Las actividades comerciales, profesionales, educativas y de transporte se reanudaron ayer en República Dominicana tras la huelga general del martes contra la política económica del gobierno del presidente Hipólito Mejía, que dejó un saldo de nue-ve muertos y más de 40 heridos.
Pero los sindicatos advirtieron al gobierno que continuarán con sus movilizaciones contra el alza de productos de primera necesidad y los combustibles, los apagones diarios y en repudio a las políticas delineadas e impuestas por el FMI.
Según dirigentes de la coordinadora que convocó al paro, que integran decenas de organismos civiles, sindicatos y partidos políticos menores, la protesta representó un "plebiscito" contra la política económica del gobierno, al que dieron plazo de 30 días para que responda a los reclamos.
No obstante, ayer prevalecía una tensa calma, ya que en la capital y pueblos del interior del país se mantenía un intenso patrullaje militar y policial. DPA Y REUTERS