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El ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada que está escapando como una rata del país debe ser juzgado por delitos de lesa humanidad con las leyes bolivianas; caso contrario, acudiremos a la Corte Penal Internacional", afirmó hoy el diputado y líder cocalero, Evo Morales.
Ante la virtual renuncia de Sánchez de Lozada, representantes del Estado Mayor del Pueblo ofrecieron a las 16.45 una rueda de prensa para anunciar que "Goni no renuncia sino que el pueblo boliviano ha derrotado a la mafia política". En la denominada "guerra del gas" se registraron 37 muertos y más de 200 heridos de bala.
Morales Ayma señaló que para que retorne la paz al país el nuevo gobernante debe convocar a una reunión con todos los sectores sociales para anunciar la convocatoria a una Asamblea Popular Constituyente, la recuperación de todos los recursos naturales sobretodo los hidrocarburos y para acabar con la corrupción y la impunidad.
El dirigente fabril Oscar Olivera dijo que se ganó una batalla pero no la guerra. "El sentimiento y el triunfo popular deben ser un ejemplo a nivel nacional para continuar en nuestra labor de unidad, organización, movilización y propuesta desde abajo, desde las bases", aseveró.
Nuevo gobierno El diputado cocalero consultado sobre la posibilidad de ser parte del futuro gobierno, respondió: "El MAS no quiere pegas, no co-gobernará con Carlos Mesa ni con nadie porque tenemos grandes diferencias culturales e ideológicas".
Sugirió que el nuevo gobierno no ingrese al error del cuoteo político como la megacoalición sino que priorice que todos los cargos sean institucionalizados con gente honesta, profesional y capaz.
Sobre las medidas de presión, como los bloqueos y movilizaciones, los portavoces del Estado Mayor del Pueblo señalaron que ellos no deciden sino que se convocará a una reunión a nivel nacional en La Paz.

Bolivia se prepara para recibir al nuevo presidente de la República, Carlos Mesa. El movimiento social ve concretado su objetivo luego de 74 muertes y más de 400 heridos.
Gonzalo Sánchez de Lozada se apresta a abandonar el país.
Luego de más de un mes de iniciado el movimiento social en el país, que empezó planteando el rechazo a la exportación del gas a mercados estadounidenses y por la recuperación de los hidrocarburos, el mismo que fue denominado como la "guerra del gas", y una semana de intensa represión policial y militar que dejó un saldo de 74 muertos y más de 400 heridos, en la que la voz generalizada fue "la renuncia del Presidente", hoy Bolivia se prepara para recibir al nuevo presidente de la República, Carlos Mesa, resultado de una sucesión constitucional en el marco de la Constitución Política del Estado, CPE, y el sistema domocrático.
Sólo se aguarda la instalación del Congreso Nacional, donde se leerá la carta que dejó Sánchez de Lozada, la misma que contiene su renuncia; sin embargo, aún existe demora debido a que algunos parlamentarios aún no arriban a la sede de gobierno.
Mientras tanto luego de intensos movimientos militares, el aún primer mandatario se apresta a salir del país, junto a su familia, como también el ministro de Defensa, Carlos Sánchez Berzaín, mano derecha de Sánchez de Lozada y su hombre de confianza en este tiempo de mandato que tuvo .
Ante este panorama en el país existe una "alegría contenida" que aguarda el momento en el que oficialmente se conozca la dimisión del Presidente, por lo que aún los piquetes de ayunadores que se encuentran a lo largo y ancho del territorio boliviano aún permanecen en la medida para realizar la vigilancia al proceso de transición que le toca vivir al país, luego de todo lo sucedido.