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Latinoamérica

22 de febrero de 2003

Una manifestación de repudio a la guerra recibió a Aznar en la embajada española en México

Georgina Saldierna / La Jornada / Rebelión

Para rechazar la posición que ha adoptado el jefe del gobierno español, José María Aznar, a favor de la guerra, y cualquier intento de presionar a México para que adopte una postura similar, integrantes de organizaciones sociales realizaron el pasado 20 una manifestación frente a la embajada de España.
Pertenecientes al Frente Zapatista de Liberación Nacional y a otras agrupaciones que se sumaron al movimiento No a la guerra en nuestro nombre, los manifestantes resaltaron que México es un país soberano e independiente que no acepta presiones de ningún tipo.
Mediante consignas y carteles criticaron a Aznar, lo declararon persona no grata en el país e incluso pidieron que se le aplicara el artículo 33 de la Ley de Población, precepto que ha utilizado el gobierno para expulsar a españoles presuntamente vinculados con la organización vasca ETA.
De esta manera, se escuchó: ''Bush y Aznar, ya dejen de rebuznar'' y ''Franco, Aznar, el mismo muladar'', mientras se podía leer en mantas y pancartas, ''Aznar no seas animal... no a Guernica''.
Las consignas se entreveraron con otras que demandaban la paz. ''De Chiapas a Bagdad, queremos la paz'', gritaron los manifestantes, quienes permanecieron frente a la sede diplomática sin que se registrara ningún incidente, pese a la molestia y el evidente nerviosismo del personal de seguridad de la legación española.
Si bien el plantón no reunió a más de 50 activistas, el despliegue de mantas y cartelones, así como la presencia de un gran número de fotógrafos, camarógrafos y reporteros provocó un bloqueo parcial del tránsito en las calles de Galileo, en la colonia Polanco.
De manera simultánea, varias mujeres se dedicaron a distribuir volantes en contra de la guerra entre los automovilistas que circulaban lentamente por la zona, quienes en su mayoría mostraron su apoyo al plantón.
La manifestación se prolongó por hora y media, sin que se interrumpieran las actividades de la embajada.
Luego de entregar una carta signada por decenas de personas, en la que manifiestan su rechazo a la guerra contra Irak y se pronuncian en favor de la paz, los manifestantes se retiraron del lugar.
Por la tarde, los manifestantes pacifistas tuvieron una reunión de evaluación y de planeación de sus próximas actividades, en donde acordaron efectuar una caravana en escuelas y sindicatos para fomentar la cultura en contra de la guerra, un mitin frente a la embajada de Estados Unidos el primero de marzo por la tarde y un foro sobre el tema el 8 del mismo mes.