisada en español, él criticó la tesis occidental según la cual su país se estaría alejando gradualmente del proyecto socialista.
Hua afirmó que el último Congreso del PCCh, «en vez de debilitar la naturaleza revolucionaria del partido, permitió reforzarla, abriéndole un espacio muy amplio». En su opinión, para comprender la complejidad de las transformaciones en marcha es indispensable conocer la historia de un país que en 1949, cuando el partido conquistó el poder, tenía un PIB de 27 dólares. Subrayando que «ni Marx se imaginaría que los comunistas chinos se atreverían a construir su socialismo con un país tan atrasado, tan pobre», recordó que «el socialismo que hemos podido implantar en nuestra tierra no es un socialismo tipo Unión Soviética porque nuestras condiciones distaban mucho del nivel entonces existente en la patria de Lenin». En China -dijo- «solamente cuando superemos esta etapa primaria podremos construir un socialismo maduro, más orientado hacia el comunismo y esta etapa primaria del socialismo ocupará en nuestro caso 100 años, contados a partir del año 1956».
«Nuestros comunistas chinos -entatizó Wang Hua- han cometido muchos errores por los cuales tenemos que pedir disculpas a nuestro pueblo. Pero son fieles al pensamiento de Mao Tse tung y de Deng Ziao Ping, y ese es el camino para el socialismo y la autoridad absoluta del Partido Comunista de China».
Informó, a continuación, que China, con 22% de la población mundial dispone solamente de 65% de los recursos hídricos del planeta y del 7% de la tierra cultivable. Pese a haber arrancado hacia el socialismo en condiciones muy desfavorables alcanzó victorias inimaginables. En 1988 el PIB chino era la mitad del soviético, sin embargo, transcurrida una década dobla ya el de Rusia. Mientras los EUA necesitaron de 60 años para que su PIB creciera tres veces y media, el camino socialista permitió que China multiplicara por siete el suyo en los últimos veinte años. Hoy China -subrayó- ocupa el primer lugar en el mundo en la producción de 100 artículos industriales. De sus fábricas salen 29% de los televisores producidos en el planeta, 245 de las lavadoras, 30% de los aparatos de aire acondicionado, 50% de los teléfonos y cámaras filmadoras, 75% de los relojes y 735 de los tractores.
Con 150 millones de toneladas, es el mayor productor mundial de acero.
Manteniendo una tasa de crecimiento superior a 7% consigue crear anualmente 8 millones de empleos.
El plenario saludó la intervención del representante del Partido Comunista de China con una de las más calurosas ovaciones de todo el seminario.
La ponencia del representante del Partido Comunista de la Federación Rusa despertó tambien mucho interés.
Partiendo de una crítica contundente a la política de Putin y al mito de la estabilización que él habría determinado, afirmó que estamos ante la continuación de la política de Yeltsin con alteraciones cosméticas El resultado de la introducción del capitalismo, además salvaje, está a la vista: la población decreció 15 millones, el número de suicidios aumentó 80%, el parque industrial se tornó obsoleto, la salud y la educación han retrocedido de manera alarmante, miles de personas mueren congeladas, la droga se expande. Entre los muchos ejemplos del descalabro existente hizo referencia a la destrucción de la industria de tractores. Antes, durante la vigencia del socialismo, 20 fábricas producían mil tractores al día, actualmente siete fábricas producen conjuntamente 500 tractores al mes.
Expresando la esperanza de que Rusia, Bielorusia y Ucrania vuelvan a integrar un único estado eslavo y que Kazajastán y Moldavia se le unan, sometió la llamada ideología del mercado a una crítica severa, y concluyó: «sacar el país del pantano solamente será posible con el socialismo, pero un socialismo que se renueve permanentemente, integrando las mejores conquistas de la experiencia mundial en ese campo».
El objetivo principal de la ponencia presentada por el jefe de la delegación vietnamita fue aclarar aspectos de la construcción del socialismo en su país. Según él, quizá ningún otro país haya iniciado la construcción del socialismo en condiciones tan trágicas, después de una guerra de 30 años. Todavía hoy, dijo, se hacen sentir los efectos del agente naranja y bajo la tierra hay, ocultas, millones de bombas y minas que no han explotado.
Con un PIB inferior a 100 dólares en 1970, el país, víctima del bloqueo impuesto por EUA, enfrentó, después de la victoria, una inflación galopante y una producción estancada, situacion que se complicó con la desintegración de la URSS. No obstante, en la actual etapa, considerada de transición para un futuro socialismo vietnamita, el partido viene ejecutando con éxito un programa con seis puntos fundamentales, orientado a la edificación de una nueva sociedad.
Prudentes en cuanto a los objetivos a mediano plazo, los vietnamitas se muestran satisfechos con los éxitos alcanzados en la última década. El país escapó a los efectos de la devastadora crisis de Asia Oriental de 1997-98.
El PIB aumentó a un ritmo de 8,2% en el quinquenio 1991-95 y de 6,7% en el período 1996-2000, media que aumentó a 7% en 2002. De importador de alimentos que era, Vietnam es hoy el tercer exportador mundial de arroz. El número de familias pobres cayó a la mitad y anualmente son creados millón y medio de empleos, en una atmósfera de estabilidad socio-política. El partido y el estado, según el ponente, están conscientes de que subsisten muchos problemas en el terreno de la lucha ideológica y de que los resultados en el combate contra la corrupción y el burocratismo son insuficientes, pero el pueblo -75 millones- en su gran mayoría apoya la «política de transición hacia el socialismo sin pasar por el régimen capitalista».

