El plan se conoce de a poco
(Bolpress.com).- El gobierno comenzó a anunciar el paquete de sus medidas para reactivar la economía, pero de manera fragmentada. Después del frustrado "dolarazo" de la semana pasada, anulado después de una fuerte reacción popular que le atribuyó la autoría al poder Ejecutivo, el presidente adelantó algunos anuncios y las medidas comienzan a ser conocidas de a poco.
Tras asumir el mandato, el pasado 6 de agosto, Gonzalo Sánchez de Lozada había pedido 90 días para poner en marcha una serie de medidas destinadas a la reactivación de la economía, medidas que algunos sectores de la población esperaban que se pareciera el decreto supremo 21060, aquel que presentado la noche del 29 de agosto de 1995, frenó la hiperinflación pero poniendo las bases para el establecimiento de la economía de mercado en Bolivia. Ahora, todo indica que el paquete de medidas a ser presentado por el gobierno será distinto al presentado por Víctor Paz Estenssoro.
Tres días después de anulado el intento de desdolarizar la economía, el presidente anunció el domingo la restitución del pago del bonosol y la universalización del seguro materno-infantil, un hecho que fue interpretado como un intento de generar un clima de opinión favorable a los anuncios que serán realizados en los próximos días. Sin embargo, esos dos anuncios fueron cuestionados por diversos sectores porque el gobierno aún no explica con claridad de donde saldrán los recursos para pagar estos dos beneficios.
Para el próximo domingo el gobierno anunció la presentación de lo que llama el "Plan de obras con empleos" y para la siguiente semana el lanzamiento de la medidas legales destinadas a reactivar la economía y rebajar el déficit fiscal.
Reformas
Según analistas y empresarios, una de las medidas del paquete del gobierno es la eliminación del régimen tributario simplificado (al que están inscritos casi la totalidad de los comerciantes minoristas) y la revisión de los tributos petroleros, esto con el fin de que los impuestos que pagan las empresas petroleras en el país mejoren y tengan mayor impacto en los ingresos fiscales.
La nueva Ley de Reforma Tributaria establecerá el establecimiento de una renta progresiva para las personas que tienen altos ingresos y la suspensión impositiva para la gente de bajos recursos. El espíritu de la reforma es, según la explicación del gobierno, el establecimiento de la progresividad impositiva, es decir, que "las personas de altos niveles de ingreso tributen más", situación que no es del agrado del sector empresarial que considera que el gobierno debería optar por rebajar los impuestos y ampliar el universo de contribuyentes.
La nueva ley también busca que se paguen impuestos por el uso de celulares y el servicio de Televisión por Cable.
Los sectores empresariales esperan que el gobierno cumpla con la rebaja del Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 13 al 12.5 por ciento y del Impuesto a las Transacciones (IT) del 3 al 2.5 por ciento, esto con el objetivo de apoyar la reactivacion de las empresas.
Todas estas medidas, que se prevé serán anunciadas el próximo 10 de noviembre, tienen como objetivo bajar el déficit fiscal que este año llegará al 8 por ciento. Una mejora en las recaudaciones tributarias se ha convertido en una de las condiciones impuestas por los organismos internacionales para otorgar recursos financieros que pongan en marcha lo que el gobierno llama el "Plan Bolivia", una mezcla de los planes de gobierno que habían enfrentado al MIR y MNR en la campaña electoral y que ahora son socios en el gobierno.