Primera huelga contra Lula.
Lula subió con apoyo sindical, pero ahora afronta la primera huelga contra su gobierno.
23 mil trabajadores metalúrgicos de San Pablo, en Brasil, se declararon en huelga este miércoles para exigir que mejoren las condiciones laborales.
La protesta fue convocada por Forza Sindical, el segundo gremio metalúrgico de ese país, que respaldó a Lula durante la campaña electoral que lo llevó a la presidencia en octubre del año pasado.
La lucha política del actual mandatario brasileño comenzó en la década de los 70 precisamente en los sindicatos metalúrgicos de las enormes zonas industriales de San Pablo.
San Pablo es la principal industrial de Brasil.
Este miércoles se paralizaron 40 empresas, pero la dirigencia sindical sostiene que la huelga se realizará de forma escalonada en las 1.500 fábricas que funcionan en el eje industrial de esa ciudad.
Paulo Pereira, presidente de Forza Sindical, dijo sin embargo que la protesta no tiene motivación política sino "estrictamente económica". El principal reclamo es un ajuste salarial de 10%.
Los sindicalistas argumentan que a pesar del aumento de 10,26% que recibieron en noviembre del año pasado, la inflación acumulada de los últimos cuatro meses superó esa cifra.
La primera.
Esta es la primera huelga obrera contra el gobierno de Lula da Silva, que comenzó su mandato en enero de este año. Pero los sindicatos parecen no estar tan unidos como en los tiempos en los que el mandatario encabezaba este tipo de protestas.
Datos de la huelga.
Esta es la primera huelga obrera contra el gobierno de Lula da Silva Los obreros reclaman un aumento del 10% Forza Sindical acusó a la oficialista Central Única de Trabajadores (CUT) de "debilitar" la protesta obrera. La CUT anunció que este mismo miércoles presentaría una propuesta de mejora salarial para los metalúrgicos.
Según los medios de comunicación brasileños, a lo largo del día, por lo menos seis empresas reanudaron sus labores después de acordar un aumento salarial para sus trabajadores.
Además de los metalúrgicos, también los empleados públicos están a punto de paralizar sus actividades para oponerse a un proyecto del gobierno para reformar la seguridad social.
El sindicato que agrupa a los 800 mil empleados públicos federales del país informó de que han establecido el ocho de abril como la fecha en la realizarán una huelga de 24 horas.
El sector de los trabajadores del Estado brasileño es uno de los que más apoyó al Partido de los Trabajadores (PT), que encabezó la coalición de organizaciones políticas que llevó a Lula a la presidencia.