Arnaldo Pérez Guerra
aperezguerra@yahoo.es

Fotografía: Jorge Zúñiga
tallerintegral@hotmail.com

El 27 de octubre Alejandro Rodríguez Escobar, Pablo Morales Fuhrimann, Rodolfo Retamales Leiva y Marcelo Villarroel Sepúlveda iniciaron la huelga de hambre exigiendo la libertad de todos los prisioneros políticos, y la inmediata libertad de quienes reúnen los requisitos para acceder a "beneficios carcelarios". El domingo 16 de noviembre, luego de 20 días, depusieron la movilización al conseguir la salida dominical de Rodolfo Retamales. Pablo Morales saldrá el 23 de noviembre, y Marcelo Villarroel el 28 de diciembre. Por su parte, Alejandro Rodríguez, en prisión desde 1992, continúa la huelga: "Al no existir ninguna voluntad política de parte del gobierno para resolver en forma clara y concreta esta situación, ya no es admisible seguir esperando. Hoy se nos pretende incluir en el Proyecto sobre Derechos Humanos gubernamental, que no hace más que consolidar y extender la impunidad usándonos como ‘moneda de canje’ para la supuesta reconciliación".

El 13 de noviembre, se sumó al movimiento iniciado por 21 presos políticos el 10 de noviembre -que demandan la aprobación del Proyecto de Ley de Indulto-, René Salfate Osorio recluido en Antofagasta. Las presas políticas Oriana Alcayaga Zepeda -hija de un ejecutado político- y Elizabeth Núñez Duarte, encarceladas en el Hospital Penitenciario, iniciaron la huelga el 17 de noviembre: "Vemos con preocupación que no hay una real voluntad y compromiso de este gobierno. Los presos políticos de hoy no constituimos una realidad desligada de los acontecimientos vividos en los 17 años de terror, hambre, persecución, tortura y muerte. Estamos cansadas de escuchar las promesas, las esperas y los trámites interminables de los personeros de gobiernos, diputados, ministros y otros que no dejan de presionar y exigir una carta de buena conducta o de arrepentimiento para acceder a posibles beneficios o la libertad plena, sin embargo, continuamos aquí encerradas por años, con una justicia que no hace justicia". Lo propio hicieron los presos políticos miristas Pedro Rosas Aravena -aquejado de un cáncer testicular- y Julio Peña Parada, gravemente enfermos: "Demandamos poner fin a un castigo infame, de acusaciones y procesos sin defensa y condenas abusivas, con más de una década de aislamiento y encierro; de violación de todos los acuerdos internacionales contra la tortura y sobre el derecho a defensa, debido proceso y libertad condicional; sin acceso a beneficios carcelarios; en una cárcel que ha pretendido aniquilarnos política y físicamente para arrancarnos de nuestras luchas, familias y pueblo. Nuestra libertad no puede estar condicionada ni ser manipulada. Por ello rechazamos cualquier estrategia morbosa que intente igualarnos en nuestra lucha y condición de prisioneros rebeldes con la de quienes han sido torturadores, viles asesinos que al amparo del poder del Estado desaparecieron y sometieron a nuestro pueblo por la fuerza y la violencia mas brutal".
Abraham Larrea Zamorano, en prisión desde el 30 de septiembre de 1990, y en huelga desde el 30 de octubre, señala: "Con 13 años de prisión y un promedio de 15 huelgas de hambre, exijo se resuelva mi situación procesal y jurídica. Fui condenado a 34 años de cárcel, 23 de los cuales corresponden a hechos ocurridos antes del 11 de marzo de 1990, en pleno régimen militar". Por su parte, Álvaro y Fernando González Olivares advierten: "La libertad no es sólo una aspiración, sino que por sobre todo, es un legítimo derecho. Es urgente, entonces, transformar la voluntad en decisiva acción política para la búsqueda de la libertad plena para todos los presos políticos".
De aprobarse el proyecto de Ley de Indulto, no todos recuperarán la libertad. Al menos, una decena no podrá optar al proyecto por no reunir los requisitos estipulados por los legisladores José Antonio Viera-Gallo, Gabriel Valdés, Mariano Ruiz Esquide y Fernando Flores. Entre los que no serán beneficiados están Elizabeth Núñez Duarte, Esteban Burgos Torrealba, René Salfate Osorio y Mauricio Hernández Norambuena. Familiares, amigos y organizaciones sociales y populares han anunciado diversas campañas. Todos los domingos se realiza un mitin en las afueras de la Cárcel de Alta Seguridad a las 11:30 horas. El lunes 24 a las 19:00 horas se llevará a cabo un mitin en el Paseo Ahumada con Alameda. También se ha anunciado una marcha para el 5 de diciembre, desde Plaza Los Héroes, a las 18:30 horas. Los comunicados y actividades en apoyo de los presos políticos se pueden encontrar, entre otras páginas webs en: www.libertad.ya.st