AMÉRICA LATINA.

Los problemas de América Latina fueron tratados en un doble plano. Los grandes desafíos que afectan al continente merecieron la esperada atención, con prioridad en la lucha contra las políticas neoliberales y el ALCA y las cuestiones regionales como el Plan Colombia y el Puebla-Panamá. Pero también hubo ponencias muy interesantes sobre la situación en Chile, en la Argentina, Ecuador, Uruguay, Guatemala, Honduras, República Dominicana, Puerto Rico y otros países. Obviamente, la participación de los partidos y organizaciones de México fue particularmente significante. Los análisis de las crisis en desarrollo fueron enriquecidas con informaciones imprescindibles para la compreension de la situación global y para la toma de posición sobre un tema omnipresente en el seminario -el papel de los movimientos y partidos en la presente coyuntura histórica y el debate ideológico que la cuestión suscita.
Cuba, que envió una delegación de alto nivel, fue, como siempre, foco de atención. La exigencia de la liberación de los 5 patriotas cubanos injustamente condenados en los EEUU y allí prisioneros fue asumida por el seminario como reivindicación colectiva de todas las delegaciones.
Roberto Regalado Alvarez, del CC del PC de Cuba, presentó una ponencia importante: el debate sobre partidos y movimientos en los tres encuentros del Forum Social Mundial, en Porto Alegre.
La presencia física de representantes de las FARC-EP no fue posible porque la cabeza de los dirigentes de la guerrilla de Marulanda está puesta a premio y ellos actualmente son perseguidos como «terroristas» por las polícias de América y Europa. No obstante, una joven del Movimiento mexicano de solidaridad con las luchas del pueblo colombiano leyó un comunicado del Estado Mayor Central de las FARC-EP dirigido al seminario y al mundo.
Las intervenciones sobre la situación existente en la Argentina, Brasil y Bolivia suscitaron un interés muy especial. Por Bolivia habló un representante del MAS, de Evo Morales, y por Brasil el diputado Renildo Callheiros, del Partido Comunista de Brasil.
Fueron, sin embargo, las comunicaciones al plenario de la delegación de Venezuela las que contribuyeron decisivamente a la atmósfera de fraternidad que caracterizó los trabajos del seminario. Guillermo Ponce, coordinador del Comando político de la Revolución bolivariana presentó una ponencia sobre la conspiración internacional contra Venezuela que ha sido simultáneamente una lección de historia y un análisis lúcido de un proceso revolucionario apasionante y contradictorio, lleno de incógnitas, «cuyas luchas -afirmó- van más allá de nuestras fronteras y forman parte irreversible de la gran batalla de América Latina por su dignidad, seguridad, libertad, por la independencia y la paz».

HUMANISMO.

En la sesión de clausura en que han intervenido, además de Guillermo Ponce a nombre de las delegaciones extranjeras, el diputado Alberto Anaya y Gonzalo Yañez, los discursos de estos dos dirigentes del Partido del Trabajo, han expresado el espíritu humanista y revolucionario que marcó, de inicio a fin, un seminario que, por diferente de la mayoría de las iniciativas del género, sorprendió favorablemente los participantes extranjeros.
No hubo declaración final. Los organizadores optaron por la presentación de una docena de resoluciones, propuestas y mociones sobre temas diferentes, destacando la solidaridad con las luchas de los pueblos de la Venezuela bolivariana, de Iraq, de Palestina, de Colombia, de la Argentina, de Corea del Norte, de Brasil, Puerto Rico, Bolivia, y otros. El plenario las aprobó por aclamación.
Gonzalo Yañez informó que el Partido del Trabajo creará en breve en México una escuela para la formación de cuadros revolucionarios -Marx y Lenin fueron repetidamente citados como ejemplos inolvidables y permanentes del pensamiento humanista y revolucionario en la construcción de la historia. El PT, atendiendo a sugerencias presentadas, estudiará también la promoción de conferencias para el debate de problemas que preocupan a la humanidad y decidió ya que el VIII Seminario sobre «Los partidos y la nueva sociedad» tendrá lugar en Ciudad de México, los días 5, 6 y 7 de marzo del próximo año.
Al final, las delegaciones cantaron el Venceremos y la Internacional.
___ (1) Sobre el tema presenté una ponencia titulada «La amenaza a la humanidad del IV Reich y el papel de los partidos revolucionários en la lucha por una nueva sociedad». El economista Arturo Huerta, profesor de la UNAM, habló sobre «La contracción económica mundial en la guerra que se avecina».