La Apdhb acusa a militares de matar, a tiros, a dos personas
La Paz | Agencias.- La Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (Apdhb) responsabilizó ayer a miembros del Ejército por la muerte de un obrero y de una enfermera la semana pasada, durante el conflicto entre militares y policías que se saldó con 29 víctimas fatales y casi dos centenares de heridos en La Paz.
El presidente de la Apdhb, Waldo Albarracín, hizo ayer la denuncia con el respaldo de un vídeo, enfocado desde la parte alta de una calle dominada por tropas militares hacia el techo de un edificio durante las protestas en las que fallecieron el albañil Wilmer Collanqui y la enfermera Ana Choque, el jueves pasado.
Bandera blanca
La enfermera acudió al lugar, una casa de tres plantas, casi enfrente del templo colonial de San Francisco, en auxilio del obrero que había caído herido de bala en el techo.
Según todas las versiones, la funcionaria tenía en sus manos una bandera blanca de la Red 118 de Emergencias, cuando llegó al techo y recibió el impacto de otra bala.
Acto seguido, dijo Albarracín en rueda de prensa, la médico Carla Espinoza "subió también con una bandera blanca y recibió otro disparo", desde la esquina de las calles Comercio y Jenaro Sanjinés que dominaron los militares por varias horas.
Minucioso
El defensor de los derechos humanos explicó que la organización hizo una minuciosa revisión del sonido registrado en el vídeo, con la voces de los militares, y constataciones en el lugar para llegar a esas conclusiones.
"Los (militares) que hablan, identifican el lugar y las circunstancias, mencionando el techo, la ventana y las calaminas del edificio", señaló en referencia a la presunta confusión en que incurrieron los soldados, al creer que Collanqui tenía en sus manos un arma cuando en realidad era un grupo de herramientas metálicas.
Cuestión
Waldo Albarracín cuestionó que los militares no hubiesen utilizado binoculares para examinar con más detenimiento el lugar, pues, de esa manera, habrían advertido de que se trataban de un albañil desarmado y de un miembro de una organización médica.
Con esos indicios, el Presidente de la Apdhb anunció que esa organización "hará todos los esfuerzos para identificar a los responsables de este hecho", que aún mantiene en cuidados intensivos del hospital donde trabaja a la doctora Espinoza, con una herida grave en la mandíbula y el cuello.
No es un ataque
El vicepresidente de la Apdhb, Sacha Llorenti, aclaró que "esto (la denuncia) no es un ataque contra las Fuerzas Armadas y eso queremos dejar claro, pues la institución no comete delitos sino algunos individuos".
"Exigimos que se sancione penalmente a los responsables de estos hechos y que no queden en la impunidad", manifestó Llorenti.
Amnistía pide investigación
Amnistía Internacional (AI) pidió ayer al Gobierno de Bolivia que "restaure el orden y garantice el respeto a los derechos humanos".
En un comunicado emitido en su sede en Londres, la organización insta a las autoridades bolivianas a restablecer el imperio de la ley y a "llevar ante la justicia" a los responsables de la revuelta social que acabó con una treintena de personas muertas y más de 150 heridas.
"Estos acontecimientos deben ser investigados -afirma Amnistía en su nota-. Tanto las acciones del Ejército, que parece que hizo uso excesivo de la fuerza, como la presencia de francotiradores".
Según AI, es necesaria una acción inmediata por parte de las autoridades "para garantizar el respeto total por los derechos humanos".
La organización pidió al Gobierno boliviano que las fuerzas del orden respeten los estándares internacionales en lo que respecta al uso de la fuerza y de las armas en manifestaciones y protestas.
AI añade que, para evitar que el conflicto cobre proporciones aún mayores, el Ejecutivo debería reabrir vías de diálogo "que ofrezcan soluciones a corto y a largo plazo".
CASI 30 MUERTOS
Veintinueve personas fallecieron, tres están desaparecidas y 189 resultaron heridas debido a las revueltas que vivió la ciudad de La Paz la semana pasada, según un informe oficial dado ayer a EFE por la Cruz Roja Boliviana (CRB).
La cifra de afectados fue conciliada en una reunión del Sistema de Reparaciones Hospitalarias del país, en el que participan las autoridades sanitarias públicas y privadas, representantes de la Organización Panamericana de la Salud y de la Cruz Roja local.
El informe señala que varias personas heridas aún se encuentran en estado grave.
Los desaparecidos son tres varones, de 18, 22 y 40 años, todos de la ciudad de La Paz, según las denuncias recibidas de los familiares.
Ayer falleció Antonio Castro Coca (26 años), un policía herido el miércoles en el tórax y la pierna.